Obras en el Hospital de Ancud.
El Mercurio
Calzadas a medio terminar, barreras y otros materiales de construcción dispersos en el sector, incluso una máquina estacionada a un costado del camino en construcción, es lo que quedó de las obras para indispensables accesos viales y a servicios básicos -redes de agua potable, alcantarillado y electricidad- del nuevo Hospital de Ancud, tras el abandono de faenas de la constructora San Felipe. Esta empresa se había adjudicado los trabajos por cerca de $6 mil millones, los que están abandonados hace más de 15 días. En tanto, la construcción del edificio del hospital (tiene un 90% de avance), adjudicado a Besalco el 26 de enero de 2018, debió estar terminada el primer trimestre de 2021. Esta recurrió el 31 de enero pasado a la Contraloría, porque a esa fecha ya había financiado 711 días de mayores gastos generales a raíz de los retrasos atribuidos al mandante (Ministerio de Obras Públicas). El edificio no puede ser puesto en marcha por la falta de accesibilidad y la Contraloría obliga a que los pagos a la constructora se inicien una vez que esté la obra terminada, precisa Francisco Mutizabal, integrante de la Agrupación de Amigos del Hospital, quien afirmó que "es tremendamente preocupante este nuevo retraso, además por las multas millonarias que tiene que pagar el Estado por cada día de retraso, cerca de $12,9 millones diarios", remarca. Mutizabal lamentó la falta de planificación y descoordinación de los servicios públicos, que deja el hospital en esta condición, "porque una cosa es el incumplimiento de San Felipe, pero desde el 2015 habíamos pedido al Ministerio de Obras Públicas (MOP) que pusieran en el presupuesto de 2016 la pavimentación del camino Caicumeo- Caracoles, para darle acceso al hospital, pero no se hizo. Una vez más el Estado planifica mal, sin coordinación".