Los presidentes del Senado, Álvaro Elizalde, y de la Cámara de Diputados, Raúl Soto, expresaron este jueves su rechazo a los "episodios de violencia" que se registraron hoy en la mesa paralela al diálogo constitucional.
Durante la mañana, se vivieron momentos de tensión en la instancia luego de la llegada al Congreso en Santiago de Francisco Muñoz, conocido como "Pancho Malo", invitado por parlamentarios integrantes de la mesa.
Luego, se produjo un episodio aún más complejo cuando el diputado Gaspar Rivas discutió a gritos con el resto de los presentes, motivo por el que fue expulsado de la mesa.
Al respecto, Elizalde y Soto emitieron un comunicado donde valoraron la "voluntad de cada uno para avanzar" en el debate constituyente, pero criticaron la mesa paralela.
"Condenamos enérgicamente los episodios de violencia con descalificaciones y agresiones ocurridos en una reunión paralela, en la que participó un grupo de personas que busca hacer fracasar las conversaciones constitucionales y que no representa a las mayorías que hoy se expresan en el Congreso Nacional", manifestaron los líderes del Parlamento.
Asimismo, subrayaron que "la invitación a dicho grupo no correspondió a una decisión institucional, sino que a la de un senador en particular. Por ello, los comités que representan a las bancadas del Senado realizaron una declaración publica rechazando esta invitación, lo que compartimos".
"Finalmente, hacemos un llamado a preservar el diálogo de carácter institucional que se está desarrollando en el Congreso, así como mantener el respeto y la prudencia, para aislar a aquellos que quieren hacer fracasar estas conversaciones protagonizando agresiones, insultos y hechos de violencia", concluyeron.