La noche de este miércoles se registró un ataque armado realizado por un grupo de desconocidos en contra de la subcomisaría de Tirúa. Pasadas las horas y ya avanzada la investigación, el general Juan Pablo Caneo, jefe de la Octava Zona de Carabineros, de la Región del Biobío, puntualizó que este hecho se debió a un intento de "rescate" de dos individuos que se encontraban detenidos al interior de la unidad policial.
En concreto, y acorde con lo expuesto por el alto oficial, el ataque perpetrado fue en respuesta a un operativo policial efectuado horas antes, cuando personal de Carabineros detuvo a dos hombres en medio de lo que fue un control, debido a que al interior del vehículo donde se trasladaban se encontraron 500 cartuchos de municiones calibre 12.
"Hubo un control de un vehículo en el puente sobre el Río Tirúa, por personal de zona La Araucanía de control de Orden Público, y estas personas que son detenidas porque en el interior se les encuentran 500 cartuchos de calibre 12. Son llevados a la subcomisaría de Tirúa por el procedimiento de rigor y ponerlos a disposición de la fiscalía correspondiente y llega en masa una cantidad indeterminada de personas", informó el general Caneo.
Es en ese entonces, y según lo detallado por el jefe de la Octava Zona de Carabineros, que un grupo de más de 50 personas se presentaron en el frontis de la unidad policial. "Más de 50, en un momento determinado llegan hasta 70 y proceden a intentar ingresar al recinto policial con la finalidad de rescatar a las personas", afirmó.
Dadas las características de este hecho, el personal de Carabineros que se encontraba al interior de la subcomisaría activó los protocolos e hicieron uso de los elementos disuasivos "que nos entrega el Estado". En detalle, los funcionarios utilizaron gas lacrimógeno y perdigones de plástico, por lo que el general insistió en que "no hubo personas lesionadas".
En línea con lo anterior, Caneo afirmó que el personal concentrado al interior de la unidad policial no hizo uso de armas de fuego para combatir y disuadir a los atacantes, pues informó que "todo lo que dice relación con disparos, que es lo que se tiene que investigar, al parecer se hizo desde un sector más atrás de donde se encontraba la masa disparando hacia al aire, no directo hacia la unidad".
"Por tanto, bajo esa primicia tampoco se cumplían los pretextos para hacer uso de arma de fuego, toda vez que los carabineros tienen un blanco definido a donde poder hacer uso de ese elemento", acotó.
Asimismo, el alto oficial aclaró que "la unidad no presenta al momento -porque se está periciando-, impactos en ninguno de los costados, tampoco al interior" y que "los daños que sufrió el cuartel dice relación con vidrios producto de apedreada y los carabineros tampoco están lesionados, a pesar de que hubo algún forcejeo".