En menos de 48 horas el Presidente Gabriel Boric empleó dos tonos para referirse a la oposición. En la presentación del pacto fiscal, el Mandatario reiteró el llamado a zanjar acuerdos por el bienestar del país, mientras que al día siguiente, acusó a la derecha de retroceder en los consensos que se han instalando sobre
"la valoración irrestricta de la democracia y por ende, la no justificación de un golpe de Estado".
La "derecha política ha ido retrocediendo", adujo el Mandatario, aludiendo a la reivindicación del Golpe que ha manifestado el diputado de la UDI, Jorge Alessandri. En la misma alocución, el Presidente sacó a colación a Republicanos, por la intención que reconoció su timonel, Arturo Squella, de derogar el aborto en tres causales cuando la colectividad sea mayoría en el Congreso.
"Quiero decirles que frente a eso van a encontrar no solamente partidos políticos e instituciones, sino también un pueblo firme para decir que no", aseveró Boric, a lo que Squella respondió emplazando al Mandatario a que "ocupe su tiempo para enfrentar el terrorismo en Traiguén o para frenar el desfonde al país que están haciendo funcionarios de su exclusiva confianza".
La arremetida no solo hizo eco en la tienda política de José Antonio Kast, sino también en las huestes de Chile Vamos. El jefe de bancada de diputados RN, Frank Sauerbaum, dijo a Emol que ""no se puede pasar del diálogo, de la convocatoria al diálogo, al enfrentamiento que el Presidente nos propone día por medio. Es una relación bien bipolar".
En esa línea, apuntó que el "Presidente tiene que decidir si va a dialogar, si va a conversar, si se va a entender, o simplemente va a estar siempre la pelea chica en la discusión o en el emplazamiento a la oposición".
"Nosotros hemos demostrado interés en dialogar respecto a algunos temas. Yo creo que él debiera aprovechar esas instancias que nosotros estamos dispuestos a acceder, pero si estamos con permanentes ofensas y hay un emplazamiento a través de la prensa, el diálogo se hace muy difícil", añadió.
A su vez, el subjefe de bancada de diputados Evópoli, Jorge Guzmán, consideró que "es incomprensible e incoherente las declaraciones y las acciones del Presidente Boric, que un día convoca a la oposición a construir acuerdos transversales en beneficio del país y al día siguiente sale a criticar y a atacar a aquellos que está convocando a dialogar".
"Presidente: Póngase de acuerdo con usted mismo, sea coherente. De lo contrario, no va a poder construir ni un acuerdo que sea en beneficio del país", exhortó.
En el Ejecutivo, fue el ministro de la Segpres, Álvaro Elizalde, quien abordó esta mañana el cambio de tono del Mandatario.
"Yo creo que el Presidente da cuenta de convicciones democráticas profundas y ha habido una cierta involución en los sectores conservadores de la sociedad chilena que han vuelto a justificar hechos que son a todas luces injustificables", ratificó en radio Concierto.
Precisando ese punto, indicó que "hay declaraciones públicas. Un diputado señaló que con orgullo apoyaba el golpe de Estado, basta con ver lo que ocurre en el debate cotidiano en la Cámara de Diputados, como quienes reivindican, insisto, atentados a la democracia y eso sin duda que es una involución triste y preocupante".
Duval: Boric "se encuentra en una posición debilidad"
Aquilatando la situación, el analista político y académico de la Universidad Autónoma, Tomás Duval, consideró "que el cambio de tono del presidente Boric con la oposición demuestra que este se encuentra en una posición debilidad del Gobierno en su conjunto y la forma de salir de esa posición es intentar colocar la idea de que otros son el problema y por cierto no el Gobierno".
"Un punto complementario es que esta acción podría traer consigo la unidad de las fuerzas políticas que forman las dos coaliciones del Gobierno, evitando las fisuras que se aprecian hasta el momento", agregó, apuntando que una "quizás una consecuencia de ello serán las dificultades si quiere llegar acuerdos en ciertas políticas con la oposición, ya tuvo un fracaso con el impulso de la reforma tributaria, y ahora un pacto fiscal en evolución por el momento".
