La titular de la Secretaría General de Gobierno (Segegob), Camila Vallejo, se refirió este sábado al diálogo constituyente que se está llevando a cabo por partidos políticos con representación en el Parlamento, destacando los avances, pero también asegurando que "se requiere despejar pronto el camino hacia una nueva Constitución".
En primer lugar y en conversación con CHV Noticias, la ministra reiteró que "el Gobierno no está liderando, sino que está acompañando el proceso de diálogo, una tarea que no ha sido fácil, pero que ha requerido voluntad y disposición para que avance, y tenemos esperanza que dé buenos frutos".
"La gran mayoría de los que están liderando, desde el oficialismo a la oposición, están por llegar a un acuerdo que nos permita abrir un nuevo camino para dotarnos de una Constitución hecha en democracia y que nos represente a todos y todas", agregó.
Luego, precisó que se queda "con las palabras del presidente de la UDI, Javier Macaya, quien dice que es el momento de pensar en Chile y no en la conveniencia de unos pocos. Creo que si ese es el espíritu mayoritario, por cierto que vamos a llegar cuanto antes a un acuerdo que dé certezas a la ciudadanía y que satisfaga las expectativas de un proceso democrático seguro y que dé certezas de reforzamiento de nuestra democracia".
Ahora bien, en cuanto al tiempo que queda para llegar a un acuerdo, manifestó que "más que cronograma, es entender que hay una, no sé si es urgencia ciudadana, pero una necesidad de que esto se resuelva pronto. Respetando los tiempos que requieren los diálogos y negociaciones, pero con el sentido de urgencia puesto en que se requiere despejar pronto el camino hacia una nueva Constitución".
Según detalló, "esa certeza es importante entregarla, dentro de todas las otras certezas que nos estamos preocupando de entregar. Esa incertidumbre política sobre un proceso tan importante como cambiar la Constitución, es relevante para una sociedad, que sepa cuál es el camino que como país va a dar y en qué tiempo para contar con un pacto social que nos represente a todos".
Vallejo también se refirió a "los marcos que están definiendo", señalando que "hay bases que se han puesto sobre la mesa y nos sentimos bien representados por los partidos oficialistas que se han puesto de acuerdo. No solo tiene que ver con los mecanismos para el funcionamiento como se constituye el órgano, sino en cuánto a las bases de la institucionalidad, que es importante que estén porque en una república, democrática, la separación de poderes -que uno dice que son obvias-, es bueno que estén sobre la mesa para dar certezas y garantías sobre la defensa de nuestro país y de nuestras instituciones".
Con todo, la titular de la secretaria de Estado, acotó que "esperamos que las conversaciones sigan rindiendo frutos. Tenemos harta esperanza en el proceso y la voluntad y capacidad de quienes están participando".
"Es un intento de censura que no vamos a permitir"
Por otro lado, Vallejo se refirió a la discusión que surgió esta semana en materia de aborto, reiterando que "surge a propósito de una iniciativa parlamentaria proveniente de la ultra derecha en el Congreso, quienes señalan querer legislar para, incluso, abrir la posibilidad de que niñas terminen presas por abortar producto de una violación, y eso nos parece grave".
"Pretender que el Gobierno no hable, no opine o no abra instancias de diálogo sobre temas que son propios de un programa de Gobierno que fue votado por la ciudadanía, es un intento de censura que nosotros no vamos a permitir en ningún caso, en ninguna circunstancia", aseveró.
Según explicó, a raíz de la iniciativa de parlamentarios, la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, "plantea que como Gobierno no vamos a permitir que eso se pueda producir (...) Esta idea escapa a todo consenso internacional en materia de derechos humanos de manera general, y en particular, en lo que respecta a los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres".
En ese sentido, agregó que "la ministra hace algo que es de sentido común y a partir de una pregunta de qué vamos a hacer. Dice que estamos en diálogos preparatorios con las mujeres y organizaciones para ver la estrategia legislativa más apropiada a la realidad chilena, y esa es una discusión legítima que el Gobierno debe dar, porque tiene compromisos programáticos y no solo en lo que es coyuntural, sino que prepara las condiciones, conversaciones y compromisos que se van a realizar más adelante y que tienen que ver con el programa de Gobierno".
Por último, recalcó que "nos parece preocupante que haya sectores que no quieran que las cosas se dialoguen", pero afirmó que "tengo confianza que la mayoría de los demócratas del país no se van a oponer en pleno siglo XXI a que se abran discusiones sobre los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, más allá de su opinión personal y política, que es legítimo".