A 2.525 metros sobre el nivel del mar y 30 kilómetros de Calama está Chiu Chiu, una de las nueve localidades en torno a la ciudad nortina. Allí viven aproximadamente 240 personas, la mayoría pertenecientes a pueblos originarios.
El poblado nortino que tiene la iglesia más antigua del país (construida en 1540), fue epicentro de la primera actividad de una de las delegaciones de convencionales que no pertenecen a ninguna de las tres comisiones que comenzaron a trabajar ese mismo martes (Armonización, Normas transitorias y Preámbulo), que tenía como objetivo dar a conocer a la ciudadanía el borrador de la propuesta constitucional.
Luego de la presentación de cada uno de los convencionales, los habitantes de la localidad escogida —que es abastecida de agua por camiones aljibe e iluminada por alrededor tres horas durante la noche, a través de un motor que funciona a petróleo— realizaron sus consultas sobre la propuesta.
Y hubo un comentario que se repitió entre los constituyentes: aunque gane el Apruebo en el plebiscito de salida el 4 de septiembre, el proceso constituyente no termina ahí.
Miguel Ángel Botto (Colectivo del Apruebo) fue el primero en decirlo: "Es necesario ir caminando paso a paso, porque esto no es un cambio de un día para otro. El proceso constituyente sigue y se va a mantener. Este no es el texto perfecto, queda mucho, muchas leyes todavía para poder ir adaptando el texto constitucional".
"Hemos hecho un tremendo avance, sabemos que para nosotros los indígenas esto no termina. Es una lucha constante, permanente y también tiene que ser colectiva", decía Margarita Vargas (kawésqar). Añadió: "Estamos recién empezando. Esto es un renacer para los pueblos indígenas y nos queda mucho que avanzar".
Posteriormente, Alejandra Flores (Mov. Sociales Constituyentes, quien es aimara, aunque no postuló en escaño reservado a la Convención) sostuvo que “los avances para nosotros son sustanciales y vamos a tener que construir ese país plurinacional e intercultural".
En paralelo, a 251 kilómetros, en la ciudad de Antofagasta, otra comitiva de convencionales, encabezada por el vicepresidente Gaspar Domínguez (INN), participaba de la actividad "Hablemos de un Chile justo".
"El proyecto de nueva Constitución incluye a las diversidades sexuales, por lo que este abre un espacio para enriquecer a esas diversidades, lo que es necesario", señaló Domínguez, y recordó su experiencia desde el mundo de la diversidad sexual y lo necesario de avanzar en inclusión.
Posteriormente, Pollyana Rivera (Un Chile Libre) dijo que hay que tener en cuenta que "la Constitución no es una varita mágica. Por ejemplo, la Constitución de Bolivia dice mar para Bolivia", haciendo alusión al artículo que señala que "el Estado boliviano declara su derecho irrenunciable e imprescriptible sobre el territorio que le dé acceso al océano Pacífico y su espacio marítimo".
Insisten en cambios a la minería
"Presidenta, puede que yo tenga una pega difícil, pero usted la ha tenido más difícil que yo", señaló Máximo Pacheco, presidente del directorio de Codelco, al recibir 8 kilómetros bajo tierra, en Chuquicamata subterránea, a la delegación de la Convención, encabezada por María Elisa Quinteros, quien dijo valorar el camino de la empresa "y por supuesto, hemos dejado muchos desafíos para ustedes, en el sentido de dar un límite ecológico".
Posteriormente, en una reunión con alrededor de 20 trabajadores de Codelco en la división Ministro Hales, los asistentes realizaron consultas sobre salud, cómo se abordó la seguridad ciudadana, la distribución de recursos entre regiones, el royalty minero, las concesiones y la educación.
Luego de las consultas, Eduardo Cretton (Unidos por Chile) sostuvo que "si hay una deuda de la Convención fue precisamente en materia de seguridad".
Sobre el tema minero, dos convencionales fueron más allá. Elsa Labraña (Coordinadora Plurinacional) señaló que "todo el lobby feroz que hubo no nos permitió cambiar aquello (...). Sí se logró instalar o mantener el dominio público. Sí siguen siendo todos los minerales del Estado. En el tema de la explotaciones es donde no logramos llegar a acuerdo, y eso yo creo que va a tener que ser un tema que va a quedar para un futuro próximo". Ella espera que eso se pueda decidir "en un plebiscito, pero a nivel país".
Y Juan José Martín (INN) precisó: "El royalty y las concesiones, efectivamente, no se logró resolver en esta Constitución. Sin embargo, quedó abierto al ejercicio legislativo. Se va a mantener el Código Minero como está, pero se va a abrir el proceso democrático para poder ser renovado".