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Debate por la autonomía de la Constituyente complica opciones del Frente Amplio en la mesa directiva

Algunos convencionales plantean que sería una buena señal que el colectivo del Presidente electo no participe de la dirección del órgano. Desde Apruebo Dignidad defienden su independencia.

25 de Diciembre de 2021 | 11:38 | Por Equipo de Crónica Constitucional
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Tres veces el Presidente electo, Gabriel Boric, repitió frente a los convencionales reunidos este martes en el pleno de la Convención que respetaría la autonomía del órgano redactor de la nueva Constitución.

"Yo no espero en ningún caso una Convención partisana, una Convención al servicio de nuestro gobierno”, les dijo.
También lo reiteró al conversar con la prensa y aseguró que “no voy a tratar de pautear a la Convención respecto a lo que tiene que hacer, sino que más bien respetar e implementar lo que acá deliberativamente se decida".

Igualmente, su visita a la Convención —durante la cual sostuvo reuniones con la presidenta Elisa Loncon (escaños reservados) y el vicepresidente Jaime Bassa (Frente Amplio), con la mesa ampliada y con la machi Francisca Linconao— y la acogida que tuvo entre los convencionales de centroizquierda despertó la inquietud de algunos.

"La Convención es autónoma en relación con los demás poderes del Estado (...) Y esa autonomía se ha mantenido con el Gobierno actual, y es más, se ha instado incluso de la propia mesa directiva. Por eso mismo que resulta totalmente contradictorio el hecho de que se haya invitado a Gabriel Boric como Presidente electo. Pareciera que cuando conviene hay autonomía y cuando no conviene no", afirmó Constanza Hube (Unidos por Chile).

Candidaturas propias


Para un sector de la Convención, la elección de la nueva mesa directiva el 4 de enero próximo debe ser demostración de esa autonomía. Y, por lo mismo, convencionales tanto de centroizquierda como de centroderecha mencionan que una buena señal sería que en la dupla que conforme la mesa directiva no haya representantes del Frente Amplio ni del PC, ambas colectividades oficialistas a partir del 11 de marzo.

Rosa Catrileo (mapuche) dice que "es necesario tener presente la distribución equitativa de poder, en este caso de la administración. Pero no es un factor determinante".

Por su parte, Matías Orellana (Colectivo Socialista) sostiene que "hay que dejar de manifiesto que quienes asuman y conduzcan la mesa de la Convención puedan ponderar y liderar los grandes desafíos que se nos acercan. Por tanto, hay que dejar en esa autonomía a todos los integrantes de la Convención para que elijan con la mayor libertad de sus criterios los nuevos liderazgos que seguirán dirigiendo el rumbo de nuestro trabajo".

"Nadie se hace cuestionamientos cuando se define, por ejemplo, quien va a presidir la Cámara de Diputados o el Senado. Puede ser una oposición al Gobierno o puede que no, y de hecho, tenemos hoy los casos en el Congreso. Me parece que se ha intentado verter sobre la Convención un manto de duda en cuanto a su autonomía, lo que podría ser aplicable a cualquier órgano deliberativo democrático actual. Me parece incluso improcedente pensar algo como eso", refuta Bárbara Sepúlveda respecto a los cuestionamientos de las postulaciones de Apruebo Dignidad. Agrega que "las agendas políticas de los colectivos acá adentro tienen que ver con el proceso constituyente y, por lo tanto, no veo en ninguna presidencia, ni de partido político ni de independiente, una amenaza a la autonomía de la Convención".

Similar postura tiene Fernando Atria (Frente Amplio), quien defiende que "la autonomía corre en ambos sentidos. La autonomía implica que el Presidente electo dijo que no pretendía interferir con el trabajo de la Convención, pero esa no-interferencia opera en ambos sentidos. La Convención es soberana para decidir cuál es la organización de las autoridades que se da".

Tanto la presidencia como la vicepresidencia de la Convención se eligen por mayoría absoluta (al menos 78 votos). Desde Apruebo Dignidad han surgido nombres de eventuales postulantes como Amaya Alvez, Jeniffer Mella y Constanza Schonhaut (las tres del Frente Amplio), además de Bárbara Sepúlveda (PC).

