Gianni Rivera, vicepresidente de la Democracia Cristiana, reveló que votará Rechazo en el Plebiscito del próximo 4 de septiembre. Esto, adelantándose a lo informado por el partido de que convocará una Junta Nacional este 12 de julio, la cual definirá la postura institucional.
"Por supuesto que apoyo esta fórmula, que
sin duda nos hubiera encantado un militante un voto, pero los estatutos señalan claramente que la junta nacional es quien puede resolver estas contiendas políticas", dijo el diputado Héctor Barría a Emol.
El partido esta dividido. Hay algunos que abiertamente han manifestado su inclinación por el Apruebo y otros por el Rechazo. Barría se inclina por aprobar la nueva Constitución, "pero sin duda estaré atento a lo que resuelva democráticamente la Democracia Cristiana y una vez más estaré y adoptaré la resolución definitiva que señale la Junta Nacional".
Para él, la postura que tome la Junta Nacional debe ser vinculante, y de hecho criticó -sin dar nombres- a algunos militantes. "Quienes a veces reclaman que la militancia no los apoya y que quieren un partido fortalecido, cohesionado, cuando son candidatos, luego cuando logran un escaño son una personalidad propia que no pone atención en los acuerdos que se toman como institución".
Contrario a él, su compañero de bancada,
Eric Aedo, está por el Rechazo, y le parece que la mesa directiva erróneamente desechó la idea de "un militante un voto". "
Creo que a veces se le teme a la democracia. Se habla tanto de democracia, de participación y todo el mundo se llena la boca con la participación, pero al momento de la verdad no se cree mucho en esa participación, pero es una decisión que ya está tomada", mencionó.
Sin embargo, el jefe de bancada aseguró que será disciplinado con la decisión de la junta. "Obviamente que voy a acatar lo que sea la decisión de la junta nacional (…) Si decide votar Apruebo, bueno cada uno de los que hoy día esta inclinado a votar Rechazo lo hará en la intimidad de la urna y obviamente los militantes no podremos salir a hacer campaña abierta por el Rechazo, pero también vale para lo contrario -si se decide por el Rechazo".
Pero hay quienes no están de acuerdo con que la postura sea vinculante, es decir, que todos tengan que acatar esa decisión. "Yo creo que es inoficioso, a estar alturas, tratar de forzar una posición única. Más bien hay que asumir que va a haber distintas posiciones", puntualizó el senador subjefe de bancada, Matías Walker.
Pero también se sumó a las palabras de sus compañeros de partido: "Por eso yo creo que la mejor opción no era una Junta Nacional, sino que era preguntarles a nuestros militantes de Arica a Magallanes, que hiciéramos nuestro propio plebiscito y lamento que esa opción se haya descartado".
En es misma línea se manifestó la diputada Joanna Pérez. "Hay una carta de casi 500 militantes que están pidiéndolo por distintas vías, y por lo tanto no estoy de acuerdo que no se quiera recoger esa democracia que solicita la militancia", comentó.
Además, criticó la representatividad de la junta. "Veo complejo de que, además quitándole la posibilidad de hacerlo lo más democrático posible,
se esté buscando generar obligatoriedad cuando no es representativo el órgano que ha definido el consejo".
Por su parte, su par Miguel Ángel Calisto también esbozó esa misma opinión, inclinándose por el mecanismo "un militante un voto". "Si en un plebiscito se define un militante un voto, evidentemente hay que acatar la decisión final que se tome desde la militancia, pero si no va a haber un ente representativo que tome una decisión, evidentemente no se puede aplicar ningún tipo de sanción", dijo, explicitando que le parece que no debiera ser vinculante la decisión que tome la Junta Nacional.
El diputado Ricardo Cifuentes fue determinante, y explicó que, si se busca que la decisión de la junta sea vinculante, eso significaría el quiebre de la colectividad. "Si eso se llevara a cabo así eso significa el quiebre del partido, significa que una parte del partido se va a ir, y eso es lo que yo creo que hay que tratar de evitar de todas maneras".
Agregando: "Claramente uno puede tener diferencias, y esas diferencias hay que respetarla al interior del partido. Es lógico que, si el partido toma un acuerdo por mayoría, la minoría se adscriba a ese acuerdo, pero en temas tan fundamentales como este yo creo que hay un espacio de discernimiento personal".
Vicepresidentes con posturas definidas
Cifuentes, además, habló sobre la entrevista del vicepresidente de la colectividad, Gianni Rivera, quien en conversación con El Mercurio aseguró que votará rechazo en el plebiscito de salida.
"Yo creo que la DC va hacia una partición, hacia un quiebre institucional muy fuerte. Cuando las autoridades del partido empiezan a tomar un sector a favor de algo o no antes de que se estructure una decisión más colectiva, me parece que hay un intento de poner en la mesa decisiones que parecen irrevocables".
Y se preguntó: "¿Qué va a hacer si gana en el partido en la junta nacional la opción del apruebo? ¿Va a seguir militando? ¿Va a obedecer esa opinión mayoritaria o va a seguir llamando a votar rechazo?".
Los otros parlamentarios también comentaron esta entrevista, pero asegurando que quien comenzó con "cada uno hace lo que quiere" fue la senadora y excandidata presidencial de la colectividad,
Yasna Provoste.
"Son posturas legitimas. Lo que pasa es que ya cuando la vicepresidenta Yasna Provoste se manifestó por el apruebo, ya se abrió la temporada de que cada uno pueda individualmente adelantar su opción", dijo por su parte Walker.
Asimismo, Pérez y Aedo. "No fue el quien comenzó con esta falta de entender que somos un colectivo, sino que lo hizo Yasna Provoste tempranamente en la cuenta pública. Eso también es una falta a la militancia", dijo la diputada.
Mientras que Aedo aseguró que "ya había una vicepresidenta que públicamente había dicho que iba a votar apruebo, entonces cuando comienza la temporada de oferta política se abre para todos".