"Estamos ayudando a algunos vecinos, porque el fuego, lamentablemente, agarró papa, y el viento cambia en esta temporada de incendios terribles, pero el viento además lo hace además muy peligroso. Felizmente pudieron ver la caravana, también huasos a caballo, bajando de la parte alta de Ninhue al casco urbano (...) vamos a dar el combate para que no se incendie el pueblo".
Esas fueron las palabras del ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, el pasado 9 de febrero desde la Región del Ñuble, una de las tres más azotadas -junto a Biobío y La Araucanía-, por los incendios forestales.
En su rol como ministro de enlace, y en coordinación con le Jefe de Defensa Nacional, le tocó anunciar que toda la zona urbana de Ninhue debía evacuar, por la amenaza de las llamas y por la emanación de gases tóxicos asociados.
Más tarde, a bordo de una camioneta, y mientras ayudaban a evacuar a algunos vecinos, el titular de Agricultura aparecía en un breve video de 45 segundos relatando lo que ocurría en la zona. Con todo, llamó igualmente a la calma y a seguir las instrucciones de los equipos de emergencia.
Pudo ser esa, dentro de la magnitud de la catástrofe, una de las más complejas o, al menos, tensas jornadas que ha tenido que enfrentar la autoridad ministerial, y no son pocas las voces que reconocen su desempeño para moverse en la emergencia. Algunos, incluso, han apuntando a que Valenzuela se ha convertido casi en un "vocero del Gobierno" en medio de la tragedia.
Esa era la sensación al menos hasta el miércoles, antes de que un debate subyacente a la emergencia comenzara a tomar cada vez más fuerza: la "regulación distinta" a la industria forestal. Valenzuela se mostró partidario de la idea e incluso abordó la propuesta de un royalty a la industria. Pero la ministra del Interior, Carolina Tohá, cerró por completo la puerta a esa opción.
Un ministro "con calle"
Fuentes del Gobierno señalan a Emol que el ministro ha tenido un trabajo sistemático en terreno, e incluso "es de los que más está en regiones", todo ello, ya desde antes de los incendios. Eso ha llevado a que muchas de las comunidades que hoy están afectadas ya lo conozcan.
" (El ministro Valenzuela) a veces funciona como el verdadero vocero del Gobierno en medio de la tragedia, y da la sensación de que su ministerio es omnipresente. De hecho, estuvo desde el minuto uno en medio de los incendios".
Mauricio Morales, analista político U. de Talca
Al interior de La Moneda existe la percepción de que su conocimiento y valoración han crecido, puesto que se ha visto asociado a soluciones concretas y trabajo directo en terreno. Por cierto, a nivel central, su despliegue como ministro de enlace ha sido muy bien evaluado. "Ha sido genuino y constante", comentan. "En síntesis se ha pegado un salto y ha sido un aporte en acompañamiento a comunidades y comunicación de riesgo".
El analista político de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, comparte la evaluación. A su juicio, "Valenzuela es el ministro que tiene más calle del gabinete y eso se nota. No tiene problema en salir con su equipo a terreno y está al día en los asuntos de emergencia forestal. A veces funciona como el verdadero vocero del Gobierno en medio de la tragedia, y da la sensación de que su ministerio es omnipresente. De hecho, estuvo desde el minuto uno en medio de los incendios".
Morales plantea además que, "a diferencia de otros ministros que están más acostumbrados al trabajo de oficina, Valenzuela se siente mucho más cómodo resolviendo las urgencias. Probablemente no sea un ministro líder dentro del gabinete, pero con toda seguridad es el que más cerca ha estado de la emergencia".
En efecto, Valenzuela (FRVS), de profesión periodista, cientista político e historiador, partió tempranamente en la vida del servicio público, convirtiéndose a sus 28 años en alcalde de Rancagua, cargo que ocupó entre 1992 y 1996. Además, fue diputado por la región de O'Higgins entre 2002 y 2010; la segunda vez que postuló, obtuvo la primera mayoría. Es, precisamente su otrora rol como alcalde el que le ha dado un espacio más cómodo para moverse en este tipo de situaciones.
