"No le corresponde al presidente estar amenazando a los chilenos de que los va a perseguir", fue lo dicho este domingo por Sebastián Piñera respecto a la advertencia que levantó Gabriel Boric en su contra durante un debate en 2021 acusando violaciones a los Derechos Humanos en el contexto de las manifestaciones de finales de 2019.
"Se lo dije personalmente al presidente Boric, no le corresponde. En Chile tenemos separación de poder. El presidente lidera el poder Ejecutivo, los que tienen que ver con los temas de justicia es el poder judicial, y por lo tanto, yo lo atribuyo al calor de la campaña", sostuvo Piñera a Mesa Central de T13.
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Un presidente no puede andar amenazando a sus ciudadanos. Eso no es democracia. Los dictadores amenazan como ocurre en Venezuela, en Nicaragua y en Cuba", agregó.
En cuanto al estallido social de 2019, afirmó que la izquierda "cometió errores garrafales" y "validó la violencia, la justificó, la amparó, la homenajeó y en cierta manera, la promovió", desprotegiendo la democracia.
Respecto a las acusaciones hacia su gobierno por presuntas violaciones a los Derechos Humanos durante estallido social, sostuvo que "una cosa es una violación sistemática a los Derechos Humanos, como ocurrió en tiempos pasados, y otra cosa es lo que pasó el 18 de octubre, una explosión de violencia irracional, destructiva que no respetaba a nada ni a nadie" y agregó que "no sé si la democracia hubiera sobrevivido si no hubiéramos llamado a un acuerdo constitucional en noviembre de 2019".
En la instancia, Piñera también se refirió a los 50 años del Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, responsabilizando a distintos actores de la época en la generación de las condiciones que llevaron a los militares, encabezados por Augusto Pinochet, a tomar el poder por las armas.
Además manifestó que "todos pudimos y debimos haber hecho más para evitar esa barbarie de los atropellos sistemáticos a los derechos humanos: la Corte Suprema, los medios de comunicación, los civiles con poder y todos los chilenos", precisando que "la violencia no es compatible con un sistema democrático".
Agregó que "el año 73 fue una derrota de la democracia, pero también fue una derrota de toda una generación de políticos que no supo o no pudo defender la democracia".
Consultado sobre las causas del Golpe, respondió que la conducción política del país de la coalición de gobierno había sido la principal responsable de los hechos ocurridos la mañana del 11 de septiembre.
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La principal responsabilidad es del gobierno de la Unidad Popular, que con una minoría quiso imponer un modelo de una sociedad marxista", afirmó. "El 11 de septiembre se derrumba la democracia, pero no fue una muerte súbita y sorpresiva. Fue triste, tal vez evitable de una secuencia de hechos", subrayó el exjefe de Estado.
Sin embargo, recalcó que "muy temprano me transformé en un opositor al gobierno militar por los brutales atropellos a los derechos humanos. A mí me duelen mucho las restricciones a la libertad y una dictadura atenta contra la libertad", recalcó Piñera, quien además calificó el bombardeo del palacio de La Moneda como un “error inaceptable".
Consultado sobre el futuro político del país, Piñera se mostró partidario de generar una coalición amplia de centro derecha, porque en su opinión es lo que necesita el país para salir de la crisis de seguridad y empleo en la que se encuentra. "Hoy se requiere una gran alianza de centro derecha, que permita no solo ser una buena oposición, sino que ser un buen gobierno en dos años y medio más", afirmó. "Para volver a recuperar el rumbo y el ritmo, vamos a requerir cambios muy profundos y para eso, se necesita una coalición de centro derecha que le de fuerza y estabilidad, como lo fue la Concertación para la vuelta a la democracia", agregó el exmandatario.
Piñera destacó, al mismo tiempo, el triunfo del Partido Republicano en el Consejo Constitucional, por lo que espera que estén "conscientes de su responsabilidad con Chile y que no se caigan en extremar ciertas cosas para sacar pequeñas ventajas".
