La sala del Senado aprobó en general el proyecto de reforma constitucional que habilita el nuevo proceso constituyente, con 42 votos a favor, 7 en contra y 1 abstención.
Quienes votaron en contra fueron los senadores independientes-RN Juan Castro, Alejandro Kusanovic, Kenneth Pugh y Carmen Gloria Aravena, además del senador independiente Karim Bianchi, el senador Rojo Edwards (Republicanos) y el senador UDI José Miguel Durana. En tanto, se abstuvo la senadora Fabiola Campillai (Ind).
La iniciativa, que tiene discusión inmediata, busca generar un nuevo mecanismo de redacción de una Carta Magna a través de la creación de un Consejo Constitucional de 50 integrantes, paritario, que comenzará a funcionar el 7 de junio.
Antes de eso, el 6 de marzo, iniciará el trabajo de la Comisión Experta, que estará compuesta por 24 personas propuestas por la Cámara y el Senado con el fin de trabajar en un anteproyecto de nueva Carta Fundamental que servirá como insumo para los consejeros.
El proyecto aborda el procedimiento de creación de este texto, los quórum de votación -3/5 para aprobación de normas- , el mandato a la Cámara y al Senado para diseñar un reglamento de trabajo para el órgano y la existencia de un Comité Técnico de Admisibilidad que velará por el cumplimiento de 12 bases constitucionales que guiarán la redacción del nuevo texto.
Finalmente, la moción establece como fecha del plebiscito de salida el próximo 17 de diciembre, donde la ciudadanía tendrá que decir si está a favor o en contra de la propuesta constitucional.
A pesar de que la mayor parte de los senadores pertenecientes a los partidos que firmaron el acuerdo constitucional respetaron el compromiso suscrito por sus colectividades, el debate en particular estará marcado por varios intentos de modificar algunos elementos de la reforma.
Para eso, se abrió un plazo de indicaciones que concluye este miércoles a las 13:00. En ese marco, el senador Pedro Araya (Ind. PPD) aseguró que la moción "tiene una serie de deficiencias que es necesario corregir. Mi impresión es que tratar de apurar el tranco en este tema puede generar una serie de inconvenientes que si no son resueltos adecuadamente, podemos tener problemas a posterioridad. Si es necesario tomarse un par de días más, habrá que hacerlo y se tendrá que correr el calendario electoral".
A su juicio, algunos temas que deberían revisarse y que han sido objetados también por otros senadores son la forma de reclamar lo que haga el Consejo Constitucional, si a través de la Corte Suprema o del Comité Técnico de Admisibilidad; quiénes van a ser los expertos, cómo se integra esa Comisión y cuáles son las atribuciones efectivas que van a tener.
Por su parte, el senador y presidente de RN, Francisco Chahuán (RN) dijo que estaba "tranquilo" respecto a que iban a tener un proceso "serio y responsable" y llamó a revalidar la política de los acuerdos.
"Algunos han acusado la cocina. La política implica llegar a acuerdos con quienes pensamos distinto. Por tanto, el llamado que quiero hacer es revalidar la política, resignificar y redignificarla y para eso es necesario entender que los acuerdos son esenciales (...) esta es una decisión valiente de mi sector. Creemos que acá hemos logrado avanzar de manera sistemática en entender que el pacto de convivencia requiere unidad", afirmó.
"No es un detalle, acá tuvimos un proceso constitucional que culmina con un plebiscito, un resultado, pero quiero destacar que a pesar del resultado, existe la disposición y no por eso la unanimidad de visiones, pero la disposición, de muchas de las fuerzas políticas de seguir buscando un cambio y una salida para terminar con la Constitución de 1980 y destacar que es necesario tener un Estado social democrático y de derecho", valoró la senadora Claudia Pascual (PC).
En cambio, una de las intervenciones más críticas fue del senador Rojo Edwards (Republicanos) que relacionó el acuerdo constitucional con el indulto concedido a distintos condenados las emana pasada.
"¿Por qué el Presidente Boric libera a 12 delincuentes en el marco de las conversaciones por un acuerdo de seguridad (...) porque el Gobierno ya obtuvo lo que quería: una nueva Convención para así a través de la Constitución distribuir el poder de una manera distinta, entonces la seguridad queda en segundo plano. Le quería pedir a los amigos de Chile Vamos utilizar el poder que se tiene para obligar a que el Presidente represente a su gente y se pueda llegar a un acuerdo en seguridad", dijo.
El Senado continuará con la revisión en particular de la moción este miércoles desde las 14:00 y hasta terminar la votación de sus decenas de indicaciones, para así despacharlo y que la Cámara pueda revisarlo desde el jueves.
