A fines de 2018, cuando se publicaron los resultados de la Prueba de Selección Universitaria, sorprendió el dato de que un 79% de los puntajes nacionales habían correspondido a postulantes hombres. Ese mismo año, los hombres obtuvieron en promedio 17 puntos más que las mujeres en la prueba de Matemática, 18 puntos más en la de Ciencias, 8 más en la de Historia y ella solamente los aventajaron en Lenguaje, donde sacaron 5 puntos más.
La brecha de género fue una de las críticas permanentes que se le hizo a la PSU, y por eso existía expectación sobre el resultado que entregara el nuevo sistema de ingreso a la educación superior inaugurado en 2020: la Prueba de Transición (PDT), cuyos resultados salieron a la luz el miércoles 11 de febrero.
Coincidentemente, ese día se conmemoraba en todo el globo el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, una fecha instaurada por Naciones Unidas para promover la participación del sexo femenino en la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM, por sus iniciales en inglés).
Por eso resultó especialmente decepcionante la noticia: aunque la PDT logró acortar otras brechas largamente anheladas —como la distancia entre colegios particulares pagados y municipales, que se redujo en todas las pruebas—, no fue eficiente en acortar la brecha de género en matemáticas.
La diferencia de puntaje en la prueba de matemáticas entre ambos sexos fue de 17 puntos en el proceso de admisión anterior y esta vez subió a 22, un aumento absoluto de cinco puntos. En Ciencias, eso sí, se redujo en cuatro puntos y en Lenguaje disminuyó en tres, mejorando la performance de los hombres.
Al momento de presentar los resultados de la medición, el subsecretario de Educación Superior, Juan Eduardo Vargas, se mostró contento porque "se redujeron todas las brechas en todas las pruebas entre los egresados de colegios particulares pagados y colegios municipales".
El subsecretario aseguró que le llena "de alegría y esperanza" el acortamiento de las brechas que se lograron, "por más que el contexto era complejo". "Evidentemente hubiésemos preferido que esto se hubiera dado en un contexto de no pandemia, pero aun así lo quisimos hacer porque sabíamos, teníamos el convencimiento, de que el cambio era necesario", dijo.
"Respecto a las brechas de género, se redujeron en la prueba de Ciencias, en la de comprensión lectora no hay —técnicamente, como nos indica el Demre— y se mantuvieron relativamente similares en Matemático, aunque hubo un pequeño incremento", dijo.
Para el subdirector de Política Educativa de Educación 2020, Jorge Ibáñez, los resultados de la PDT muestran que "continúan las brechas en desmedro de las mujeres, especialmente en ciencias y matemática". "Estas brechas nos deben llevar a pensar en la construcción de un instrumento y un sistema de admisión a educación superior libre de sesgos de género, que no reproduzca las inequidades del sistema educativo, que por cierto también requiere cambios profundos en esta línea", dice a Emol.
Desde la organización llaman a "profundizar significativamente algunos de los cambios implementados en el proceso actual", como "reconocer y valorar en mayor medida las trayectorias educativas de los y las jóvenes en su etapa escolar, aumentando el peso de su Ranking y NEM en la postulación a educación superior, en desmedro de la prueba de turno" y "avanzar hacia la evaluación de competencias y habilidades mayoritariamente por sobre contenidos específicos".
