La salida de
Antonia Urrejola del cargo de ministra de Relaciones Exteriores (RR.EE.), traería aparejada una cirugía mayor en la Cancillería, cartera que durante este casi año de gobierno estuvo marcada por más de un impasse y varias polémicas.
Algunas de ellas involucraron directamente a la Canciller, otras a los subsecretarios, a los embajadores o incluso al propio Presidente Gabriel Boric.
De hecho, el Mandatario optó por descabezar el ministerio: José Miguel Ahumada, resistido por muchos entendidos de las relaciones internacionales, dejó su cargo en la subsecretaria de Relaciones internacionales siendo reemplazado por Claudia Sanhueza (que dejó el mismo cargo en Hacienda).
También salió la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Ximena Fuentes, quien fue reemplazada por Gloria de la Fuente.
La lista de errores es larga, dicen, pero sin duda hay algunos episodios más llamativos que otros. Uno de los primeros se vivió en pasado 11 de marzo de 2022, durante la ceremonia de cambio de mando que partió con retraso y el cual el Mandatario culpó al Rey de España Felipe VI. Esto le valió una respuesta de la Casa Real de España, desde donde aseguraron que el monarca siguió instrucciones del protocolo y la seguridad chilena.
Otro tema que causó revuelo fue la propuesta del subsecretario Ahumada de realizar una consulta ciudadana para "legitimar" la política de los tratados de libre comercio. Algo que fue desestimado por el ministro de Hacienda, Mario Marcel.
Durante su gira a Estados Unidos, el Presidente Boric sufrió un incómodo traspié cuando durante su participación en el lanzamiento de la Coalición por los Océanos, en la Cumbre de las Américas, criticpo la la ausencia de Estados Unidos, sin percatarse que el país sí estaba representado en la misma mesa por el enviado especial para asuntos climáticos John Kerry. Algo que tuvo que rectificar tras recibir un improvisado papel que le entregó su asesor Carlos Figueroa,
Otro tema que causó interés fue el largo tiempo que Sebastián Depolo, tuvo que esperar el agreement de Brasil para asumir como embajador de Chile en ese país y el cual solo se le concedió hace poco, tras la llegada a la Presidencia de Luiz Inácio Lula da Silva.
También fue polémico al fallido designación de Andreas Pierotic como embajador de Chile en China, pese a que Beijing ya había dado el agreement y Cancillería había comprado los pasajes. Sin embargo, se desistió por denuncias de maltrato laboral en su contra.
Pese a la experiencia que Chile ha tenido en materia de defensa ante La Haya, el Gobierno desistió de nominar como candidato al Tribunal a Claudio Grossman, apostando a la candidatura de Chile ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Otro impasse diplomático se vivió luego de que el Mandatario rechazara recibir las cartas credenciales del embajador de Israel en Chile, Gil Artzyeli. Esto se habría debido al rechazo del Ejecutivo a la muerte de un adolescente palestino, durante un operativo israelí en Cisjordania.
No ha sido la única polémica que ha protagonizado, pero sin duda causaron revuelvo los dichos del embajador de Chile en España, Javier Velasco, quien en un foro expuso una visión crítica sobre los últimos "30 años" a los que atribuyó el estallido social, pues se profundizó la desigualdad.
La ratificación del TPP-11 en octubre pasado por parte del Senado no fue el último paso que tuvo que cumplir el tratado, pues el Gobierno puso en marcha la estrategia de las side lettersm, previo a depositar el tratado.
Sin duda una de los episodios más importantes y que gatilló la salida de Urrejola fue la filtración de un audio con una conversación privada -incluso con groserías- entre la entonces canciller y parte de sus asesores, en el que se debate la respuesta a las críticas del embajador de Argentina en nuestro país, Rafael Bielsa, al rechazo del proyecto minero Dominga.
Los desafíos por delante
Aunque primero se había hablado de Marta Maurás para el puesto, finalmente el Mandatario designó a Alberto van Klaveren como nuevo canciller.
Al respecto, el ex ministro de la cartera Heraldo Muñoz, resaltó que "la política exterior estará en manos seguras con Alberto Van Klaveren. Es un nombramiento óptimo".
Sobre los desafíos que tendrá que enfrentar el nuevo secretaria de Estado, lo principal será afinar la relación con los países vecinos, con los cuales durante la gestión de Urrejola surgieron diversas complicaciones y desavenencias.
En el caso de Argentina, pese a la cercanía que existe entre Boric y el Presidente trasandino, Alberto Fernández, es evidente la necesidad de superar las desconfianzas que pudo generar el episodio de la filtración del audio por parte de la Cancillería.
En paralelo, en Teatinos 180 deben poner mayor atención a los movimientos del país vecino respecto de la plataforma continental antártica, asunto que, a juzgar por las conversaciones dadas a conocer en enero, no se le ha tomado un peso suficiente.
En cuanto a Bolivia, será urgente intensificar el diálogo con el gobierno de Luis Arce para mejorar la custodia de la frontera común, con miras a disminuir el tráfico ilegal de migrantes y las operaciones de contrabando que persisten en la macrozona norte.
Si bien en el periodo de Urrejola se reactivaron las reuniones por la hoja de ruta de 2021, y que incluye estos temas, en el Gobierno reconocen que los esfuerzos hasta ahora han sido insuficientes para lograr el apoyo de La Paz en materia de seguridad.
Un asunto distinto es lo que ocurre en Perú, en donde las relaciones con el gobierno de Dina Boluarte están en mal pie, luego de las críticas que realizó el Presidente a las violaciones a los DD.HH. ocurridas durante las protestas en ese país.
En este caso, será clave el enfoque que le dará el nuevo canciller a este asunto y la estrategia que aplicará el Ejecutivo, teniendo en cuenta que la crisis política y social en la nación vecina aún no ha encontrado una salida.
En términos más generales en la región, será importante un relanzamiento de las relaciones bilaterales con Brasil y mejorar los nexos con Lula da Silva. Asimismo, debiera mantener la bandera de los DD.HH. que Boric levantó por Nicaragua.
Respecto a las potencias, la nueva ministra deberá organizar dos giras importantes para Boric. Una es acoger la invitación de Xi Jinping a China y la Cumbre APEC, que este año será en San Francisco, Estados Unidos.
También hay visitas comprometidas a Europa, para mediados de año a España y Francia, sin perjuicio de que se pueda sumar una nueva parada. El desafío será llevar a la práctica la modernización del Acuerdo de Asociación con la UE.
Asimismo, tendrá que seguir promoviendo la política exterior feminista y turquesa, con foco en la protección de los océanos y el cambio climático, y poner atención a la conmemoración de los 50 años del Golpe, entre otras tareas.