El ex vicepresidente de la Convención Constitucional, Jaime Bassa, se sumó este miércoles a los análisis en torno al "Plan B" que abrió el Presidente Gabriel Boric el pasado viernes, en caso que gane el Rechazo: convocar a una nueva elección de convencionales y abrir un nuevo proceso que tardaría un año y medio.
"Mi primera posición es que gane el Apruebo este 4 de septiembre. Eso es lo que hoy día mayor claridad nos da respecto a qué camino seguir", comenzó diciendo Bassa en conversación con Radio Universo. A ello, agregó que una de las ventajas del texto propuesto es que "su articulado transitorio contempla una serie de etapas, de prioridades, proyectos de ley, de tránsito entre la actual Constitución y la nueva, que nos da bastante claridad lo que va a pasar con la cuestión política en los próximos años".
"El problema del loop constitucional no está sólo en el hecho de que la norma esté vigente en la Constitución, está en el hecho de que volvemos a conversar otra vez sobre el mecanismo, al final el problema del loop es ese, que se abre con el Rechazo. No es un problema que se abre con la intervención del Presidente".
Jaime Bassa, ex vicepresidente de la Convención Constitucional
Frente a los dichos del Mandatario, Bassa recordó que "es verdad que hay un Plebiscito, el del 25 de octubre de 2020, donde el pueblo de Chile se pronunció claramente sobre dos cuestiones: que quería una nueva Constitución y que fuera redactada por una Convención Constitucional; no mixta, no por el Congreso y no por una comisión de expertos".
Pero agregó que "también es cierto que el mecanismo, estando contemplado en el articulado permanente de la actual Constitución, contempla fechas claras y precisas. Entonces, efectivamente hay un espacio de incertidumbre, una pequeña tensión. Si estuviera en el articulado transitorio sería distinto, porque éste sólo tiene vigencia mientras se cumple temporalmente con los plazos que esa norma establece. Pero al ser un articulado permanente, es obligatorio. El punto es que habrá que cambiar los plazos efectivamente".
En su opinión, el plan del Presidente "da cuenta del contenido del mandato popular del 25 de octubre de 2020, y en ese sentido, es coherente democráticamente con lo que el pueblo de Chile manifestó en las urnas".
"Pero luego está el problema que no es menor, que por lo demás lo tienen todas las alternativas de tercera vía que se han planteado, y hay que tener cuidado desde el 5 de septiembre en adelante si gana el Rechazo, porque cualquier alternativa significa cambiar un poco el foco de la discusión y traspasar la decisión finalmente al Congreso Nacional".
De todas formas, en cuanto a la interpretación del Mandatario y las distintas opiniones que han abordado su propuesta desde lo jurídico, Bassa dijo creer que "el Presidente tiene razón, en el sentido que su interpretación es razonable, pero como toda interpretación jurídica, no está exenta de diferencias. El derecho sigue siendo una ciencia social, no es exacta, hay margen para la interpretación, sobre todo cuando las interpretaciones técnicas están teñidas por los objetivos políticos que los distintos actores tenemos de cara al Plebiscito".
"Creo que, políticamente, el Presidente se afirma de manera correcta en lo que es el resultado del Plebiscito de 2020; jurídicamente, se afirma de manera correcta al sostener que el mecanismo está vigente en los artículos permanentes de Constitución chilena, y tiene ese punto débil, de sombra, por cuanto ese articulado permanente contiene fechas concretas, por eso no es automático y por eso abre incertidumbre", resumió.
En esa línea, agregó que "el problema del loop constitucional no está sólo en el hecho de que la norma esté vigente en la Constitución, está en el hecho de que volvemos a conversar otra vez sobre el mecanismo, al final el problema del loop es ese: que se abre con el Rechazo. No es un problema que se abre con la intervención del Presidente".
Trabajo de la Convención
Consultado por la evaluación ciudadana sobre el desempeño de la Convención, Bassa dijo asumir la responsabilidad que le compete como ex vicepresidente en el periodo de instalación, "y habrá que hacer esos juicios políticos cuando correspondan".
Sin embargo, recalcó que hasta ahora no hay buenas razones para pensar que la propuesta "haya fracasado", especialmente porque el proceso "está en curso" y aún no se realiza un Plebiscito. En segundo lugar, "se asume un aspecto que ha sido puesto en la opinión pública de manera un poco forzada, que es el hecho de que la ciudadanía siente distancia respecto de esta propuesta constitucional. Yo no tengo claridad que esto sea así, sin perjuicio de lo que muestren las encuestas".
Frente a ello, Bassa recordó que "desde julio de 2021, la presidenta (Elisa) Loncón y yo, acusamos y avisamos de que había una campaña de desprestigio armada en contra de la Convención Constitucional. Efectivamente, ese año, hubo un puñado de constituyente que tuvieron comportamientos poco republicanos, pero curiosamente el estadio de opinión pública se construyó solamente criticando aquellos comportamientos de constituyente de centro izquierda".
Por el contraste, afirmó, "nada se dijo de las prácticas obstruccionistas que tuvimos de parte de constituyentes de extrema derecha; nada se ha dicho de los problemas legales y de fraude que tuvieron algunos constituyentes durante el desempeño de su trabajo en la CC, y curiosamente sólo se han utilizado las críticas a constituyentes para aportillar el trabajo y deslegitimar el contenido de la propuesta".
"Yo tomaría distancia de esa afirmación. Ciertamente creo que hay responsabilidad de la CC. Tuvimos problemas importantes para dar a conocer lo que estábamos haciendo. Hubo episodios evidentes, partiendo por el de Rojas Vade, que fueron minando la credibilidad de la CC, pero son hecho personales, no institucionales, que no ocurren de la misma manera del Senado o la Cámara, cuando un senador o un diputado se manda un numerito de estos, no es la Cámara la que asume la responsabilidad, es la persona", comparó.
