Tras la llegada de Ximena Aguilera como ministra de Salud, el proyecto "Seguro clase media protegida", que fue presentado en 2018 por el entonces ministro Emilio Santelices, durante el segundo gobierno de Piñera, se ha transformado en una de las iniciativas prioritarias del Minsal. La idea general de este proyecto es que en el caso de que un paciente Fonasa desee acudir al sistema privado para evitarse la lista de espera, tenga un gasto tope que no supere los 4,8 ingresos mínimos en el caso de los afiliados a los grupos B, C y D, mientras que 2,5 ingresos mínimos en el caso del grupo A. Es decir, promueve un seguro catastrófico que asegura que ningún paciente Fonasa pagaría una cuenta de más de $2 millones como máximo al atenderse en el sistema privado. La ministra asevera que si bien retomarán la tramitación del proyecto, enviarán "indicaciones que hagan que ese seguro permita el objetivo que se quería, que es proteger el gasto del bolsillo de las personas que recurren a libre elección. Sin embargo, vamos a tratar de darle un sentido más sanitario en orientar ese gasto hacia prioridades sanitarias".