Este lunes debutó la Ley 21.378, que busca disminuir los casos de Violencia Intrafamiliar (VIF), estableciendo medidas cautelares como el uso de tobilleras electrónicas. Sin embargo,
el Pleno de la Corte Suprema advirtió acerca de lo restrictivo que puede ser su aplicación, ya que -señaló- estos instrumentos "restringen su aplicación a mujeres mayores de 18 años de edad (en toda su diversidad) víctimas de violencia intrafamiliar, que tengan o hayan tenido la calidad de cónyuge, una relación de convivencia o tengan un hijo o hija en común". Así,
se deja fuera de la ficha de evaluación, por ejemplo, la violencia en el pololeo y los episodios de lesiones de mujeres a hombres.
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