Este martes, la diputada Carmen Hertz, del Partido Comunista, se refirió al nombramiento de su hijo, Germán Berger como agregado cultural en Barcelona y la polémica que surgió por establecerse en Barcelona y no en la capital española.
Tras su designación, el ex director de la Secom en La Moneda, se habría comunicado con el cónsul chileno en Barcelona, Jaime Ferraz, para darle a conocer que se establecería en esa ciudad para ejercer su cargo y no en Madrid. Ante esto, a través de una carta, Ferraz habría advertido a autoridades de la Cancillería que la destinación de Berger podría ser un problema puesto que "el independentismo catalán puede usar ese argumento en beneficio de su causa política, lo que no se condice exactamente con los intereses de nuestra política exterior".
Ante los cuestionamientos, la diputada expresó que "a German Berger
le sobran credenciales para ser agregado cultural, es cuestión de leer su CV, y es un orgullo que un hijo de Carlos Berger haya desarrollado el profesionalismo y capacidades que Germán ha desplegado a pesar del exterminio que asoló a su familia".
Hertz indicó que "en muchas ocasiones para su conocimiento la agregaduría cultural ha estado en Barcelona, no es primera vez" y aseguró que no aceptará "vetos a los hijos de los ejecutados políticos y detenidos desaparecidos. Basta del maltrato, eso no es aceptable".
"Esto que está ocurriendo ahora es una operación política, y quienes la fraguaron tendrán que dar cuenta de ella y saber cuál es el objetivo que tienen", sostuvo la parlamentaria, según consignó T13.
Además, criticó los dichos del cónsul y consideró "inaceptable el tono empleado en la misiva y que lo haya hecho público. Y no se necesita el parecer del cónsul para la designación de un agregado cultural que lo hace el Presidente de la República", finalizó.
