En estos momentos, se encuentra en desarrollo la discusión del Senado frente a la acusación constitucional en contra del Mandatario.
El Mercurio
Por cerca de dos horas, el abogado Jorge Gálvez expuso este lunes ante el Senado los argumentos en defensa de la acusación constitucional en contra del Presidente Sebastián Piñera, por su presunta participación en la venta de la minera Dominga. A través de su presentación, el penalista aseguró que el libelo está basado en "hechos falsos" y "mañosos".
"Creo que como defensa hemos cumplido el cometido que nos encargó el Presidente de la República, en el sentido de demostrar que la acusación constitucional carece de todo merito. Se basa en hechos falsos e involucra la mañosa distorsión de los hechos, y hemos demostrado fehacientemente que ni el Presidente de la República, ni su familia han cometido ilícito o irregularidad alguna", recalcó el abogado tras terminar su presentación.
A su vez, la defensa del Mandatario estimó que a través de su argumentación se logró demostrar que "desde la perspectiva jurídica que la presente acusación constitucional viola la Constitución, viola los tratados internacionales y que no se configuren en este caso, los hechos que podrían dar lugar a la responsabilidad política del Presidente".
En esa línea, el ministro de la Secretaría General de la Presidencia de Chile (Segpres), Juan José Ossa, determinó que "hemos vivido una jornada, donde la defensa del Presidente sencillamente demolió todos y cada uno de los argumentos que dieron los acusadores, demostró que está basada en hechos falsos y que no se ha cometido ningún ilícito".
Por ello, el secretario de Estado hizo un llamado a los senadores a que "no se dejen amenazar por otros parlamentarios" al momento de llevar a cabo la votación que definirá si la acusación constitucional en contra del Presidente Piñera es fundamentada.
"Quisiera hacerle una invitación a no dejarse amenazar. El diputado Gabriel Silber (DC) decía que iba a ser vigilante de cómo votaban los senadores de su coalición, esa es una amenaza". En tanto, solicitó a los parlamentarios de la Cámara Alta a que resuelvan la discusión "en conciencia y como jurado".
"En definitiva, el llamado a los senadores, a diferencia de lo que ocurrió en la Cámara de Diputados, donde solo se declaró la admisibilidad de la acusación, es a resolverla en conciencia y como jurado. Por momentos hubiéramos esperado que algunos senadores prestaran más atención a la defensa, porque tienen que fallar como jurado", señaló Ossa.
Pese a lo anterior, el ministro aseguró estar "conformes con la defensa, aprovecho de felicitar al abogado Jorge Gálvez, y en definitiva esperamos que durante la tarde se tenga una discusión con altura de miras, donde se tome en consideración lo que significa para la democracia una acusación constitucional contra un presidente".
En cuanto al desarrollo de la acusación constitucional que en ese momento se discute en la Cámara Alta, a raíz que ya terminó la presentación de la defensa, ahora toca que los senadores intervengan hasta por 15 minutos cada uno por ambos capítulos, proceso que se podría alargar por cerca de 10 horas. Posterior a esto, los parlamentarios deberán emitir su voto.
Por su parte, el ministro vocero de Gobierno, Jaime Bellolio, confesó no tener certera de que todos los senadores del oficialismo vayan a votar en contra de la acusación constitucional. Sin embargo, hizo una comparación con lo ocurrido en la Cámara de Diputados y destacó el "cómo en 14 horas no se puede decir nada, y después en 5 horas de la defensa del abogado Gálvez, se demolió cada uno de los falsos argumentos de las incoherencias e ignorancias con querer".
Bajo ese contexto, Bellolio recalcó que "la defensa ha ratificado que no hay ningún tipo de ilegalidad. Segundo, que los hechos y la operación en sí misma no tenía ninguna ilegalidad y participan la familia del Presidente y no el Presidente como de forma mentirosa se dice, a través de un fondo que dice que cumplió con todas las regulaciones legales y también las regulaciones tributarias".
En base a lo anterior, el vocero de Gobierno afirmó que la acusación constitucional en contra del Presidente se basó en "un interés político y en un interés electoral que lo dijeron los mismos firmantes. Qué triste que una acusación constitucional contra un presidente, se haga meramente por razones políticas-electorales, eso daña la democracia".
