La era que iniciaron Elisa Loncon y Jaime Bassa al mando de la Convención Constitucional concluye este martes con la elección de una nueva dupla. Desde el miércoles, tendrán que ocupar sus puestos normales, en compañía de sus grupos políticos.
Pero la vuelta a las bancadas será distinta para ambos: Loncon regresará como par de los escaños reservados, que en la actualidad tienen dos almas y una de esas ha sido sumamente crítica con ella; mientras que Bassa es respaldado a ojos cerrados por la totalidad del Frente Amplio.
A ambos les reconocen aciertos, pero también varios errores. Lograron en tres meses aprobar un reglamento y generar las condiciones para que el órgano constituyente funcione, desde cero, en un proceso de instalación que tuvo incluso una primera sesión fallida. Eso es un factor que les reconocen todos los sectores políticos, aunque también han sido cuestionados por diversas equivocaciones.
Lo que más se repite: duros comentarios sobre distintas declaraciones que han dado y los errores comunicaciones en los que han incurrido. Por ejemplo, algunos sectores criticaron severamente a Loncon cuando aseguró no tener el "estándar de Mandela" para pedir que bajen las armas en la Macrozona Sur; cuando sostuvo que "nosotros somos humanos, no somos dioses para no fallar" ante el caso de Rodrigo Rojas Vade y también cuando, ante la polémica por las asignaciones, respondió a la prensa que podía revisar la información en El Mercurio.
En el caso de Loncon, además, los pueblos del norte han transmitido que su rol ha sido más de "imposición" que de construcción de acuerdos; y la misma Isabel Godoy (colla), vicepresidenta adjunta, aseguró a El Dínamo recientemente que la académica de la Usach "no cumplió los compromisos adquiridos".
El papel de Loncon entre los escaños
Entre los escaños hay diversas visiones sobre lo que será su retorno como convencional. El contexto es complejo: Loncon forma parte del grupo de constituyentes de pueblos originarios que defendió una forma de consulta indígena que es cuestionada por ser simplemente "participación indígena" por el resto de los pueblos. La machi Francisca Linconao, uno de los principales apoyos de Loncon al inicio, se volcó hacia ese otro sector en los últimos meses, en el que también participan Isabel Godoy, Wilfredo Bacian, Victorino Antilef y Natividad Llanquileo.
"Tanto Loncon como Bassa, en principio tienen que volver a sus espacios como lo tenemos todos, y espero que podamos mantener un camino de diálogo permanente, sin imposiciones", responde Wilfredo Bacian a este medio.
Este lunes, Loncon abordó su relación con los escaños reservados y aseguró que uno de los factores que le pesó para bajar su liderazgo fue "una mentira" sobre su relación previa con los partidos políticos.
"Uno de los problemas más grandes de los que se me ha acusado, y que era totalmente falso, es que dependía del PPD y de los poderes constituidos y q
ue detrás de mí había gente, mano negra. La evidencia de los hechos ha demostrado mi transparencia", sostuvo la presidenta.
Entre quienes la apoyan, confían que su rol servirá para la construcción de acuerdos y búsqueda de respaldos respecto de las normas relacionadas a los derechos indígenas. En ese sector están incluidos Rosa Catrileo, Adolfo Millabur, Tiare Aguilera y Lidia González, entre otros.
"Su liderazgo va a tener que mantenerlo y creo que es súper necesario para el proceso que se viene, que es la deliberación y la búsqueda de los apoyos para estas mismas iniciativas que presentamos. Hay un tema de buscar los votos y el rol en el que ella estuvo debiera permitirnos llegar a los diferentes colectivos para poder explicar y hacer un poco de pedagogía de lo que son derechos indígenas", comenta Rosa Catrileo (mapuche).
"Elisa tiene un rol articulador clave para los escaños. Ella ha sido capaz, no solo de posicionarnos como una fuerza política importante en la Convención, sino que incluso posicionar a nuestros pueblos más allá, en el debate público nacional e internacional. No dudo que tendrá un importante rol como articuladora desde su comisión y como lideresa en el período que venga", suma Lidia González (yagán).
Con respecto a qué papel le gustaría tener, Loncon respondió que se dedicará al ingreso de normas en su comisión de Principios Constitucionales y que "he gastado mucho tiempo en la gestión de la Convención, entonces voy a tener ese tiempo ahora, espero estar más conectada con las comunidades para invitarlas a que sean partes del proceso porque es una historia que tenemos que hacer nosotros".
El rol de Bassa en el Frente Amplio
La historia con Bassa es distinta: a él se le ha atribuido un rol más técnico en la mesa directiva y el Frente Amplio no ha exteriorizado diferencias con él en estos seis meses de trabajo. De hecho, en ese sector ponen fichas a su incorporación como constituyente.
"Además de poder dedicarse de lleno al trabajo de las comisiones, creo que Jaime tendrá un rol de colaboración con la nueva mesa para que vaya un cambio de mando fluido que facilite una sana continuidad del proceso. Por cierto, también creo que seguirá siendo una voceria relevante para comunicar el trabajo de la Convención, cuestión que será clave en esta última etapa", responde a este medio Constanza Schonhaut (FA).
Desde que llegaron ambos a la testera, a Bassa también se le reconoce en su grupo cierta capacidad de diálogo con distintos sectores, a pesar de haberse enfrentado en más de una ocasión públicamente con representantes de la centroderecha, como Constanza Hube (UDI).
"Creo que Jaime pasará a jugar ese rol simbólico dialogante con el que podemos contar al interior del FA y en gran parte de la oposición.
Puede ser un gran articulador internamente, en la búsqueda un texto constitucional. Él podría jugar ambos roles, es un constitucionalista, pero tiene el respaldo, entonces podría generar esos puentes al interior y afuera de la Convención", agrega María José Oyarzún, una de las coordinadoras de la coalición en el órgano constituyente.
El convencional Christian Viera advierte que el rol que deberían tener, tanto Bassa como Loncon, es el de un constituyente más.
"Como soy académico, la experiencia de la Universidad me ha marcado mucho. Un colega puede llegar a ser rector, pero una vez terminada su tarea, regresa a su Escuela y se reincorpora como un colega más. Eso mismo pienso para Elisa o Jaime. Antes que sus cargos son constituyentes y una vez finalizada su tarea, pues se reincorporan a la Convención como una y uno más. Otra cosa será si figuración pública por el potente rol que han jugado", dice Viera.
En esa misma línea responde Bassa, quien se desempeña en la Comisión de Sistema Político y sostiene que después del cambio de mesa se integrará "con muchas ganas" al trabajo de esa instancia y al a discusión de contenidos.
"Es en lo que yo vine a aportar a este proceso como profesor constitucionalista. El gran valor de este momento histórico es la oportunidad que nos hemos dado, como pueblos, de generar los diálogos que hoy las comisiones temáticas están liderando. En ese sentido, espero ser un gran aporte en los procesos de deliberación y redacción del nuevo texto constitucional", contesta a Emol el actual vicepresidente.
"Eso no obsta, por supuesto, del rol que tendremos que cumplir colaborando con el proceso de instalación de la nueva mesa directiva. Por supuesto que habrá que generar un diálogo muy fluido con sus próximos integrantes para que el cambio de mando sea completamente positivo para la Convención y no genere ningún problema en su funcionamiento", suma Bassa.
"Finalmente, espero colaborar de manera muy activa con la comunicación efectiva y la difusión de los logros que va construyendo la Convención. Es importante, cuando comencemos a decidir contenidos constitucionales, que estos sean comunicados de manera inclusiva y pedagógica", concluye.