Solo del oficialismo fueron quienes rechazaron o se abstuvieron frente a la petición del gobierno al Congreso Nacional el pasado 14 de junio para prorrogar por 15 días más el estado de excepción en la Macrozona Sur -región de La Araucanía y provincias de Arauco y Biobío. La medida obtuvo en la Cámara de Diputados 126 votos a favor (toda la oposición), 7 en contra y nueve abstenciones, mientras que en el Senado fueron 39 apoyos, solo una negativa y dos abstenciones.
A raíz de este hecho surgieron dudas sobre la capacidad que tiene el Ejecutivo para alinear disciplinadamente a sus parlamentarios, las cuales precisamente vuelven a reflotar esta semana.
Esto, ya que ayer la
ministra del Interior, Izkia Siches, anunció que acudirá nuevamente el próximo miércoles al parlamento a pedir la visa de los legisladores para
prorrogar el estado de excepción, el cual, si no, terminaría el 30 de junio. Pero, hasta ahora,
la secretaria de estado no ha logrado convencer a los díscolos que ya se han desmarcaron de su solicitud.
Uno de los votos en contra que obtuvo la medida fue de la diputada mapuche socialista, Emilia Nuyado, quien se negó nuevamente a apoyarlo. "Seguiré votando en contra del estado de excepción porque no es una medida que busca dialogar. Es una medida que permite la restricción, la militarización y la estigmatización del pueblo mapuche en su demanda histórica que es la restitución territorial".
Asimismo, su compañero del Socialismo Democrático, Jaime Araya (Ind. PPD), también votó en contra, pero por otro motivo completamente opuesto. "Hoy día, luego de ver la inactividad de las fuerzas militares y de carabineros frente a un ataque creo que está siendo mucho más débil, por lo tanto, yo no estoy disponible a dar mi voto para que se aplique de esta manera porque lo único que hace es desnaturalizar lo que es un estado de excepción".
Pero los votos que más causaron impacto fueron dentro de la coalición que sostiene al gobierno y de la que es parte el propio presidente, Gabriel Boric. Por ejemplo, la diputada
Mercedes Bulnes (Ind RD), se abstuvo, y aseguró en su momento -y ha vuelto a indicar- sus razones: "Es un problema policial, no de terrorismo y es el trato que debe dar el Gobierno.
Me parece que renovar el estado de emergencia y encargar a los militares el control de los asuntos policiales es una mala política".
En esa misma se ha pronunciado el diputado Tomás Hirsch (Acción Humanista) quien también se abstuvo. "Creo que no es adecuada la presencia de militares en acciones que le corresponden a la policía. Además, con prórrogas sucesivas, se corre el riesgo de naturalizar una situación que es excepcional. Me abstuve en la votación anterior y es probable que lo haga en la próxima, pero cada situación se evalúa en su mérito. La evaluación la haré en el momento de votar".
El parlamentario Andrés Giordano (Ind RD), quien también se abstuvo, intentó poner paños fríos a los cuestionamientos en las lealtades y disciplinas de los legisladores de gobierno. "Sin que esto signifique una fractura en el oficialismo, nuestro rol es representar a la clase trabajadora y, mirando nuestra historia desde ahí, advierto lo conflictivo de normalizar lo que en esencia es excepcional, que es el uso de militares y armamento de guerra para conflictos civiles, abriendo la puerta a sectores de derecha que insisten en que la solución es militarizar todo Chile".
Por su parte, otro de los votos en contra que recibió el Ejecutivo fue dado por la diputada comunista María Candelaria Acevedo. Ella ha rechazado las tres votaciones previas del estado de excepción -que se dieron para el norte de nuestro país.
En ese sentido, Acevedo indicó a Emol que está evaluando su votación en base a otras medidas que pueda tener el gobierno para destrabar el conflicto en la Macrozona Sur que sean de corto plazo. "No todo lo que viene en el Plan Buen vivir se puede hacer en este año 2022", dijo.
Y agregó: "Yo tengo que evaluar, ver cuáles son las condiciones con las cuales hoy día van a permitir que se lleve a este nuevo estado de excepción, a alargarlo 15 días más, tengo que ver cuáles son las formas, si hay alguna otra medida".
Hay otros casos, como el de la diputada mapuche Ericka Ñanco (RD), que es la única por La Araucanía con la que cuenta el Frente Amplio y no estuvo presente en la sala para la votación anterior, pero para este miércoles adelantó su voto. "Creemos también que los estados de excepción no van en la línea de poder generar dialogo. Creemos que los estados de excepción no son la solución a un conflicto histórico".
Posibilidad de rechazo
Esta situación pone en jaque la aprobación del estado de excepción que buscará visar el gobierno este miércoles 29 en el Congreso, ya que los descuelgues oficialistas ha generado también reacciones en la oposición.
Precisamente ayer los diputados de la UDI, a través de un comunicado de cuatro planas, manifestaron su intención de "evaluar con mayor detención" la solicitud para extender la herramienta constitucional por 15 días más.
Debido a diversos puntos, como el hecho de que sea
un estado de excepción "acotado", o por el grado de dependencia que tienen los oficialistas toda vez que no respaldaron con unanimidad la prórroga pasada, es que los parlamentarios gremialistas condicionaron su voto.
Sin esos votos y además con los díscolos oficialistas aumenta la posibilidad de que el gobierno salga derrotado de Valparaíso el próximo miércoles.