Luego de la exposición del ministro de Hacienda, Mario Marcel, y el presidente Gabriel Boric en el palacio La Moneda sobre la reforma tributaria que buscarán llevar adelante y despachar del Congreso antes de fin de año, las reacciones por los anuncios no han cesado.
Desde la oposición llegaron críticas, especialmente a la falta de medidas para impulsar la inversión nacional e internacional en el país, para superar la inflación y aumentar el empleo. Pero también hubo puntos específicos que sí se anunciaron en que los parlamentarios miembros de las comisiones de Hacienda -en donde se vivirán las discusiones clave respecto a la tramitación de la reforma- no están de acuerdo, y que podrían transformarse en los principales nudos que deberá destrabar el Gobierno.
"He escuchado algunas personas de derecha que están buscándole algún detalle, pero son los menos. He escuchado de hecho disposición de esos sectores, por lo menos en la comisión, de tramitar el proyecto, yo le tengo fe y mucha confianza", mencionó el diputado comunista Boris Barrera al ser consultado por Emol, pero parlamentarios de oposición opinan distinto.
Impuesto a la riqueza
Los puntos álgidos son principalmente tres. El primero, y una de las esencias de la reforma, será el impuesto a la riqueza. Marcel postuló que hasta los US$5 millones de patrimonio no existirá impuesto. Desde los US$5 a los US$15 millones se cobrará un 1%, mientras que sobre los US$15 millones, será un 1,8% de contribución. Esto no cayó nada bien en la oposición, aunque era un punto que se sabía desde la campaña del presidente Boric.
"La creación de
impuestos injustos e ineficaces, como el impuesto al patrimonio, en nada contribuye a bajar la elusión, que hoy ya es alta. Contrario a lo que dijo el Presidente, esta es una reforma que va en contra de los que hoy pagan impuestos", indicó el republicano
Agustín Romero.
Asimismo, se manifestó su colega UDI, Guillermo Ramírez. “El instrumento de subir las tasas de impuesto a las personas es malo, deberíamos apuntar a mayor formalización. Chile es el segundo país con menos trabajos formales”.
Miguel Mellado (RN), por su parte, mencionó que está de acuerdo en que los que tienen más paguen más, pero aclarando que hay situaciones específicas. "Tengan cuidado. A un profesional que se ha hecho de cero y que logra tener su patrimonio y que logra tener su empresa le vamos a pegar mucho más".
Para los oficialistas este es uno de los temas centrales y que más defienden de la reforma. Jorge Brito (RD), comentó dirigidamente que "los únicos que se van a oponer son los que solo les interesa defender los intereses del 0,1% más rico del país que es donde principalmente va dirigida en la parte de los ingresos".
Y añadió: "Esperamos no encontrar pequeñeces políticas y poner por delante el futuro de nuestro país. Ahora se inicia el debate que estamos preparados para darlo con el mayor respeto posible, pero también con la firmeza que se requiere para que Chile de pasos decisivos hacia mayor justicia tributaria, y en especial al impuesto a los súper ricos".
Eliminación de exención a arriendo DFL 2
Por otra parte, la medida de eliminar la exención tributaria (cobrar el impuesto total) a quienes arrienden su segunda vivienda DFL 2 (residencia con menos de 140 metros cuadrados) también ha generado polémica.
Uno de los que argumentó en contra fue del mismo Mellado. "Hay mucho jubilado en este país que han comprado una vivienda para arrendar, y ahora van a tener que pagar impuesto por ese arriendo, eso no me parece, porque creo que hay que dejar libre de impuesto y contribuciones a aquellos que han cumplido toda su vida con el país y que tienen arriba de 60 años".
El senador -presidente de la Comisión de Hacienda- Juan Antonio Coloma (UDI) también cuestionó ese punto. "Los impuestos vamos a verlos en su mérito. Creo que es muy importante que algunos de estos afectan fuertemente a los sectores medios. El tema en materia de arriendos DFL 2".
Jaime Naranjo (PS), quien preside la Comisión de Hacienda en la Cámara, había previsto este punto de debate. "Hay una parte que habría que precisarla más que es un impuesto que se quiere cobrar a los arriendos de las propiedades, y quizás eso puede verse como un problema para los sectores medios que muchas veces tienen propiedades en arriendo para mejorar sus pensiones y su calidad de vida cuando llegan a la vejez".
La reforma se comenzará a tramitar la próxima semana en el Congreso Nacional, y el gobierno espera despacharla antes de que finalice el año, para que pueda ser incluida. Aun que conocedores del tema han dicho que el gobierno no pretende ponerle urgencia inmediata, ya que espera poder abordarla con el tiempo que se requiera.
