Anoche, y cuestión de horas, dos hechos delictuales afectaron a dos miembros de la institucionalidad de país. El primero, involucró a la ministra de Defensa, Maya Fernández, y el segundo, a un carabinero que forma parte del equipo de seguridad del Presidente Gabriel Boric.
Fue la propia cartera de Defensa la que confirmó anoche lo ocurrido en al vivienda de la
comuna de Ñuñoa, donde tres sujetos ingresaron para maniatar al esposo e hijo de la ministra, en momentos en que ella no se encontraba en la casa. Los antisociales lograron escapar con el auto de la secretaria de Estado.
Entrada la madrugada, esta vez en la comuna de San Miguel, un funcionario policial fue abordado mientras se dirigía a entregar el vehículo utilizado para cumplir sus funciones. Los sujetos lo abandonaron en el sector de Colina, no sin antes dispararle en el brazo derecho. Posteriormente, el funcionario fue trasladado hasta el hospital institucional, donde permanece fuera de riesgo vital.
Por el primer hecho, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, afirmó este sábado que "Estamos muy preocupados, hoy eso se está investigando, hay un fiscal que ha instruido diligencias para encontrar a los responsables", en tanto, por el caso que afectó al funcionario policial, afirmó que "es un hecho también grave".
Su par de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, señaló que "¿es suficiente lo que se hace solo desde el Gobierno? ¿Es suficiente lo que se hace solo desde Carabineros, la PDI o el rol preventivo de los municipios? La respuesta es que no es suficiente. El momento país que vivimos, obliga a que tengamos además una articulación público privada y yo lo he dicho, he sido muchas veces criticado, pero no me parece correcto que cuando existe un mal trabajo en seguridad privada para organizar un evento masivo como un partido de fútbol, como un concierto, se tengan que disponer cientos de carabineros que no se crean en ese momento, sino que salen de los territorios que están sufriendo. Entonces para que podamos avanzar necesitamos un pacto país, un pacto público privado, un pacto con nuestros municipios".
Y mientras la fiscalía avanza en los trabajos investigativos correspondientes, desde distintos sectores se recrudece el debate en torno a la delincuencia puntualmente a "las acciones urgentes" -según afirman varios parlamentarios- para encontrar una salida frente a la escalada de violencia, y otros afirman que esto es el resultado de las "malas decisiones adoptadas en los últimos años", que no hacen más que reflejar la vulnerabilidad a la que está sometida la población.
Oficialismo ampliado: "Es tiempo de dar señales claras"
"Se asalta a cualquiera, eso está claro", señala a Emol, el presidente de la Comisión de Seguridad Pública del Senado, senador José Miguel Insulza (PS), quien también afirma estar extrañado de que la secretaria de Estado no contara con un "punto fijo o de defensa en su casa, aunque habría que saber si ella pidió que no fuera así o eso se omitió, lo cual sería muy grave", de todos modos, y en atención a que la indagatoria está en curso, planteó que "no se sabe si buscaban asaltar a la ministra o buscar un blanco de oportunidades".
Respecto al carabinero, Insulza planteó que "es muy lamentable, éste fue un asalto más de los muchos que hay hoy día, que son muy graves. Aquí lo dramático es lo riesgoso que es andar en la noche solo en auto, esto está pasando a cada rato".
El también integrante de dicha comisión, senador Jaime Quintana (PPD), afirma que esta escalada de violencia "no es algo nuevo y en gran medida obedece a malas decisiones adoptadas en los últimos años. Cuando ello también afecta a personas que cuentan con protección; permite comprender lo vulnerable que se encuentran los ciudadanos de a pie y que enfrentan estos hechos a diario".
Desde la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara, el presidente de la instancia, diputado Raúl Leiva (PS) sostiene que estos hechos dan cuenta de "la lamentable realidad en materia de seguridad ciudadana, que atraviesa por su peor momento".
