Sentadas: Ministra de la Mujer, Antonia Orellana, abodaga Elisa Walker, ministra del Interior, Izkia Siches, ministro Segpres, Giorgio Jackson, subsecretario de Desarrollo Regional, Miguel Crispi.
Caminando por adelante: Cristobal Urruticoechea, jefe de bancada de diputados republicanos.
Aton
Esta mañana comenzó el análisis, por parte de la Cámara de Diputados, de la Acusación Constitucional contra la ministra del Interior, Izkia Siches, presentada por los parlamentarios republicanos, que viene con recomendación de rechazo desde la Comisón Revisora.
En ese contexto, la defensa de la ministra, encabezada por la abogada Demócrata Cristiana,
Elisa Walker, dedujo la “cuestión previa”, es decir, decidió utilizar la herramienta anterior para intentar que la Acusación Constitucional se deseche antes de ir al fondo de ésta.
De aprobarse la "cuestión previa", los diputados deciden directamente desechar el libelo acusatorio, mientras que, si se rechaza, sí se dará la votación de la AC.
Walker mencionó cuatro requisitos incumplidos en el libelo por lo que pedía admitir la "cuestión previa": No se utilizó como última ratio, se está utilizando como juicio de mérito por una decisión política, pretende hacer responsable a la ministra por actos de terceros- como acusarla de no haber ejecutado las expulsiones administrativas de extranjeros, siendo que esta labor la realiza el director nacional de Migraciones- y que carece de toda lógica argumentativa y falta de fundamentación.
La ministra Siches, previo a comenzar el estudio de la AC, comentó escuetamente: "Estamos muy pendientes a cómo se va a dar la discusión ahora".