A cuatro años de ocurridos los hechos imputados, hoy se decretó la prisión preventiva de Gregory Sepúlveda Alarcón, quien habría encabezado al grupo que en 2016 llevó a cabo dos atracos en dependencias del casino Monticello, logrando llevarse más de $200 millones.
Así lo señaló el fiscal de Análisis Criminal O'Higgins, Carlos Fuentes, detallando que el imputado "junto a una banda que él lideraba, hizo explotar mediante el método de saturación por gas dos cajeros automáticos en dos fechas distintas, sustrayendo aproximadamente un monto de $220 millones".
El persecutor aseguró además que Sepúlveda y su grupo
"cometía este tipo de delitos en diversas zonas del país".
Los robos en cuestión ocurrieron el 11 de julio y 27 de septiembre de 2016. De acuerdo al Ministerio Público, los sujetos estudiaron en días anteriores el recinto ubicado en la ciudad de San Francisco de Mostazal, adquirieron herramientas especiales para el atraco, y sustrajeron vehículos en Santiago para trasladarse hasta el casino.
Allí intimidaron con armas de fuego a los guardias de seguridad e hicieron explotar los cajeros. En la primera oportunidad se llevaron $60 millones y en la segunda $168 millones. En la huida lanzaron miguelitos y ya en el camino a la región Metropolitana dejaron botados los vehículos robados y abordaron otros.
Después de ello, el imputado abandonó el país a través de un paso no habilitado. Fue ubicado tiempo después en Múnich, Alemania, luego que intentara robar otro cajero tras hacerlo explotar, nuevamente con el método de saturación por gas.
Ante ello el Ministerio Público solicitó su extradición, la cual fue materializada la semana pasada por personal de Interpol.
La participación de Sepúlveda fue determinada por los registros de autopistas, diligencias intrusivas y por el levantamiento de ADN en los sitios del suceso que correspondían al imputado.