En ese sentido, cree que "se requieren medidas concretas y efectivas para combatir la sensación de inseguridad y percepción de impunidad que vienen nuestros vecinos. Se debe fortalecer y entregar nuevas herramientas de persecución criminal y fortalecer el rol investigador y preventivo de las policías. Es tiempo de dar señales claras".
Oposición: "La agenda de seguridad no ha sido prioridad"
Desde la oposición llaman al Gobierno a tomar medidas urgentes en la materia. Pues si bien existe un llamado del Ejecutivo a un acuerdo país en materia de combate a la violencia, los parlamentarios esperan que prontamente se presente un paquete de "medidas concretas", que algunos prometen tramitar con la urgencia que sea necesaria.
Así lo plantea el senador
Enrique Van Rysselbergue (UDI), quien cree que estos hechos "
sólo demuestran que el país está viviendo una gravísima crisis de seguridad que está afectando a toda la población de manera transversal".
El senador recordó que ya han pasado dos meses desde la llegada del Gobierno y hasta ahora "el Ejecutivo no ha puesto sobre la mesa una plan concreto de acciones para enfrentar esta situación".
Por eso, esperan que el Ejecutivo presente "a la máxima brevedad un plan robusto de medidas concretas para enfrentar esta grave crisis de seguridad ciudadana, el cual será tramitado con toda la urgencia necesaria en la comisión de seguridad del Senado; pero insisto, es una iniciativa que necesariamente tiene que nacer de la voluntad del ejecutivo y de las reales prioridades de éste".
Desde la misma tienda, el diputado Jorge Alessandri enfatiza que estos hechos dan cuenta que "la delincuencia generalizada está desbordada, evidentemente no hay respeto por las autoridades" y acusa que no se ha avanzado más allá de "frases grandilocuentes", puesto que "la agenda de seguridad no ha sido prioridad".
Además, responsabilizó "un sector político importante de Chile que coqueteó con la violencia por mucho tiempo, y ahora se ordenaron porque están en el Gobierno, pero hacia afuera quedaron esas señales. Los que abrieron esa puerta debieran estar, al menos, con cargo de conciencia".
Por su parte, el senador Rafael Prohens (RN) planteó que "cuando vemos que la violencia no solamente ataca a las familias de Chile, sino también se acerca directamente y en varias oportunidades a las autoridades de gobierno, no podemos relativizar y pensar que estos hechos son aislados y de manera arbitraria".
"Todas las autoridades debemos hacer frente a la violencia, no justificarla y debemos utilizar todas las herramientas de la ley para determinar responsabilidades. Eso es lo mínimo que le podemos pedir al presidente Boric. No permitamos que la violencia se exceda y nos inmovilice. Esperamos que el Presidente, utilice todas sus facultades para terminar con estos actos delictuales", subrayó.
Desde Evópoli el diputado Francisco Undurraga comentó que "las autoridades no están ajenas a la realidad que está viviendo una parte importante de la ciudadanía, no solo en términos de intranquilidad, sino que efectivamente de ser parte del suceso, condenables de violencia. Aquí lo relevante es reaccionar con firmeza y buscar no solamente a los delincuentes que cometieron estos delitos".
El parlamentario cerró con que "es insólito que una ministra de Defensa de Chile no tenga la suficiente protección en su casa. Eso habla también de la relativización que está haciendo este Gobierno a la seguridad".
Por su parte, el senador Rojo Edwards (Partido Republicano), sostuvo que "el problema principal de este Gobierno en seguridad es producto de las señales que envía".
Añadió que "no solamente Carabineros entiende, entre líneas, que no cuenta con su apoyo. También los delincuentes entienden que optan a permanente impunidad. Por esto es que la pregunta de cuándo el Gobierno empezará a gobernar de verdad, es una pregunta valida. Existen intentos de liderazgos semánticos y políticos, pero ausencia total de liderazgo en seguridad. Esto incluye no solo a la Ministra Siches, sino también al Presidente".