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Organización Mundial de la Salud (OMS) ha alertado sobre aquellos países que buscan "dar por terminada la pandemia", y dejar atrás algunas -o todas- las restricciones sanitarias. Esta semana, el presidente del organismo, Tedros Adhanom, advirtió que "es prematuro que cualquier país se declare victorioso", preocupado por el aumento de contagios y muertes que se registran a causa de Ómicron.
Las declaraciones apuntaban a la decisión de Dinamarca de "dejar atrás la pandemia y seguir adelante", según comentó la primera ministra danesa, Mette Frederiksen. Y es que desde el 1 febrero, los daneses ya no están obligados a usar mascarillas en espacios públicos -a menos que lo exija el establecimiento-, y se eliminaron las restricciones de aforo. Las vacunas, dijo la primera ministra, "resultaron mejores de lo que pensábamos, una súper arma que ha dado una fuerte protección al virus".
Pero la tendencia de poner fin a la pandemia también ha surgido en otros países europeos.
Noruega, Finlandia y Suecia imitaron a Dinamarca al eliminar restricciones y hace poco más de una semana, el presidente del
gobierno español, Pedro Sánchez, declaró que están trabajando para "gripalizar" el covid-19. Es decir, entenderlo como una gripe y no como una pandemia.
Según consignó la BBC, el mandatario español también utilizó el argumento de las vacunas para abordar la decisión en la que trabajan hace semanas. Además, busca que la iniciativa se amplíe a todo el viejo continente, pues ya han conversado con otros ministerios de salud europeos y con el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDE, por su sus siglas en inglés).
En Chile, cuando los casos por la variante Ómicron ya superan los 36 mil, el ministro de Salud, Enrique Paris, ha señalado que "estamos en una nueva etapa de la pandemia", donde a diferencia de las primeras cepas, "hoy tenemos más certezas, más experiencia, más herramientas y mucho más evidencia científica". Asimismo, afirmó que el enfoque debe estar en la disponibilidad e impacto de camas UCI.
Debate por la tendencia europea
¿Qué piensan los expertos de las decisiones de otros países frente a dar por terminada la pandemia? El infectólogo de la Clínica Dávila, Roberto Olivares, cree que en un futuro posible, la situación también se dé en el país, "con casos que aumenten en invierno, pero con una población con tal alto nivel de vacunación y esperando que sigan apareciendo variantes que se comporten de forma leve. Probablemente, esos son los ingredientes que tienen en Europa".
De todas formas, afirma que es importante recordar que también depende del tipo de vacuna que se ha utilizado. "En Europa usan principalmente las de RNA mensajero, pero nosotros usamos principalmente Sinovac, con virus inactivado, y pareciera que frente Ómicron no fuera tan efectiva", planteó.
Por eso, destaca que moverse hacia vacunas de RNA en Chile, como Moderna -recientemente aprobada por el ISP- pueden abrir este escenario, pero advierte al menos hoy, con un sistema de salud un poco más presionado "no podemos dar ese paso".
Claudio Castillo, profesor de Salud Pública de la Universidad de Santiago marca los contrastes entre Dinamarca y Chile: "Ese país ha planteando esto en medio de un aumento importante de casos, pero con disminución de las hospitalizaciones y de ingresos a UCI. Si miramos su acumulado, la tasa de mortalidad es muy baja, cerca de 640 personas fallecidas por millón de habitantes, mientras que Chile tiene más de 2 mil".
"Es decir, nos encontramos en una situación distinta; la población danesa es más sana y tiene mejor acceso a las atenciones médicas. Entonces, hay condiciones que hacen que las medidas que se toman allá, no puedan ser replicadas en Chile", subrayó.
Por su parte, el epidemiólogo y académico de la Universidad de Chile, Gabriel Cavada, sostiene que si bien estas señales internacionales pueden considerarse "imprudentes", en cierta forma "pueden tener razón". Según cree, "se trata de un escenario esperable, y en lo que hay que insistir es en que la gente se vacune. La autoridad sanitaria debe apostar a poner más beneficios al pase de movilidad, de modo que las personas no vacunadas finalmente se terminen inoculando".