Este viernes, el Ministerio Público declaró vacante la jefatura de la Unidad Anticorrupción, cargo que hasta ahora estaba siendo ocupado por la abogada Marta Herrera.
La decisión ocurre después de que Herrera se negase a aceptar la renuncia que le fue solicitada por el nuevo fiscal nacional, Ángel Valencia. Una de sus primeras acciones tras ser ratificado por el Senado, fue el diseño de su equipo y la solicitud, a través de la directora ejecutivo subrogante Sandra Díaz, de la renuncia a los 14 jefes de unidades especializadas.
Tras la negativa de Herrera, el pasado martes el fiscal nacional realizó una petición formal de abandonar el cargo, con
un plazo de 48 horas para ser concretado. Lo que no se cumplió, quedando vacante la jefatura de la Unidad Anticorrupción.
El jefe interino de la Unidad de Asesoría Jurídica de la Fiscalía, Roberto Morales, detalló a través de un comunicado que "de acuerdo al contrato suscrito por la señora Marta Herrera y el Ministerio Público el año 2007, la jefatura de la unidad especializada Anticorrupción es un cargo de exclusiva confianza, lo que implica que el Fiscal Nacional puede en cualquier momento y sin expresión de motivo alguno pedir su renuncia".
"La solicitud de renuncia no voluntaria fue notificada a la señora Herrera personalmente el 17 de enero pasado. Dado que la señora Herrera no la presentó en las 48 horas que estipula el marco legal, el Fiscal Nacional decidió hacer uso de sus facultades y declaró vacante la jefatura de la unidad especializada Anticorrupción", la que estará a cargo, temporalmente, de la abogada Claudia Ortega, detallaron a través del texto.
"Debido a que ya fueron presentadas las otras renuncias solicitadas a las jefaturas de unidades apenas el Fiscal Nacional asumió en el cargo, la autoridad resolverá sobre la continuidad de ellas en un futuro próximo. Las peticiones de renuncia guardan
relación con la reestructuración de varias unidades, comprometida por el Fiscal Nacional a fin de mejorar el servicio que esta institución entrega a la comunidad", finaliza el documento.
El quiebre entre Valencia y Herrera ocurrió en el marco del proceso para definir al nuevo fiscal nacional. Esta última fue la segunda candidata del Gobierno -el primero fue José Morales- y fue rechazada por el Senado tras solo obtener 26 votos de los 33 que necesitaba.
Después de recibir luz roja de la Cámara Alta, Herrera causó polémica al criticar el proceso y señalar que Valencia tuvo una comida con personeros ligados a la UDI.
"Entiendo que hubo una comida con el candidato Valencia, con gente vinculada entiendo que al mundo de la UDI. Entiendo, no sé detalles, insisto, que participó Andrés Chadwick, el exministro del Interior, estaba el señor Valencia, no sé de otras personas", indicó.
Antes de ser escogido -fue la tercera opción del Ejecutivo-, el nuevo timonel del Ministerio Público aseveró que la cena fue entre académicos de la Universidad San Sebastián y que efectivamente se realizó en la casa de Chadwick, quien es Decano de la Facultad de Derecho.