Una sensación de pesimismo en la economía y el progreso del país; un Gobierno con baja aprobación y pocas figuras destacadas; y un cambio significativo en la valoración de la democracia. Esas son sólo algunas de las señales que dejó los resultados de 88° encuesta de opinión pública del
Centro de Estudios Públicos (CEP) presentados este miércoles.
La muestra consideró población urbana y rural -con exclusión de zonas de difícil acceso-, y su muestra fue de 1.441 personas, entrevistadas cara a cara en sus hogares, en 140 comunas del país; con un nivel de respuesta de 62,8%, con un error muestral de 2,8% y un nivel de confianza de 95%.
El sondeo arrojó que la desaprobación al Presidente Gabriel Boric aumentó en 11 puntos respecto a la encuesta anterior, pasando del 49% al 61%; asimismo, la desconfianza en el Gobierno como institución bajó 6 puntos, pasando de un 22% a un 16%.
La interpretación de la coordinadora de opinión pública del CEP, Carmen Le Foulon sobre este aspecto, se vincula directamente con otras de las dimensiones que expuso la encuesta: el efecto económico -tanto en la aprobación del Presidente Boric como de otros ex Mandatarios-, y el aumento de la preocupación por la delincuencia. "Yo diría que esos dos aspectos importantes inciden en la aprobación", sostuvo.
Pesimismo en la economía y el progreso
Si bien el 53% de los consultados considera que su situación económica personal "no es ni buena ni mala", la perspectiva se torna más pesimista al calificar la situación económica del país. De hecho, sólo un 9% cree que el país está progresando, versus el 15% que declaraba esto como cierto en el sondeo de abril-mayo de 2022.
"La percepción de que la actual situación económica es mala o muy mala aumenta de un 58% a un 63%; un 32% considera que no es ni buena ni mala; y sólo un 5% considera que es buena o muy buena, lo que cae del 8% respecto a la medición anterior", dijo Le Foulon.
También se registró un empeoramiento de las perspectivas a futuro, puesto que aumentó el porcentaje de personas que cree que en 12 meses más la situación económica del país empeorará (42% a 49%); cae quienes creen que no cambiará (de un 37% a 31%); y se mantiene quienes creen que mejorará, en un 18%".
Al consultar a los encuestados si Chile está "progresando, estancado, o en decandencia"; los que consideran un estancamiento pasaron de 51% a 55%; los que apuntaron a la decadencia se mantienen en el orden del 35; y "sí vemos un cambio estadísticamente significativo en el porcentaje de gente que cree que el país está progresando, que cae de un 15% de la medición anterior (abril-mayo 2022) a un 9% en esta edición", dijo Le Foulon.
Acento en el esfuerzo individual sobre la ayuda estatal
La encuesta también dio cuenta de algunos principios asociados a la situación económica. El polo que considera que "debería premiarse el esfuerzo individual aunque se produzcan importantes diferencias de ingresos" se ha mantenido constante en las últimas mediciones, y se situó en un 51% (en la encuesta anterior, el indicador fue de 49%).
En tanto, un 27% se ubica en una posición intermedia, mientras que un 18% considera que "los ingresos deberían hacerse más iguales, aunque no se premie el esfuerzo individual" (un 22% en el sondeo anterior).
Al consultar sobre las responsabilidades del Estado respecto al sustento económico de la población, se observa un cambio estadísticamente significativo respecto a la medición de agosto de 2021, donde se evaluó este criterio.
Así, hay una caída de un 23% a un 17% de las personas que se ubican en el polo que opinan que la principal responsabilidad por el sustento de las personas corresponde al Estado, mientras que aumenta de un 43% a un 53% quienes creen que "la principal responsabilidad por el sustento económico de las personas está en las personas mismas".
Delincuencia como máxima preocupación
Respecto a la consulta de los temas a los que debería dedicar el mayor esfuerzo el Gobierno, la delincuencia sigue encabezando la lista de los temas que más preocupa a la ciudadanía, "con un aumento significativo desde abril-mayo 2022 (sondeo anterior), pasando de un 50% a un 60%", dijo la coordinadora del área de opinión pública del CEP, Carmen Le Foulon.
A ello, le sigue salud (32%), pensiones (31%), educación (26%) y narcotráfico (25%), y la inmigración aumenta, "y ahora es mencionada como uno de los principales problemas, por un 19% de la ciudadanía", dijo la vocera.
En tanto, corrupción se mantuvo en 14%; seguido de sueldos y pobreza, con 13% y 12% respectivamente; violencia que baja ligeramente de 15% a 12%; vivienda, empleo e inflación, que bordean el 10%.
