La
Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (DINAC) de
Paraguay anunció la apertura de una investigación interna tras el accidentado viaje del
avión de Latam 1325, que esta madrugada sufrió una emergencia mientras viajaba entre Santiago y Asunción.
La aeronave, con 48 pasajeros más tripulación, aterrizó en Foz de Iguazú y llegó a su destino con el parabrisas roto, sin un motor y la parte del frente destrozada, tras encontrarse en el camino con una fuerte tormenta de granizos.
El director de Aeropuertos de la DINAC, Douglas Cubilla, explicó que no solo se indagará la parte física del avión, sino que también su caja negra y la comunicación que se dio para que el piloto finalmente partiera.
La idea del proceso es tener información clara y objetiva del incidente.
"Según lo recopilado hasta ahora, hubo una sorpresiva tormenta de granizos. La investigación será muy extensa, analizaremos las comunicaciones y más, pero se sabrá lo que ocurrió ", manifestó Cubilla.
No obstante, algunos pasajeros aseguran que le advirtieron al piloto de que en el camino habría una tormenta, pero que éste minimizó las advertencias e igual decidió seguir.
"Hay un poquito de lluvia no más", habría señalado el comandante de vuelo.
Al respecto, Cubilla expresó que "el vuelo de Foz de Yguazú a Asunción dura unos 30 minutos, pero por el camino sufrió este encontronazo con los granizos y es ahí donde se declararon en emergencia, a mitad de vuelo. El capitán del avión toma el vuelo, según lo que le indica el radar, pero tengo entendido que la granizada lo agarró de sorpresa".
Junto con esto, destacó la experiencia y pericia de la tripulación para salir de manera airosa de la emergencia. "El piloto es uno muy experimentado porque supo manejar la situación y llegó a salvo con todos los pasajeros", resaltó.
De acuerdo a los antecedentes que se manejan, el avión salió de Chile con 101 pasajeros, de los cuales 36 eran chilenos. No obstante, aún no se sabe cuántos nacionales aterrizaron en Asunción, ya que algunos se bajaron en Iguazú.