Los resultados del Simce 2022 mostraron una baja general de los resultados en todas las pruebas y grupos socioeconómicos, lo que se atribuye en gran medida a las clases remotas que en Chile se extendieron por un tiempo prolongado durante la pandemia.
Sin embargo, esta modalidad de enseñanza no habría impactado de la misma forma en Matemáticas y Lectura, ni a hombres y mujeres.
En efecto, la disminución del puntaje en Lectura fue de 4 y 6 puntos (en 4° básico y II medio, respectivamente). Mientras que en Matemáticas la caída fue el doble: llegando a 10 y 12 puntos en ambos niveles.
¿Cómo se explica esta diferencia? Según señala Gino Cortez, secretario ejecutivo de la Agencia de Calidad de Educación –entidad que entrega los resultados–, esto podría deberse a que "la lectura es una habilidad más fácil de adquirir en ambientes y contextos familiares", que es donde más estuvieron los estudiantes durante la pandemia.
Pero en matemáticas sería distinto: "En el caso de matemáticas no podemos afirmar lo mismo, dado que se requieren de ciertos conocimientos más específicos. Por ejemplo, en fracciones, geometría, divisiones, multiplicaciones, se requiere de un cierto nivel de conocimiento", explica.
Dice que "ésta es una tendencia que también se ha visto a nivel mundial" y subraya que "de lo que nos hablan estos resultados es de la importancia del aula para el aprendizaje de matemáticas. No es lo mismo no asistir a la escuela para aprender matemáticas. Por eso el llamado es que asistan a clases". "Aquí todos los grupos socioeconómicos bajan, unos más que otros, pero se ve el efecto del aula en el aprendizaje", afirma.
En el caso de Lectura en II medio, en la última década se viene registrando una caída menos abrupta, pero constante. Al respecto, el secretario ejecutivo de la Agencia de Calidad comenta que "desde hace bastantes años, hemos tratado de entender por qué los estudiantes están teniendo estas dificultades en aprendizaje", señalando que "se ha atribuido fuertemente al uso de la tecnología y a la disminución de los niveles de concentración en la comprensión de los textos más complejos", ya que el tiempo de concentración es más breve.
"Lo que hemos visto –según las respuestas y los distintos niveles de dificultad de las preguntas que vienen en el Simce– es que logran mayor atención en textos que son más cortos", apunta.
Afirma que "esto no quiere decir que no debamos promover el uso de la tecnología", sino que más bien se haga una distinción entre su uso doméstico y su uso pedagógico, promoviendo este último.
Niñas más sobrecargadas con labores domésticas estando en casa
Las clases remotas también afectaron en mayor medida a las mujeres que a los hombres, sobre todo en matemáticas, a tal punto, que volvió a aparecer la brecha de género que ya se había logrado superar en la última medición –en 2018–.
Así, en 4° básico, mientras los hombres bajaron 7 puntos, la caída en las mujeres fue de 13 puntos. Y en II medio, los varones disminuyeron su rendimiento en 11 puntos y las mujeres en 14 puntos. En Lectura, en tanto, las mujeres también bajaron su puntaje más que los hombres, por lo que la diferencia que había, esta vez a favor de las mujeres, también se estrechó. ¿Por qué?
Una hipótesis, que menciona el secretario ejecutivo de la Agencia, es que "distintos estudios que se han hecho han mostrado que esto se condice con los resultados internacionales y los efectos de la pandemia, a propósito del trabajo doméstico que muchas niñas cumplieran durante la pandemia". "Estoy haciendo esta relación con otros estudios, no son resultados que entregue el Simce, pero es un llamado a mirar estos resultados con esa evidencia sobre la mesa", afirma.
La académica de la Facultad de Educación de la Universidad de los Andes, Carolina Melo, coincide con esta apreciación: "Al parecer, la pandemia afectó más a las niñas que a los niños y esto está empezando a ser consistente a través de las diferentes evidencias que vamos consiguiendo. No es clara la razón, pero sí es posible pensar que las niñas hayan sido más recargada con trabajo doméstico que los niños", afirma.
Otro antecedente a tener en cuenta es que los indicadores de desarrollo personal y social –que se miden en un cuestionario que se realiza en el mismo Simce– muestran que la "autoestima académica" (cuán capaces se sienten los estudiantes de aprender las diferentes asignaturas) es menor en las mujeres cuando se trata de matemáticas.
"Cuando en autoestima académica preguntamos sobre autopercepción y autovaloración académica, frente a la afirmación de si me siento capaz de aprender matemáticas, nuestros estudiantes presentan, 2017 y 2022, una disminución significativa en el puntaje de percepción. Es decir, hoy día son menos los niños y niñas que perciben sentirse capaces para aprender matemáticas. Y hay más mujeres que se sienten menos capaces para aprender matemáticas que hombres en ambos niveles, pero principalmente en la educación media", señala Cortez.