Dueño de un estilo directo, a ratos desenfadado, no es extraño escuchar al ministro utilizar chilenismos en sus entrevistas o puntos de prensa. Tampoco ha tenido problemas en señalar que hay "algunos municipios más productivos que otros" -según comentó a Emol al ser consultado por el proceso de evacuación-, o por sus responsabilidades en la mantención de cortafuegos.
El "portazo" de Tohá a un royalty forestal
Pero pese a que en La Moneda está bien evaluado, tal como dijo Morales, "probablemente no sea un ministro líder dentro del gabinete", no sólo porque no forma parte del mismo, sino porque el protagonismo que alcanzó estos días quedó truncado por el "portazo" que le dio la ministra del Interior, Carolina Tohá, a la idea de un royalty para el sector forestal.
Y es que Valenzuela, había sido uno de los pocos que había aterrizado el "pacto" público-privado que el Gobierno ha puesto sobre la mesa como debate, luego que el Presidente Gabriel Boric sostuviera el pasado viernes que había que avanzar en una "regulación distinta de la industria forestal", a propósito de la responsabilidad que algunas voces han atribuido a dicha industria en los incendios, especialmente por las plantaciones monocultivo.
Ante ello, el ministro de Agricultura afirmó esta semana que "tenemos que ir a este pacto del paisaje mixto en que existan incentivos tributarios; en el que podamos pactar con la industria forestal las cuadrículas de caminos forestales que se mejores, que se conviertan en verdaderos cortafuegos eficientes con mantenimiento público-privado". Incluso, adelantó que esperan llegar con algo sobre la mesa "en marzo, para llegar a un acuerdo durante el primer semestre".
La idea, impulsada también por la alcaldesa de Santa Juana, Ana Albornoz, ya se había deslizado por la Federación Regionalista Verde Social (FREVS), mismo partido en que milita el ministro Valenzuela. En conversación con Emol, el secretario de Estado sostuvo que "acá tiene que haber un nuevo trato, y parte de ese nuevo trato es que una parte de la tributación quede en los territorios".
Pero la ministra Tohá desechó ayer la idea. Junto con recalcar que el Gobierno ya tiene una agenda tributaria desplegada en el Parlamento, y que en ella "no está contemplado un royalty a la industria forestal", también argumentó que "la industria forestal no cumple con las características de aquellas actividades que generan royalty. Es decir, no se trata de un recurso natural no renovable y propiedad del Estado", tal como han argumentado desde el sector empresarial, desde donde han sido críticos del planteamiento recogido por el ministro Valenzuela.
Comisión investigadora
La oposición ha criticado el manejo de la emergencia por parte del Gobierno en general, y en ello también apuntan a responsabilidades al ministro Valenzuela. De hecho, la próxima semana un grupo de parlamentarios UDI buscará firmas para impulsar una comisión investigadora para establecer responsabilidades políticas en materia de "prevención, gestión y combate de los incendios".
Según comentó a este medio el
presidente de la comisión de Agricultura de la Cámara, diputado Juan Antonio Coloma, "hemos decidido impulsar una comisión investigadora para analizar los motivos en la demora en la contratación de los aviones de gran escala, sobretodo porque con la experiencia de los grandes incendios de años anteriores, sabíamos que estos debían estar contratados y disponibles con anterioridad".
Según comenta, este aspecto fue advertido en una sesión especial de la comisión de Agricultura, y la respuesta de la cartera de Agricultura fue que "estaban preparados, pero resultó que no era así".
En la misma línea, el diputado Henry Leal agregó que "todos los años, Conaf y el MOP hacían un convenio para hacer cortafuegos en las zonas cercanas a los centros poblados, y en diciembre del año pasado aún no partían con esos trabajos en la Región de La Araucanía. Entonces obviamente no hubo una planificación para impedir muchas cosas".
"Lo que ocurrió en Vilcún, donde se quemaron 150 casas, fue porque al lado no habían cortafuegos, entonces obviamente faltó una falta de anticipación, y se lo dijimos al ministro. Reaccionaron una vez que habían ocurrido los siniestros", cerró.
