Desde el teatro del Centro Cultural de Carabineros, y acompañado por autoridades como el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, el general director de la entidad, Ricardo Yáñez, presentó esta mañana un decálogo en materia de derechos humanos "aplicados a nuestra doctrina y a la función policial", en el marco de la reforma a la entidad.
"Creemos fundamental en este trabajo que surjan y se incorporen estas competencias en los planteles de formación. Es en el aula de clases, es en los jóvenes que ingresan a la institución, en su proceso formativo inicial, donde tenemos que generar los agentes del cambio y los docentes juegan un rol fundamental", sostuvo Yáñez.
Agradeció en la instancia la cooperación de quienes ayudaron para "desarrollar este marco normativo, regulatorio, interno que nos permite generar estos principios y este decálogo" y precisó que "cada carabinero lo tendrá que plasmar en las miles de actuaciones que tenemos diariamente en nuestro país".
Los 10 ejes presentados
En primer lugar, la "Declaración de principios doctrinarios en Derechos Humanos de Carabineros de Chile, se establece que los derechos de las persona "son propios de la dignidad humana". Esto quiere decir que su protección y respeto es absoluta y que nadie, bajo ninguna circunstancia pierde su condición de ser humano ni, por ende, su dignidad.
En segundo lugar se presenta que la Declaración Universal de los Derechos Humanos, "es una conquista de la humanidad que debe enorgullecernos a todos sin distinción y surge como respuesta al abuso y sistemáticas violaciones a los derechos de las personas cometidas por los Estados".
A continuación, se menciona que las instituciones del Estado son "garantes" de la promoción y defensa de estos derechos por lo que Carabineros "es un actor relevante en su rol permanente de servicio a la comunidad".
En cuarto lugar se destaca la protección de la vida y la dignidad humana, "uno de los principios de la Doctrina Institucional", cuyo fundamento es la declaración mencionada en el segundo eje.
Como número cinco, se precisa el "discernimiento ético". Este apunta a que todo carabinero "asume el compromiso con el respeto y protección de estos derechos, mediante los diversos procesos educacionales en el desarrollo de su carrera, y a su vez, mediante su capacidad reflexiva para decidir y resolver conflictos en el ejercicio de sus funciones".
Luego la declaración refiere a "la responsabilidad social y ética que contrae la institución con las personas se manifiesta en forma individual por parte de cada hombre y mujer carabinero, teniendo su máxima expresión en el irrestricto respeto y protección a los derechos humanos".
En séptimo lugar se acota que "Carabineros reconoce los organismos nacionales e internacionales" que velan por el respeto a los derechos de las personas ya que "existen para promover una cultura que garantice su protección".
"La única forma de tomar decisiones correctas es que la formación de nuestros carabineros les permita discernir éticamente qué tipo de acción tomar en cada momento, en cada circunstancia de acuerdo con las condiciones que están dadas en los distintos momentos".
Subsecretario Juan Francisco Galli
En el octavo eje se destaca el desarrollo y modernización permanente. "Nuestra institución incorpora en su normativa interna estándares internacionales en materia de derechos humanos aplicados a la función policial".
Por su parte, en el noveno se menciona que la institución tiene un compromiso ineludible con la sociedad, el que se materializa en sus procesos educacionales. "Un carabinero más profesional y mejor preparado requiere de una sólida formación inicial en el ámbito de los derechos humanos aplicados a la función policial".
Finalmente, se destaca que el efectivo policial "por un imperativo ético que surge de la Doctrina Institucional, es y será siempre un defensor y garante" de los derechos.
Yáñez dijo que se han hecho más de 35 mil capacitaciones durante el año 2021. "Creemos hoy día que con la incorporación de estos principios, que lo hemos llevado y aterrizado en conceptos muy genéricos, muy básicos, permitan internalizarlos y transformarlos en actuaciones, en la cercanía, en la forma de vincularse con las personas, en la forma de empatizar con los problemas de los demás sin dejar de lado el rol y la obligación que le corresponde como garante de la seguridad pública", precisó.
Por último, sostuvo que "todos los trabajos que se han realizado en materia de la reforma y de derechos humanos como los protocolos y estos principios, todo ha tenido la opinión de la directora de derechos humanos que trabaja directamente con el INDH, con la Unicef, con la Defensoría de la Niñez y, por cierto, tiene las competencias de tener todos los cursos y acreditaciones internacionales en esta materia".
Relevancia para la toma de decisiones
Por su parte, Galli valoró la instancia y señaló que "algo que hemos dicho varias veces es que la reforma es un proceso que no va a terminar ahora, es una reforma a largo plazo que tiene como horizonte el año 2027, el centenario de Carabineros de Chile", acotó.
En esa línea, dijo que esta reforma no puede quedarse en declaraciones, sino que hay que llevar los principios de ella al trabajo policial diario y "qué manera más concreta de hacerlo que justamente en este encuentro nacional docente, es decir, con aquellos que están formando a los nuevos carabineros, que tengan desde ya, desde la formación, un enfoque de derechos humanos".
"Eso es justamente el objetivo de este encuentro y del decálogo que cada carabinero va a tener en esta materia y va a tener que tener presente en cada toma de decisiones, en cada procedimiento policial", agregó.
Incluso, precisó que quizás ese es el principal factor, "el discernimiento ético, es decir, que cada carabinero casi intuitivamente al momento de tomar una decisión de aplicar la fuerza, de la forma de resistir, de vencer la resistencia de aquella persona que va a ser detenida, por ejemplo, o la forma de implementar el protocolo de orden público, sea siempre un enfoque de derechos humanos, sea siempre capaz de tomar la decisión correcta". Aunque de todas maneras, reconoció que eso es un proceso largo.
"La legitimidad institucional se gana tomando decisiones correctas y la única forma de tomar decisiones correctas es que la formación de nuestros carabineros les permita discernir éticamente qué tipo de acción tomar en cada momento, en cada circunstancia de acuerdo con las condiciones que están dadas en los distintos momentos", concluyó.
