El presidente de la UDI, Javier Macaya, criticó duramente el veto que ingresó el Gobierno este viernes a la Ley de Usurpaciones aprobada por el Congreso, y calificó a esa herramienta como una "de las intervenciones más delicadas a la deliberación democrática que hace el Parlamento".
"El Parlamento, por una mayoría importante, aprobó la Ley de Usurpaciones; que busca una solución para un problema que en la Macrozona Sur es un dolor gigantesco. Y acá el Gobierno está tratando de hacer un juego bien alambicado y complejo para dar vuelta a esa decisión democrática (...) (El veto) es legal, es legítimo, es constitucional, pero vulnera una decisión mayoritariamente acordada por el Congreso", sostuvo Macaya, en entrevista con Mesa Central de Tele13.
El parlamentario sostuvo que esta ley "básicamente lo que establece es la figura de poder intervenir y responder rápidamente ante usurpaciones" y que, con el veto, "el Gobierno lo que está haciendo es ponerse del lado de los usurpadores".
Uno de los puntos que criticó del veto es la clasificación que haría "entre usurpaciones violentas y pacíficas". "Yo le pregunto a la ciudadanía si ellos piensan que alguna vez alguna usurpación, alguna toma de un terreno, más allá de que se haga sin violencia, ¿puede ser calificada de pacífica? Eso es lo que está sosteniendo el Gobierno, que la vulneración del derecho de propiedad puede ser calificada de pacífica. A mí eso no me parece. Creemos que está cometiendo un error y poniendo en riesgo una ley importante".
Macaya argumentó que "esta calificación de pacífica de ciertas usurpaciones hace imposible no solamente la posibilidad de la legítima defensa privilegiada, sino que sobre todo –y éste es el punto central– que los tribunales de justicia puedan determinar si una persona que comete un delito de esa magnitud sea o no privado de libertad". Es decir, que queda "a criterio del juez" la decisión de decretar o no la prisión en el caso de las tomas no violentas, "y lo que nosotros estábamos empujando, lo que venía en el proyecto aprobado, es que siempre tenía que aplicarse una pena privativa de libertad; o sea, obligar al juez, no dejarlo a la posibilidad de que él se pueda mover entre aplicar o no una pena privativa de libertad".
Los escenarios que analizan frente al veto
El senador comentó que "el Gobierno ha tratado de conversar con la oposición, pero no ha habido ningún consenso respecto al veto que se está ingresando".
Respecto de los posibles escenarios ante el veto y el destino de la ley de usurpaciones, señaló que están analizando distintas opciones. Una ventana que se abre es más bien técnica, y tiene que ver con que el presidente del Senado, Juan Antonio Coloma (UDI), podría recalificar el veto y en vez de "sustitutivo" –que reemplaza un texto– pase a ser "aditivo" –que añade elementos a la redacción–. Esto implicaría que, si se rechaza el veto presidencial, prevalecería el texto original, es decir, la ley que se aprobó en el Congreso.
Sobre esta alternativa, el presidente de la UDI comentó que actualmente "el veto se está revisando con algunos abogados" y que ésa "es una posibilidad". "Nosotros vamos a tratar primero esta figura más jurídica, esta interpretación jurídica es algo que está revisando el presidente del Senado", señaló.
Pero sostuvo que "si no es así, hay que juntar los dos tercios" de los votos de la Cámara de Diputados y del Senado para poder insistir en la ley original. "Y vamos a ver quién está del lado de quién, quién está del lado de los usurpadores y quién está del lado de las víctimas. Nosotros, por supuesto, nos hemos situado al lado de las víctimas en este tema", subrayó.
Consultado sobre cuál es su pronóstico sobre lo que va a pasar, en definitiva con la Ley de Usurpaciones, Macaya señaló que "está difícil, yo reconozco, pero si finalmente se vulnera la voluntad democrática, que ya fue aprobada tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, el que va a tener que asumir el costo de hacerse responsable va a ser el Gobierno, y va a tener que darle la explicación a la ciudadanía".
"Desde la UDI, cierro cualquier opción a un tercer proceso constituyente"
El senador también abordó el proceso constitucional en curso, donde –según muestran distintas encuestas– la opción de votar "En Contra" del nuevo texto sería por ahora mayoritaria.
El parlamentario admitió que "los números no mienten y está difícil, pero que yo le tengo esperanza a algo" y es que "hay un porcentaje súper importante de personas que están indecisas hasta conocer el texto; y la encuesta Pulso Ciudadano, que se publicó ayer, establece que después de conocer el texto, la diferencia se va equiparando".
En ese contexto, comentó que "yo le pediría al Gobierno que, así como (en el proceso anterior) se gastó sus lucas en la difusión, en la impresión de constituciones para que la gente la pudiera conocer, ése es el trabajo que nosotros tenemos que hacer ahora, que la gente pueda conocer el texto".
A su juicio, "si es que eventualmente gana el rechazo –como lo están mostrando las encuestas hoy día– va a ser una gran derrota para Chile". "Acá no se saca nada con decir que la fuerza mayoritaria en el Consejo era la derecha, ésta va a ser una derrota para todos, va a ser una derrota para las personas que impulsamos originalmente este proceso, para el Presidente Boric, para la centroizquierda; aparecen políticos de todos los sectores firmando el acuerdo por Chile en el mes de noviembre del año 2019", apuntó.
Por esto afirmó que "nosotros estamos disponibles en todas las conversaciones que sean necesarias" para lograr un acuerdo y, en ese sentido, dijo sintonizar con el "llamado de atención" que realizó la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, sobre el proceso constitucional.
"Evelyn Matthei hizo una advertencia súper importante hace pocos días atrás. Y yo sintonizo absolutamente con lo que ella hizo. No estoy para nada distanciado. Creo que hizo un buen llamado de atención respecto de lo importante que es ahora llegar a los acuerdos necesarios para cerrar esto (...) Yo creo que lo que ella hizo fue generar un punto de inflexión, un llamado a atención, alinear de alguna manera a todas las fuerzas de Chile Vamos, hacer un llamado a atención también a las fuerzas mayoritarias del Consejo", afirmó.
También subrayó que "nosotros queremos aprobar; ella ha dicho esta semana también que lo único que espera es aprobar, es que haya un texto que tenga el consenso necesario para aprobar".
Con todo, en caso de no prosperar este nuevo texto constitucional, afirmó que "yo, desde la UDI, cierro cualquier opción a que haya un tercer proceso constituyente, por lo menos en un tiempo muy largo; o sea, yo creo que a varios de los que estamos en la generación de actuales políticos no lo vamos a ver". "Nosotros descartamos absolutamente la posibilidad de que se vuelva con el texto los expertos al Congreso, de que se tomen alternativas, se ha hablado también de una cuestión procedimental de que no se logren los tres quintos para que no haya plebiscito; me parece que son opciones de no hacerse cargo de los problemas, en política uno tiene que asumir la responsabilidad", enfatizó.