Para lograr el cupo necesitan el apoyo de otros colectivos. Hasta ahora, tanto el Frente Amplio como el PC han podido establecer alianzas con el Colectivo Socialista, Movimientos Sociales Constituyentes e Independientes No Neutrales para la aprobación de distintos acuerdos o disposiciones reglamentarias.

Sin embargo, esos tres conglomerados están decididos a impulsar e intentar conseguir un cupo propio en la mesa directiva.
Así, en el Colectivo Socialista, Ricardo Montero, César Valenzuela y Ramona Reyes aparecen entre las cartas para presidencia o vicepresidencia.

Desde Independientes No Neutrales se ha postulado a Patricia Politzer, quien también cuenta con la simpatía —aunque por ahora no con el apoyo expreso— de algunos convencionales de Independientes-RN-Evópoli.

En Movimientos Sociales Constituyentes, en tanto, la convencional Cristina Dorador oficializó su interés de asumir un cargo.

"No es una Constitución neutra"


La nueva mesa directiva deberá liderar a la Convención en momentos clave, que coincidirán, además, con hitos del próximo gobierno. Cuando Boric asuma en marzo, la Constituyente estará votando las normas constitucionales; cuando el Presidente cumpla sus primeros 100 días, a mediados de junio, los convencionales deberán estar afinando su propuesta final de la Constitución. Con ello, el plebiscito de salida, en septiembre, podría convertirse en una medición del desempeño del gobierno o, al menos, de su coalición.

"Van a ser procesos muy tensos y eso va a requerir que el gobierno, por su lado, esté muy concentrado en la implementación de su gobierno y por otro lado, que la Convención esté muy concentrada en las normas, y eso evidentemente requiere cierta distancia entre ambos procesos", asegura Constanza Schonhaut (Frente Amplio).

Por ello, entre las características que buscan los convencionales para los representantes de la mesa directiva mencionan manejo político y comunicacional, y capacidad de generar acuerdos que les permitan avanzar en la aprobación de normas.

Marcos Barraza (PC) destaca la necesidad de que los elegidos tengan competencias políticas y técnicas, al ser "un debate más fino, que es la implementación de los artículos”. Eso sí, a su juicio, lo más importante “es que sea una mesa directiva integrada por personas que tengan sintonía con las disposiciones, porque no es una Constitución neutra, es una discusión sobre el carácter de la principal ley del país, que es la Constitución. Yo esperaría que la composición fuera reflejo de un espíritu transformador".

Desde el Colectivo del Apruebo, Fuad Chahin opina que es importante que la dupla tenga un buen manejo comunicacional. "Necesitamos potenciar la imagen positiva de la Convención, de lo que está ocurriendo". Igualmente, coincide en que "se requiere un perfil político, me refiero a conducir el proceso político de acuerdos para las normas constitucionales, al menos aquellas que son esenciales. Este tema requiere, por decirlo así, de un trabajo prelegislativo de acuerdos, de tratar de ver los mayores puntos de convergencia y tratar de lograr que las iniciativas, cuando entren a la discusión de la Convención, tengan los apoyos más transversales posibles para facilitar la tramitación de las mismas".

Su compañero de conglomerado, Agustín Squella, dice que quienes sean elegidos deben dar "garantías de lo que necesitamos de ahora en adelante: capacidad de gestión para conducir el proceso en el tiempo que falta para completarlo, mostrando en ello determinación y carácter suficiente para articular".

Ricardo Montero (Colectivo Socialista) señala que el perfil de esta nueva mesa debe ser de una persona que “pueda tender puentes, que pueda generar diálogos y principalmente, que pueda generar acuerdos” en plazos que son acotados. "Tiene que ser un perfil dialogante y a la vez ejecutivo", dice.

Para Catrileo, la nueva mesa debe "continuar con el perfil dialogante y también que pueda tener una buena llegada con la ciudadanía respecto de la información".

Mientras, desde Independientes-RN-Evópoli, Cristián Monckeberg plantea que es clave que esta nueva mesa cumpla "un rol más político en la lógica de buscar acuerdos. No puede simplemente arbitrar, tiene que generar el necesario diálogo político que permita tener una propuesta lo más consensuada y amplia posible".

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