Los convencionales del PC proponen un "presidencialismo atenuado" como régimen de gobierno para la nueva Carta Magna.
Aton
El Frente Amplio y el Partido Comunista tomaron caminos diferentes para el diseño del régimen de Gobierno de la nueva Constitución: mientras el FA apunta a un "presidencialismo de coalición", el PC impulsa una propuesta de "presidencialismo atenuado", que incluye la creación del rol del vicepresidente.
La iniciativa busca traspasar ciertas atribuciones desde el Ejecutivo al Congreso: por ejemplo, que el Parlamento tenga iniciativa en materia tributaria, que pueda incrementar recursos en la ley de Presupuesto, y que tenga facultades para nombramientos que hoy están alojados en la figura del Presidente. El detalle de las atribuciones del Congreso está en la iniciativa de norma que presentó el PC con el FA, MSC y Pueblo Constituyente sobre un "Congreso Plurinacional Unicameral".
"Buscamos un rebalanceo de poderes, sin lesionar el perfilamiento de cada poder del Estado. El ejercicio de rebalancear atribuciones no puede generar inestabilidad y en ese sentido nuestra propuesta de presidencialismo atenuado, tiene una segunda consideración relevante:
que existan mecanismos de democracia directa que aseguren la participación popular en términos de definiciones fundamentales del país", explicó Marcos Barraza (PC) esta mañana.
Las características de la propuesta
El texto define que la función ejecutiva está compuesta por el Presidente, vicepresidente y ministros. En cuanto a los requisitos para ser Mandatario, el PC definió en su propuesta que será necesario haber cumplido 30 años de edad -hoy el mínimo son 35- y debe compartir la papeleta con un vicepresidente, en una dupla paritaria. Ambos se eligen en la misma votación.
La propuesta establece un mandato de duración de cuatro años, con una sola oportunidad de reelección, que puede ser de forma inmediata o con posterioridad. Durante su periodo, el Presidente tendrá que "dirigir la administración del Estado; conducir las relaciones exteriores; declarar los estados de excepción; dictar decretos con fuerza de ley previa autorización del Congreso Plurinacional y ejercer la jefatura suprema de las FF.AA. permanentemente", según se lee en el documento.
Otra de las novedades de la iniciativa es que se considera la posibilidad de que un Mandatario renuncie o que su mandato sea revocado popularmente.
En cuanto al rol del vicepresidente en la fórmula, este debe cumplir con los mismos requisitos que el Presidente y debe asumir la conducción del Ejecutivo en caso de cesación del cargo del Mandatario, pero también debe coordinar normalmente el gabinete de ministros, y puede nombrar y remover subsecretarios y otros funcionarios, exceptuando a los que correspondan al Presidente.
"Las atribuciones de jefatura de Estado y Gobierno recaen en el Presidente o Presidenta de la República. No creemos que los votos del Congreso puedan ser más que los votos de la ciudadanía y no creemos que haya que debilitar la condición de Presidente o Presidenta, sino más bien traspasar poder al legislativo", complementó Barraza.
"La función de la vicepresidencia será tareas administrativas, coordinar el gabinete de la presidencia del Ejecutivo, representar a la Presidenta o el Presidente en el Parlamento", sostuvo.
