"Teillier murió como un hombre digno (...) hay otros que mueren de manera cobarde para no enfrentar a la justicia". Esa fue la frase que el Presidente Gabriel Boric, pronunció ayer en el velorio del ex timonel del PC Guillermo Teillier, generando una serie de reacciones, muchas de ellas críticas de la oposición.
Es que las palabras del Mandatario tensionaron el ambiente político, a pocos días del aniversario por los 50 años del Golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973. Fecha que el Gobierno busca conmemorar con una serie de actividades.
Los dichos del Presidente fueron interpretados por algunos como una alusión a un hecho ocurrido el mismo día, cuando se dio a conocer que el general en retiro del Ejército, Hernán Chacón Soto, condenado el lunes por el crimen de Víctor Jara, se suicidó con un disparo cuando la PDI llegó a su domicilio para notificarlo.
En ese contexto, son varios los personeros que han comentado sus declaraciones, por ejemplo, el ministro de Justicia, Luis Cordero, comentó hoy a Radio Cooperativa que "creo que el Presidente reveló en eso probablemente la impotencia de muchos familiares de las víctimas, que después de muchos años obtienen sentencia y se producen circunstancias como esta. Yo entiendo esas declaraciones en ese contexto".
Por su parte, la diputada del Partido Comunista (PC), Karol Cariola, respaldó las palabras de Boric, indicando a Tele13 Radio que "lo que él plantea en esa frase me hace mucho sentido a propósito que en nuestro país la impunidad ha sido un manto real. El manto de impunidad ha sido una cuestión real durante mucho tiempo, donde lamentablemente hay personas que cometieron crímenes de lesa humanidad en Chile, fueron cómplices activos de la dictadura militar, fueron asesinos, violadores de derechos humanos (...) que están en total impunidad".
En tanto, el ex ministro Sergio Bitar planteó en EmolTV que "el Presidente cuando dice eso, dice claro, gente que mató, ocultó, trató de que no lo condenaran, cuando lo condenan van y se pegan un balazo, está bien. Es una opinión que él tiene, pero hay un problema de humanidad también, yo creo que esa persona debe haber sufrido mucho en su vida. Porque se sentía perseguido, porque la consciencia te destruye a ti mismo si tú sabes que estás cometiendo un crimen y no lo dices y que los demás te dicen no lo digas, porque nos pescan a los demás. Fue muy trágico, todo eso es muy doloroso. Entonces yo no entiendo por qué no podemos ponernos de acuerdo en decir nunca más un golpe militar".
En el mismo medio, el ex ministro de Salud Enrique Paris, expresó que "yo creo que lo que hizo el Presidente Boric con esa frase desafortunada es muy negativo para la salud mental de los chilenos y de mucha gente que está con depresión, que está con problemas", agregando que "con esa frase el destruye y hace poco creíble su convencimiento de que está preocupado de la salud mental de las personas".
Las críticas más duras fueron de la oposición, por ejemplo, el ex presidenciable del Partido Republicano, José Antonio Kast, dijo que "yo creo que alguien que abusa del poder, alguien que utiliza una tribuna para denostar a alguien, es un cobarde, él es un cobarde. Y la misma cobardía tuvo cuando se rio de Jaime Guzmán usando una polera, con su rostro asesinado, riéndose de ese asesinato. La misma cobardía tuvo cuando se reunió en privado, sin decirle a nadie, con unos asesinos de Jaime Guzmán. Y así lo ha repetido en distintas ocasiones".
"Las últimas declaraciones del Presidente Boric no ayudan, porque pareciera que está con un espejo retrovisor respecto a los últimos 50 años, generando una apología de la división. Tenemos que construir un mensaje colectivo para el futuro. Nadie puede dudar de las credenciales democráticas ni de la voluntad de diálogo de Chile Vamos, pero las declaraciones del Presidente Boric vuelven a situar el escenario en un clima que genera una apología del desencuentro. Llamamos al Presidente a terminar con esa apología del desencuentro", sostuvo el timonel de RN, Francisco Chahuán.
Ayer, en tanto, el líder de la UDI, Javier Macaya, expresó que el "usar la muerte de una persona para hacer apología de la división, al mismo tiempo ofender a miles de familias que han perdido a un ser querido a causa del suicidio, no es la forma de trabajar la unidad del país (...) No está a la altura de la investidura del cargo, me parece que es algo que contribuye poco en los 50 años en todo el discurso de que tenemos que haber aprendido alguna lección en este tiempo".