Estos resultados también estarían relacionados con el "repunte" que tuvieron las instituciones relacionadas a la seguridad y orden público, puesto que hubo incrementos significativos respecto al sondeo de abril-mayo del año pasado.
Si bien las universidades se mantuvieron en primer lugar, la PDI pasó de 45% a 53%; Carabineros, de 38% a 46%, y Fuerzas Armadas, de un 36% a un 44%. "Las demás instituciones no cambian significativamente sus niveles de confianza, excepto el Gobierno, que cae su nivel de confianza de un 22% a un 16% en la medición actual", dijo Le Foulon.
Baja evaluación al Presidente
La aprobación al Presidente Gabriel Boric alcanzó un 24% en el actual sondeo, mientras que la desaprobación hacia el Mandatario creció 11 puntos, pasando de 49% a 61%, en línea con lo evidenciado por otros estudios de opinión realizados en los últimos meses. En tanto, el Gobierno como institución cayó en su nivel de confianza, de un 22% a un 16%.
Cabe destacar que este estudio no alcanzó a medir el efecto que provocó el reciente indulto del jefe de Estado a 12 condenados por delitos en el contexto del "estallido social" y un ex frentista; lo que generó duras críticas por parte de personeros de Chile Vamos, así como el "recordatorio" al Mandatario, por parte de la Corte Suprema, respecto de la separación de poderes.
En tanto, la evaluación más destacada del Gabinete presidencial -como ha sido tendencia-, es la del ministro de Hacienda, Mario Marcel, con un 38% de valoración positiva. En quinto lugar, -después del gobernador regional, Claudio Orrego-, aparece la ministra del Interior, Carolina Tohá, con un 34%.
En tanto, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, quedó en el octavo lugar, con un 28% de valoración positiva, compartiendo porcentaje con el ex candidato presidencial, José Antonio Kast.
Cambios en la valoración de la democracia
El análisis también arrojó un cambio estadísticamente significativo respecto a la afirmación "la democracia es preferible a cualquier otra forma de Gobierno", la que registró una caída de un 61% en la medición pasada a un 49% en la actual.
Asimismo, hubo un aumento de las personas que creen que "en algunas circunstancias, un Gobierno autoritario puede ser preferible a uno democrático", pasando de un 13% a un 19%. En tanto, la opción "a la gente como uno le da lo mismo un régimen democrático que uno autoritario", aumentó de un 19% a un 25%.
En cuanto a la evaluación del funcionamiento de la democracia en Chile, hay un leve aumento en quienes creen que ésta funciona "mal o muy mal", que pasa de un 30% a 36%; "regular" pasó de un 53% a 49%; y "bien o muy bien" se mantiene sin alteraciones.
Constitución como prioridad para el 3%
Al ser consultada la población sobre los tres principales problemas que debería abordar el Gobierno, la Constitución aparece entre los tres últimos lugares, con un 3%.
En tanto, también se consultó sobre el proceso del pasado 4 de septiembre de 2022, donde ganó la opción Rechazo, para conocer las razones que tuvieron las personas para sufragar como lo hicieron o por qué fueron a votar.
En los argumentos para elegir la opción que triunfó, el 17% lo atribuyó como primera razón al trabajo realizado por los convencionales, y un 14% como segunda razón. En tanto, un 13% se inclinó por la opción que apuntaba a que se trataba de un tema "que iba generar división entre los chilenos.
Un 8% sostuvo que votó Rechazo por los efectos que tendría para la economía; un 7% por la organización del Estado que se establecía en la propuesta de nueva Constitución; y un 10% de los encuestados que votaron Rechazo lo hicieron, como principal razón, porque creen que Chile no necesita una nueva Carta Magna, mientras que el 5% lo advirtió como su segundo argumento para sufragar de esa forma.
En tanto, con la opción Apruebo, el 18% lo hizo, como primer argumento, por los derechos sociales; un 16% lo hizo "porque la Constitución vigente fue hecha en dictadura"; y un 10% definió como primer argumento para votar Apruebo el hecho de que "iba a mejorar la convivencia y la igualdad".
Asimismo, los derechos de las mujeres fueron destacados como principal tema, para elegir esa alternativa en el Plebiscito, por el 10% de los encuestados; y un 11% tomó como primera razón la organización del Estado.
Sobre cómo cambiaría nuestro país una nueva Constitución, el 37% de los encuestados sostuvo que probablemente ayudaría a resolver los problemas; un 30% dijo que probablemente dejaría las cosas igual; y un 26% que probablemente empeoraría la situación actual.