Imagen del primer año de aniversario del estallido social.
Aton
El próximo martes el Presidente Gabriel Boric vivirá su primer aniversario del inicio de la crisis que se inició en Chile el 18 de octubre de 2019, proceso que dejó una serie de consecuencias políticas, sociales y económicas que aún resuenan en el país.
La más relevante fue la creación de un proceso constituyente que dio como fruto un proyecto de Nueva Constitución redactada por una Convención Constitucional 100% electa, el cual fue rechazado por la ciudadanía en el Plebiscito de salida de septiembre pasado.
También dejó víctimas de violaciones a los DD.HH. durante las protestas y provocó perjuicios a la infraestructura pública y privada, los cuales aún persisten en algunos barrios y zonas desde Arica a Magallanes, siendo el sector de Plaza Italia el más golpeado.
Ante todos esos aspectos, el Mandatario y su Gobierno ha intentado entregar soluciones. Un programa de reparación para los afectados por el uso de la fuerza por parte de las policías, otro de recuperación económica para pymes y el impulso al diálogo que están sosteniendo las fuerzas políticas para crear una nueva Carta Fundamental.
Esos tres ejes formarían parte de la reflexión que Boric realizaría para conmemorar el hito, el cual sin duda marcará su semana y la de toda su administración, cuyos ministerios tendrán espacio para que las autoridades puedan plantear sus puntos de vista sobre el tema.
Según comentaron fuentes del Ejecutivo a Emol, el jefe de Estado no prevé tener alguna actividad vinculada directamente al 18-O, pero sí estaría evaluando enviar un mensaje al país, en el cual detallaría los esfuerzos que ha hecho su Gobierno para abordar las demandas que se levantaron en esos convulsionados días.
De hecho, en los últimos días, en el marco del debate que se está desarrollando en el Congreso Nacional para crear una nueva Convención, Boric ha subrayado la necesidad de que no se pierda de vista que el malestar representado en esos días aún no se ha disipado y que para abordarlo es necesario la aprobación de las reformas estructurales que propuso al Parlamento.
"No nos olvidemos de lo que nos pasó en Chile hace tan poco, es un malestar que sigue aún latente, en donde se requieren cambios estructurales, pero serios. Que no sean dogmáticos, cambios estructurales que se hagan cargo de enfrentar las profundas desigualdades que tiene Chile con la vista puesta en el empleo, en el crecimiento y también en mayor igualdad para nuestro país", dijo la semana pasada.
Desde el Gobierno comentan además que los ministerios tendrán libertad para preparar actos o declaraciones sobre la materia, pero que estas deben ser lo más "sobrias y republicanas posible", en línea con el mensaje que buscaría instalar el Presidente.
