La bancada de Evópoli de la Cámara de Diputados está compuesta por dos militantes y dos independientes: Jorge Guzmán, Francisco Undurraga, Christian Matheson y Hotuiti Teao, respectivamente.
A horas de que se vote la acusación constitucional contra el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, en el hemiciclo de la Cámara Baja, la bancada no tendría una postura única y algunos de sus integrantes podrían rechazar el líbelo acusatorio, descolgándose de la postura de Chile Vamos.
Undurraga y Guzmán estarían por rechazar la acusación, excepto el capítulo que se refiere a la Junaeb, el cual aún estarían estudiando. Mientras que Teao estaría en reflexión y Matheson apuntaría a aprobarla.
Estos votos en contra podrían marcar el futuro de la acusación, considerando que la votación sería muy reñida.
"Estamos convencidos de que el ministro de Educación lo ha hecho mal y que le ha hecho un mal a la educación de Chile (…) pero la mala gestión del ministro no es sustento suficiente para acusarlo, tenemos que irnos al mérito de la acusación", señaló el diputado Guzmán.
"Cuando uno la revisa hay antecedentes de la agenda del Gobierno, cuando el Gobierno se propuso asumir la presidencia del país le propuso a Chile una agenda en materia educacional, que podemos criticarla o no estar de acuerdo, pero no es sustento suficiente", agregó.
Sobre la defensa que ha desplegado el Ejecutivo, argumentando que la acusación constitucional está basada en la homofobia, el diputado señaló que "esas declaraciones le hacen daño a un instrumento jurídico, tanto a aquellos que acusan como que defienden. No compartimos la declaraciones de la ministra Vallejo y tampoco a los que han venido a exponer a la comisión en ese sentido".
Por su parte, Francisco Undurraga, planteó que "nosotros nos debemos a la seriedad, hemos criticado profundamente todas las acusaciones constitucionales en el Gobierno anterior, las votamos en contra y no participamos en la acusación contra la ex ministra Siches y apoyamos la de la ministra Ríos, pero tenemos que actuar en coherencia, esto no puede ser un ajusticiamiento político a cualquier persona”.