Durante esta semana se han intensificado las reuniones entre las distintas bancadas de consejeros y comisionados expertos y representantes de partidos políticos para analizar qué cambios se podrían introducir a la propuesta que terminó de votar esta semana el Consejo Constitucional y que ahora pasará a revisión de la Comisión Experta.
Si bien en el oficialismo se habían mostrado reacios a dar a conocer qué materias impulsan modificar, en los últimos días se han abierto a tener conversaciones y plantear reparos a temas como la redacción del Estado social y democrático de derecho o la libertad de elección en salud y sistema previsional, entre otros.
Es que al interior de los órganos que participan en el proceso constitucional se comienza a instalar la idea de resolver la mayor cantidad de nudos en la etapa que comienza mañana, cuando la Comisión Experta reciba el texto, y dejar lo menos posible o incluso evitar que se conforme la eventual comisión mixta que está considerada en el reglamento como mecanismo de resolución de discrepancias.
Las reglas del proceso establecen que la Comisión Experta deberá plantear sus sugerencias de cambio al Consejo. El pleno de este último podrá aprobarlas por tres quintos de los votos (30) o rechazarlas por dos tercios (33). Aquellas materias en que no se alcance ninguno de esos quorum se derivarán a una comisión mixta que plantee una redacción distinta que volverá al Consejo para su votación.
Una de las dudas sobre la comisión mixta es su conformación. El reglamento no menciona la fórmula en que se deben distribuir políticamente los cupos. Sí dice que “se conformará con seis integrantes de la Comisión Experta y seis del Consejo Constitucional, propuestos por cada mesa y ratificados por el pleno de los órganos a los que pertenecen, por tres quintos de sus miembros en ejercicio”. Asimismo, establece que las decisiones al interior de la comisión mixta se deberán tomar por tres quintos de los integrantes de la instancia (7 votos).
Quien se refirió a fines de agosto a la posible integración de la comisión mixta, fue el excandidato presidencial del Partido Republicano José Antonio Kast, quien en el programa de la colectividad “Semana RE” comentó que "a los seis electos los elige el pleno y en ella hay un grupo que tiene 33 consejeros y otro que tiene 17, entonces ahí se van a expresar las mayorías por lo que habrá seis electos que irán por una línea apegada a la derecha".
Para resolver esta situación, la mesa directiva del Consejo tiene una propuesta para que la instancia sea conformada de manera proporcional a las fuerzas que hay en el interior de los distintos órganos del proceso. Así, lo que se postula —aunque al cierre de esta edición no estaba zanjado completamente— es que en el caso de los cupos de consejeros, el Partido Republicano obtendría tres escaños, Chile Vamos uno y el oficialismo dos, mientras que en el caso de los expertos, serían tres cupos para la izquierda y tres para la derecha. Con esa integración, la derecha sumaría los siete cupos necesarios para aprobar las normas en la instancia.
Cálculos en las bancadas
Con lo anterior, en las bancadas está la sensación de que en la comisión mixta se repetirá lo ya visto en el Consejo por lo que algunos consejeros consideran que no valdría la pena llegar a esa instancia.
Por esta razón es que en el oficialismo ponen sus fichas en las observaciones que harán los comisionados, ya que en la Comisión Experta es la única instancia donde no son minoría. Entre las consideraciones de la izquierda cuentan con que se pueda repetir un acuerdo desde el Partido Republicano hasta el Partido Comunista (PC) como sucedió a finales de mayo entre los comisionados, con el fin de acercar posiciones respecto de la propuesta y no verse nuevamente en desventaja frente a la derecha que tiene los votos para aprobar y rechazar.
"Estamos contra la espada y la pared, nuestros comisionados tendrán que ir a todo o nada en las observaciones para ver si se puede enmendar el rumbo", comenta un consejero oficialista. De igual forma, plantean que la comisión mixta puede servirle al Partido Republicano como un "freno de emergencia" para ejercer su mayoría y así evitar algunos cambios que plantee la izquierda y puedan ser apoyados por los consejeros de Chile Vamos en el pleno.
Al respecto, el comisionado del PC, Alexis Cortés, precisa que “entre los comisionados expertos existe la voluntad de arribar al máximo de entendimiento. Ahora, no es posible hacer viable que estos entendimientos se traduzcan en modificaciones del proyecto constitucional si es que no hay un respaldo transversal de los partidos políticos para hacer proposiciones que sean viables en el Consejo Constitucional, porque en cualquier escenario siempre se requerirá de al menos dos votos del Partido Republicano".
En la oposición tampoco están del todo convencidos de llegar a la comisión mixta ya que creen que tendrán la capacidad de mantener sus mayorías para hacer cambios en la etapa de revisión de los expertos. Además, algunos sectores creen que extender la discusión a la mixta les quitaría tiempo para hacer campaña e informar a la ciudadanía acerca de la propuesta.
Sin embargo, al interior de los partidos de Chile Vamos hay quienes plantean que la instancia podría servir como el eslabón final de un acuerdo transversal al que puedan llegar los partidos políticos. En ese escenario, postulan que a la comisión mixta llegue una cantidad acotada de temas, no más de cinco, para que se resuelvan rápidamente.
Desde sectores del Partido Republicano comparten esta mirada de Chile Vamos y postulan que si hay temas que llegan a comisión mixta podría ser una muestra de su disposición a conversar para lograr un acuerdo transversal para dar los ajustes finales a la propuesta.
Buscando los perfiles adecuados
Entre los nombres que los partidos manejan de forma preliminar para integrar la comisión mixta aparecen varios que han liderado las discusiones durante el desarrollo del proceso.
El Partido Republicano apostaría por Antonio Barchiesi, Sebastián Figueroa y Luis Silva en el caso de los consejeros. En Chile Vamos se barajan varias posibilidades, entre ellas el delegado de bancada UDI, Arturo Phillips, y Germán Becker (RN).
En el oficialismo es menos claro. Desde la oposición ven con buenos ojos que Aldo Valle (PS) integre la instancia porque lo consideran más dialogante que el resto de Unidad para Chile. Sin embargo, algunas votaciones de Valle en las que se ha abstenido o apoyado redacciones propuestas por la derecha han molestado en la izquierda, por lo que estarían analizando otros nombres.
