El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, quien ha sido una suerte de vocero del Ejecutivo en el caso convenios, se refirió en duros términos a los funcionarios públicos y autoridades que han realizado aprovechamiento para obtener recursos del Estado.
En entrevista con Reportajes de "El Mercurio", el secretario de Estado sostuvo que "quienes estamos en una posición de autoridad estamos para servir y no para servirse. Y quien pretenda aprovecharse u obtener ventajas o privilegios distintos a su función tiene que abandonar el Estado. Y esto vale desde el seremi hasta el ministro de Estado".
"Aquí en todos los que han incurrido en irregularidades se hará efectiva su responsabilidad. En esto no hay eufemismos. Ocupar la palabra corrupción por parte del Gobierno para referirse a una situación no es fácil, pero tiene que ver con la convicción genuina de que este tipo de cosas no pueden suceder", afirmó.
Con todo, sostuvo que "es clave para la confianza pública la reforma estructural del sistema; este tema no se soluciona solo con renuncia de autoridades. Lo que necesitamos es reformar el sistema, porque si hay algo para lo cual sirven estas crisis es para tener conciencia de cuáles son las medidas correctas, pero sobre todo para establecer los estándares de cumplimiento que van más allá de la ley".
En ese sentido, apuntó que se requieren "exigencias más estrictas" en materia de transferencias, y también advirtió que "desde la reforma del 2011 en materia de personas jurídicas, tenemos demasiada facilidad para la constitución de estas entidades sin fines de lucro, que adquieren para cumplir fines de beneficencia, pero no para que puedan desarrollarse como verdaderas gestoras de proyectos o consultoras". "Lo que creo que pudo pasar es una libertad para constituir esas entidades, una flexibilidad extrema para transferir recursos, y, algunas personas terminaron aprovechándose", señaló.
"Tiene mucha razón" y "basta de frases"
Las declaraciones del ministro generaron distintas reacciones principalmente en la oposición, desde donde pidieron terminar con las frases y pasar a la acción, reforzando los llamados a que salgan algunos ministros del gabinete.
"Basta de discursos, basta de frases preparadas y más acciones concretas; hasta el momento no vemos que exista en el gabinete del Presidente Boric alguien que se haga responsable políticamente de la corrupción que día a día siguen ensuciando la gestión de su Gobierno y afectando al país (...) La gravedad de los casos de corrupción y malversación de recursos públicos exige que los ministros involucrados sean removidos de sus cargos. Hasta el momento, los ministros transitan con total impunidad y eso genera indignación", sostuvo el diputado Jorge Guzmán (Evópoli).
En tanto, el diputado Cristián Araya, del Partido Republicano, afirmó que "no hay mucho margen para dobles interpretaciones, las palabras del ministro Cordero van directo al mentón de los cuestionados ministro Jackson y Montes. Resulta insostenible la permanencia de ambos en el gabinete, especialmente del ministro Jackson, porque está dañando la poca credibilidad que aún mantiene el Gobierno". "Lo único que sostiene a Jackson en el gabinete es su íntima amistad con el Presidente, impresentable", agregó.
Por su parte, Frank Sauerbaum, jefe de bancada de los diputados RN, comentó que "el ministro Cordero tiene mucha razón. Los que venimos al sector público, venimos a servir a los chilenos y ése es un honor. Y hay que enseñarles a los niñitos que venían a gobernar economía, administración, finanzas, derechos, pero también los diez mandamientos. No robar, no mentir. Y con eso era suficiente para que tuvieran un rol decente en la administración del Estado. Pero aquí se ha ya develado una maquinaria para defraudar al fisco".
"Yo lamento mucho que la nueva generación del Frente Amplio haya terminado siendo una decepción para todos los chilenos que esperaban que esta nueva generación no tuviera las mañas que tanto criticaron y que llegaron prometiendo se iban a ver superadas por su rol moral y ético muy superior al resto", apuntó.
Para el diputado Felipe Donoso (UDI), "lo que esconde esa frase (del ministro de Justicia) es que no hubo la capacidad de buscar gente honesta para integrar el Estado". "No puede ser que autoridades de confianza designadas por el Presidente en pocos meses instalen un esquema de corrupción. Eso es falta de criterio y de ética en la búsqueda de personas para servir en el Estado. Esa responsabilidad es política y tienen que asumir las personas que los propusieron, quienes los promovieron, quienes los invitaron a participar del Estado", subrayó.
A su juicio, "no podemos echarle la culpa al sistema, porque el sistema es insuficiente cuando las personas no tienen la moral, no tienen la capacidad de distinguir qué es lo que corresponde y qué es lo que no. Cuando hay corrupción, la persona va a ser capaz de corromper el sistema que instauremos. No podemos instaurar sistemas para que las autoridades de confianza nos roben. Lo que tenemos que hacer es que las autoridades de confianza sean respetables y sean honestas".