SANTIAGO.- Tras la investigación que inició ayer Contraloría en La Moneda, luego de una serie de acusaciones de intervencionismo electoral, desde el Rechazo han evidenciado -incluso desde antes- las dificultades de competir contra quienes están por el Apruebo. Esto pese a que los aportes de campaña registrados en el Servicio Electoral (Servel) se inclinan a favor de ellos.
"La campaña para el Plebiscito de salida es desigual. Quienes estamos por el Rechazo tenemos enfrente al viejo monstruo de siempre, el Leviatán de mil caras, pero finalmente siempre el mismo en su potencia, alcance e influencia: el Estado, ese mismo que toda Constitución debiera intentar limitar para impedir sus excesos y abusos contra el individuo", señaló Cristián Warnken, en una columna publicada hoy en El Mercurio.
En ese contexto, Warnken, uno de los presentantes del movimiento Amarillos por Chile, aludió directamente a la campaña informativa que lleva adelante el Gobierno, y que también ha sido blanco de críticas por parte de la oposición: "¿Cómo competir con esata inmensa caja pagadora de recursos, que suele convertirse en botín apetecido por las maquinarias partidistas?", preguntó.
El tema ha sido planteado también esta semana por los voceros de la Casa Ciudadana por el Rechazo, la cual reúne a más de 60 organizaciones de la sociedad civil que están por esta opción.
El pastor evangélico Esteban Barahona, presidente de ConFamilia, expresó el martes que el intervencionismo electoral de La Moneda, "se siente, es muy claro, a pesar de que se está haciendo una campaña informativa por parte del Gobierno, nosotros creemos que el Gobierno no debiera involucrarse en nada de este proceso, debiera dejarlo todo en manos de la ciudadanía y de los partidos que están legalmente. Pero esta es una contienda totalmente desigual. que el Gobierno comience a trabajar y a repartir este material".
Asimismo, Carlos Siri, de Primero Las Víctimas, consideró que "el Gobierno ha hecho un despliegue a vista y paciencia de todos los ciudadanos, ocupando los recursos del Estado, para impulsar el Apruebo".
El ex timonel de RN Mario Desbordes, quien lidera el movimiento "#Hagámosla en serio", compartió las críticas al Gobierno, a quien apuntó de "intervenir (en la campaña) de la manera abierta como lo está haciendo, con recursos públicos, entregando constituciones gratis, pero al mismo tiempo diciéndole a la 'gente que esa Constitución es muy buena y que Chile se juega todo si esa propuesta no se Aprueba'. El Gobierno no sólo está entregando la propuesta monopolicamente, porque pudo haberla mandado a los municipios, parlamentarios y cores, pero la está haciendo sólo las autoridades de Gobierno (...) y con alcaldes que están por el Apruebo".
En ese contexto, Desbordes afirmó que "yo había visto actos de intervención antes que fueron denunciados, incluso por partidarios de las coaliciones de gobierno, en el caso de la Nueva Mayoría, pero esta intervención de ahora es lejos la más grande que se ha visto en Chile, desde el retorno a la democracia, la más abierta".
Gastos de campaña
Otro tema al que han apelado en el Rechazo son los gastos de campaña de ambas opciones, pues si bien ellos superan los aportes recibidos en el Servel, en comparación con el Apruebo, acusan que los partidarios de dicha alternativa no ha transparentado el tema.
"Yo creo que las cifras de gasto del Rechazo y del Apruebo son muy similares, el problema es que las del Apruebo no están siendo reflejadas. Es ridículo pretender que el acto gigante no cuesta al menos unos 200 millones de pesos, es ridículo. No están reflejando el gasto, no están siendo sinceros", opinó Desbordes.
Claudio Salinas, uno de los voceros de la "Casa Ciudadana por el Rechazo", indicó también ayer que "emplazamos al comando del Apruebo a que transparenten donde están sacando todos los recursos para hacer todas las actividades que hemos visto, cómo se financió la actividad en Maipú y el despliegue que en estos momentos tienen en la calle".
La opinión de los expertos
Para el académico de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma, Tomás Duval, el debate sobre el intervencionismo electoral "es propio de las campañas políticas. Ya entramos a los últimos 30 días, las acusaciones de intervencionismo del Gobierno son parte del discurso de la campaña de los últimos ciclos políticos, quien esté en la oposición mira la intervención del Gobierno como cualquier acto y quienes están en el Gobierno dicen 'no estamos, porque estamos dentro de las reglas', yo creo que ese es el punto central. Es un hecho político más dentro de la campaña".
En la misma línea, el director de la Escuela de Gobierno de la Universidad Central, Marco Moreno, consideró que "efectivamente, hay situaciones que el Gobierno tiene que aclarar, porque la línea entre informar y ser garante de un proceso es bien delgada. Por eso que hay mucha porosidad y el Gobierno tiene que evitar la situación, porque en la medida que se sigan levantando en la opinión pública, lo que hace es instalar la sospecha".
Según el decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo, Eugenio Guzmán, "ciertamente el Estado es un aparato, el órgano más pesado que existe en un país, no solamente en términos financieros, sino de recursos humanos, simbólicos y de recursos legislativos, Desde ese punto de vista es un adversario no menor, en ese punto de vista el argumento es razonable", por parte del Rechazo.
En ese sentido, Guzmán aseveró que esto "tiene un impacto sobre todo en la medida de que las acciones o decisiones que se tomen tengan un efecto en términos de expectativas, de sensación de bienestar o de morigerar discursos, en ese sentido puede tener alguna influencia o impacto".
No obstante, Duval dijo que "no creo que estos temas vayan a decidir el voto de aquellos que hasta el día de hoy aparecen como indecisos en los sondeos, creo que son temas más sensibles, radicados en las emociones y en otros contenidos (los que impactan) más que en estas acusaciones netamente políticas".
Finalmente, Moreno concluyó que "un error si en el Rechazo están pensando en instalar este hecho -por mucho tiempo- como un eje de campaña", agregando que "no creo que mueva significamente la aguja" y que "no creo que la gente cambie su decisión, su convicción respecto de lo que esté en juego, porque hay a una acusación que tendrá que probar la Contraloría, de intervencionismo del Gobierno, la gente no toma sus decisiones en función de eso".
