La Policía de Investigaciones incautó más de
nueve mil poleras falsificadas de reconocidas marcas, las que eran comercializadas a través del mercado informal y redes sociales a lo largo de todo el país.
Según señaló el subcomisario de la Brigada Investigadora de Delitos de Propiedad Intelectual (Bridepi), Raúl Rojas, las prendas de vestir fueron incautadas en dos domicilios ubicados en Recoleta y Pudahuel. "Logramos desbaratar un distribuidor que tenía la mayor cantidad de prendas de vestir y él distribuía en todo el territorio nacional", sostuvo.
Además, detalló que "dentro de la investigación logramos detectar que hay t
ransacciones en grandes cantidades a lo largo de todo el país y a parte de eso esta persona tenía varios locales comerciales en ferias libres y persas de la Región Metropolitana".
Rojas afirmó que la investigación culminó con "la entrada y registro a los inmuebles, teniendo como resultado la incautación de más de 9.500 prendas de vestir falsificadas, de diversas marcas de renombre internacional y de muy alta gama por su costo verdaderas, las cuales están listas para ser comercializadas".
"Con este operativo no se permitió la venta de este tipo de prenda, que su calidad y cantidad es muy bajo respecto del precio normal de las prendas de vestir que corresponden a estas marcas registradas anteriormente y que son protegidas a nivel internacional", añadió.
Por último, el subcomisario señaló que el evalúo de las prendas originales bordea los 510 millones de pesos y el "precio por el cual los imputados vendías las prendas por unidad, el evalúo sería alrededor de 40 a 50 millones de pesos".