"Prefiero dejar mi lugar a otra persona que lo requiera más que el suscrito", dijo ayer el ex Presidente Ricardo Lagos en la carta que envió a la mesa de la Convención, pidiendo no ser considerado en el acto de cierre del órgano el próximo 4 de julio.
Pese a ello, esa misma tarde la mesa directiva de la CC revirtió su decisión y decidió que se invitará a los ex Mandatarios a la ceremonia en que se le entregará el borrador al Presidente Gabriel Boric.
En el programa "Agenda Constitucional" de EmolTV, el profesor de Derecho Constitucional de la Universidad Católica (UC) y autor de "La Hora de la Reconstitución", Sebastián Soto, acusó "una actitud infantil, soberbia y políticamente irresponsable" de parte de la Convención.
Al contrario, Soto destacó que "la actitud del Presidente Lagos a mí me parece de una carta digna, inteligente, llena de contenido y de frases que se pueden leer y suponer. El Presidente Lagos hizo lo que a mí me hace mucho sentido: 'Bueno si no quieren invitarnos, no nos inviten, yo no voy a ir, yo he estado muy atento a este proceso, pero la primera actitud es la que vale, que ustedes no nos quisieron invitar'".
"Por eso, yo celebro la dignidad con que el ex Presidente Lagos supo sortear este difícil momento, que pone no solo en cuestionamiento a su persona, sino que la persona de los ex Presidentes, de todos los gobiernos y a toda la democracia que hemos logrado construir desde el año 90 en adelante", sostuvo.
Asimismo, la académica de la Universidad de Santiago y coordinadora del Observatorio Nueva Constitución, Pamela Figueroa, planteó que es "un nuevo traspié de la Convención no haber incluido desde el principio a los ex Presidentes de la República como a una autoridad republicana, en el acto de entrega del texto constitucional".
Con ello, opinó que para no invitarlos "se han dado desde las razones más ingenuas como es el aforo (...) y luego ya razones más directas y políticas como, por ejemplo, la incomodidad de compartir espacio con un determinado Presidente. Pero creo que ninguna razón justifica la no invitación de los Presidentes de la República".
En tanto, el profesor de Derecho Constitucional de la UC y director del Centro Democracia y Comunidad, Patricio Zapata, "encuentro que era muy torpe intentar excluir esa parte de la historia y quiero quedarme con la actitud del Presidente Lagos, creo que es una lección en varios sentidos, es una lección de cómo se defienden los 30 años, los 30 años se defienden con serenidad y siempre con argumentos. Él ha hecho varias presentaciones a la Convención siempre razonadas, no se responden picándose, no se responden descalificando o atacando con argumentos (...) Hay una tremenda lección de Ricardo Lagos a las generaciones más jóvenes y grupos alternativos".
"Yo me atrevo a decir que los ex Presidentes no van a ir (...) nadie va a donde no quieren ser invitados, menos un ex Presidente, una ex Presidenta. El daño está causado, la herida está hecha y hay que ver cómo se resuelve", precisó Soto.
Mientras que Figueroa expresó que "espero que si los Presidentes deciden no asistir al acto organizado por la Convención, que sí tengamos un acto Republicano que pueda ser asociado a la convocatoria del Plebiscito u otra acción".
Insulza: "Yo probablemente no habría aceptado"
Por su parte, el senador José Miguel Insulza (PS) comentó sobre la decisión del ex Presidente Lagos en Tele 13 Radio, que "si a mí me comentan que invitaron a todo el mundo a una fiesta y después de un largo alegato deciden invitarme, yo no estoy muy seguro que fuera. Un poco a tirones la invitación, a lo mejor el Presidente en realidad tenía buenas razones para no ir, la forma, etc. (...) Yo probablemente no habría aceptado una invitación así".
"Yo creo que en este caso lo que vale es la primera decisión, había gente que no quería que fueran los ex Presidentes, después tuvieron que convencerse por las discusiones, los argumentos, etc. (...) La primera intención fue no invitarlo, me ha preocupado esa actitud desde el principio en la Convención", sostuvo.
A su juicio, esto es reflejo "de que hay gente que va a cambiar el país entero. Yo no creo que el país vaya a cambiar tanto como se dice, creo que todo cambio es gradual (...) pero hay gente que cree que realmente está reescribiendo la historia de Chile".