70 ataques, 32 denuncias, 10 militares heridos. Esa es la estadística que registra la
División de Ingenieros del Ejército por los hechos de violencia del que han sido víctimas solo en lo que va del 2022.
¿Los autores? Desde el Ejército apuntan directamente a grupos de estudiantes del
Internado Nacional Barros Arana, con quienes colindan en los terrenos en la calle Santo Domingo.
En la rama castrense dicen que es "bastante extraño y sorpresivo". Dicen no saber por qué son blancos de los ataques.
"Nos sorprende, no nos explicamos los motivos, no tenemos las razones, solamente somos los afectados de estos ataques", asegura
Jean Pierre Irribarra, general de Brigada y comandante de la División de Ingenieros.Sin embargo, el
Centro de Estudiantes del INBA mediante una declaración apuntó al tema de los terrenos, ya que según ellos donde hoy está el Internado era el pabellón Cantuarias. "Parte de nuestras demandas es que se nos devuelva este espacio", señalan en un comunicado.
Por su parte, la
rectora del establecimiento, María Alejandra Benavides, se sumó y comentó a Ex Ante que "el centro de estudiantes sacó una declaración donde una de las demandas que incluyen con respecto a los militares es la devolución del terreno.
El terreno que ocupan los militares es el antiguo patio azul del INBA, y que sin consulta y en tiempos complejos y de manera arbitraria se le habría entregado ese espacio a la división militar".
Según el general Irribarra "el Ejército ha estado en estos terrenos desde el año 1906. Ya en 1958 está el desarrollo de este terreno, porque aquí funcionó la fábrica de vestuario y diseño del Ejército. En los años 60 se produjo un incendio y esta fábrica se quema en su totalidad y posteriormente es construida las dependencias que hoy albergan a la División de Ingenieros.
La relación del Ejército con el INBA es de mucho tiempo, el Barros Arana tiene su propiedad desde el año 30, desde 1930 somos vecinos y siempre ha existido una excelente relación".