Sebastián Dávalos, hijo de la ex presidenta Michelle Bachelet y uno de los protagonistas de lo que fue conocido como el Caso Caval, hoy reside en España y, a ocho años de dicha polémica y tras haber sido absuelto en todas las aristas, analiza las comparaciones que se han hecho en los últimos días entre esa crisis y la que atraviesa el actual Gobierno con el llamado Caso Convenios. Al respecto, asegura que "
por donde lo veas es peor: es peor respecto de la fe pública, de lo que podría eventualmente haber y de la caja de Pandora que se puede abrir en esto". Es así como, en retrospectiva, señala que no cree que Caval haya marcado un antes y un después en el segundo gobierno de su madre, ya que, a su juicio, "si miras, SQM le pegó mucho más y mucho más transversalmente a la coalición completa, no solo al gobierno. Había políticos, había ministros... recuerdo uno que duró muy poco en el cargo porque tenía boletas o había trabajado para alguien. No era nada ilegal, pero se veía feo".