El Segundo Tribunal Oral en lo Penal de Santiago leyó hoy el veredicto condenatorio en contra de Felipe Rojas, sentenciándolo a presidio perpetuo calificado por el asesinato de Fernanda Maciel ocurrido en 2018.
La pena para Rojas era la solicitada por la Fiscalía Centro Norte y se trata de la más alta que existe en la legislación chilena. Implica al menos 40 años de cárcel antes de poder acceder a algún beneficio.
"Tratándose de este caso concreto, el tribunal ha considerado que los acusadores tienen razón en orden a que, mediante una compensación racional, lo que corresponde es aplicar la pena de presidio perpetuo calificado, conforme al Artículo 75 del Código Penal. Es decir, la pena mayor correspondiente al delito más grave, que es el de violación con homicidio", narró el juez Eduardo Gallardo.
Rojas era el único imputado por el asesinato de Fernanda Maciel, quien desapareció cuando tenía 21 años y se encontraba con un embarazo de 7 meses.
En junio de 2020 fueron hallados sus restos al interior de una bodega en Conchalí, inmueble donde trabajaba Rojas.
Por lo anterior, el imputado fue acusado por los delitos de violación con homicidio, aborto, inhumación ilegal y hurto. En los dos primeros, el resultado fue condenatorio, ahora bien en el caso de los dos últimos, el tribunal los desestimó.
Poco antes de la sentencia, el acusado hizo uso de su derecho a declarar y señaló que "sé que no existe forma de reparar el daño causado a la familia de ella. Me disculpo públicamente por todo lo que han tenido que pasar".
Consultada por sus dichos, Paola Correa, madre de la víctima, aseveró que Rojas "es un desgraciado, ni siquiera él se cree lo que dijo, no se refirió a mi hija por su nombre. Es una persona cero empática, yo creo que no está arrepentido, ¿por qué creerle ahora?".