La
Convención Constitucional sigue avanzando en maratónicas jornadas para la votación de normas en general y en particular, lo que ha reabierto la discusión sobre si podrá o no cumplir con el cronograma antes del 4 de julio.
Pero además existe un debate interno respecto al tipo de normas que se aprueban -varias consideradas extremas- y las peticiones de algunos sectores a "liderar un texto más razonable", apuntando al rol que deberán tener los partidos políticos para encauzar la discusión, especialmente el Frente Amplio y el Colectivo Socialista, sectores que formarán parte del gobierno del Presidente electo, Gabriel Boric.
Desde la centroderecha, el
convencional RN,
Cristián Monckeberg llamó al Frente Amplio y al PS a "dejarse de ñiñerías" y asumir un rol articulador para "cerrar el capítulo constitucional", según comentó a El Mercurio. Desde la otra vereda, integrantes del
Colectivo del Apruebo -entre ellos los convencionales Agustín Squella y Miguel Botto-, enviaron una carta a sus pares, donde los conminan a ser más diligentes con los tiempos, "iniciando un diálogo político franco y fraterno, sin exclusiones", según recoge El Mercurio de Valparaíso.
En esa línea, les recordaron que la ciudadanía los eligió "para escribir una nueva Constitución y no para adueñarse de ella, ni menos aún para sabotearla", por los que les piden avanzar "en acuerdos transversales, más allá de algunas expectativas e intereses particulares".
El convencional Botto, recordó que su propuesta de reconocer a los animales como seres sintientes fue rechazada por la comisión de Medio Ambiente, que los busca declarar sujetos de derecho. A su juicio, estas normas "más extremas", que arriesgan no alcanzar los 2/3 en el plenario, son gestos egoístas "que le están haciendo mal a la Convención". "Todas las posiciones son demasiado emocionales y con una falta de rigurosidad jurídica, desde el punto de vista del derecho constitucional", recalcó.
Por eso, destacó que una vez que las normas vuelvan a las comisiones, tras el eventual fracaso en el pleno, será importante el liderazgo que puedan ejercer los partidos tradicionales, así como la mesa directiva y, especialmente, el Frente Amplio. Esto, porque si el texto es rechazado en el Plebiscito de saluda, "será uno de los grandes fracasos que verá este nuevo gobierno de Gabriel Boric y eso no lo van a permitir".
Y fue más allá en su diagnóstico: "Si el Frente Amplio no lidera desde la Convención una mayor articulación, se puede generar una gran crisis donde la Constitución se termine negociando entre el Gobierno y el Parlamento", afirmó.
"Frente Amplio y Colectivo socialista deben tomar el timón"
Por su parte, el ex senador,
Felipe Harboe (Ind) -también firmante de la carta- planteó a
EmolTV que la aprobación de estas normas en general -como la de la nacionalización de la minería-, "no son competencia de la Convención y genera una sensación de incertidumbre jurídica (...) espero que en las dos semanas que vienen se dejen las consignas de lado y se pase a la discusión con evidencia".
A su juicio, el éxito de proceso constituyente pasa "porque los colectivos mayoritarios, léase el Frente Amplio y el Colectivo Socialista, tomen un rol mucho más activo en defender la institucionalidad, hacer una constitución transformadora pero con evidencias, que garantice libertades, y eso pasa por la capacidad de articulación política", en definitiva, apunta a que ellos deben "tomar el timón" en el proceso.
"Hoy día, la responsabilidad principal del éxito del proceso recae en estos dos colectivos y espero que asuman ese rol, porque cuando uno empieza a mirar el cronograma, se ve cada día más afectado", enfatizó. Esto, porque sin acuerdo político será complejo llegar a 2/3 consensuados. "No es el momento de darse gustitos personales ni hacer propuestas revanchistas, sino que propuestas de constitución, para lo que nos eligieron", recalcó.
Harboe concuerda en que en el proceso está también en juego el liderazgo del Presidente electo, Gabriel Boric, "en el sentido de que el proceso constituyente sea exitoso el 4 de julio. Si no se logra, y alguien plantea la prórroga, el principal afectado será el gobierno de Boric, porque la Convención pasará a ser, en la práctica, un poder constituido y el presidente tendrá un poder al lado que va a estar cambiando las bases de la institucionalidad, en un gobierno que se transformará en uno de administración".
"El FA no tiene facultad de dar instrucciones a nadie"
"¿De dónde va a sacar el Frente Amplio y el Colectivo socialista la potestad para hacer eso?", respondió hoy el convencional frenteamplista, Fernando Atria, ante los emplazamientos para asumir el timón de liderazgo y orden al interior de la Convención, los que, de todas formas, interpreta más bien como una "invitación" a los colectivos.
Atria afirma que el sector está participando de las discusiones en medio de un "caleidoscopio" de numerosas y diversas normas que deberán empezar a ordenarse y articularse en posiciones dominantes y consensuadas, y "nosotros estamos haciendo los esfuerzos para que eso ocurra".
Sin embargo, recalcó que "el FA más independientes es un colectivo más, no tiene ninguna facultad de dar instrucciones a nadie, pero sí de contribuir a la discusión y eso ya se está empezando a notar".
Con todo, su diagnóstico es que no sería favorable para Chile que el 4 de julio la Convención no tenga una buena propuesta que ofrecer a la ciudadanía. "En mi opinión, la responsabilidad principal de todos los convencionales es tener esa propuesta", recalcó.
"Es injusto lo que se está haciendo"
El constituyente socialista y coordinador de la comisión de Derechos Fundamentales, César Valenzuela, también abordó los emplazamientos junto, no sin reconocer que existe la posibilidad de que algunos informes emanados de las comisiones no alcancen los 104 votos en el pleno, aunque "evidentemente tenemos un problema con los plazos".
En tanto, calificó como "injusto el responsabilizar por completo el proceso" tanto al Frente Amplio como al Colectivo Socialista. "De hecho, hoy día ninguno de los dos colectivos tenemos representación en la mesa, ni la presidencia ni la vicepresidencia pertenecen a estos colectivos y esos son los espacios institucionales que corresponden".
"Se habla de nosotros como si fuéramos la fuerza hegemónica de esta Convención y eso no es así. Los socialistas alcanzamos poco más del 10% y con eso no se pueden imponer términos. Esta es una Convención diversa, por eso no me parece justo, están errando en el camino", complementó.
Con todo, el convencional recalcó que desde el bloque intentarán aportar con alcanzar acuerdos amplios, aunque enfatizó que hay temas donde dichos acuerdos no están, "y eso es perfectamente legítimo".