Una ola de robos ha sacudido a los edificios Kandinsky y Miramar Reñaca, ambas torres afectadas por los socavones del 22 de agosto y 10 de septiembre, respectivamente, y que desde entonces se mantienen sin moradores tras la orden de evacuación emitida por la Delegación Presidencial Regional.
La noticia comenzó a circular primero en el edificio Miramar Reñaca, cuando en la noche del lunes la administración informó a sus residentes que mientras se efectuaban obras en los generadores eléctricos de los ascensores, se pudo advertir que desconocidos habían destrozado las puertas de siete departamentos.
Según se detalló en el escrito, los sujetos ingresaron a los apartamentos 510, 609, 610, 705, 706, 708 y 810. Sin embargo, el martes la cifra se extendió a un total de diez.
"En el lugar pudimos comprobar que, efectivamente, se encuentran diez departamento afectados, de los cuales algunos presentan solamente daños y otros con especies sustraídas", informó el subprefecto Carlos Zumaran, jefe (s) de la Brigada de Robos (Biro) de la Policía de Investigaciones de Concón.
De acuerdo a la información levantada por la PDI, se constató que el edificio Miramar Reñaca contaba con algunos accesos laterales (ventanas) que presentaban signos de haber sido forzados, además de puertas que se encuentran sin cerradura -dado que la edificación no cuenta con suministros eléctricos-, lo que facilitó el ingreso al recinto privado.
En cuanto a la data de los atracos, de acuerdo a lo señalado por el perito de la PDI, "hay departamentos que fueron afectados semanas atrás y otros anoche. Todo eso será materia de investigación".
Las diligencias de la Policía de Investigaciones se han centrado en el levantamiento de huellas dactilares en el sitio del suceso, además de la revisión de cámaras de vigilancia aledañas a la torre.
Robos en Kandinsky
Sumado a los diez robos registrados en Miramar Reñaca, durante la tarde de ayer el abogado de la inmobiliaria Besalco, el ex fiscal regional Pablo Gómez, advirtió que otros 38 robos se registraron en los 19 pisos del edificio Kandinsky. "De los 19 pisos, los 38 departamentos que hay habrían sido vulnerados y destruidos sus accesos".
Apuntó que "nosotros sostenemos que hay una responsabilidad de la autoridad, desde el momento en que prohíbe el ingreso de los titulares de esos departamentos y no inhibe a terceros que ingresen".
Asimismo, expuso que se evalúan tomar acciones legales.
"Abandono total"
Según consignó El Mercurio de Valparaíso, entre los residentes del edificio Miramar Reñaca predomina la incredulidad. Los propietarios, evacuados hace más de un mes debido al perímetro de seguridad establecido por la Delegación Presidencial Regional, no conciben que desconocidos hayan podido acceder a sus apartamentos burlando las medidas de seguridad de la autoridad.
Para Rodrigo Fernández, vocero de la comunidad de Miramar Reñaca, existe un "abandono total, porque no hay seguridad y se nos comprometió que nuestros departamentos iban a estar seguros. No nos dejaron siquiera dejar una persona por la noche o dejar el edificio con energía para poder tener las cámaras de seguridad y las alarmas prendidas".
En cuanto a las especies sustraídas, precisó que se encuentran principalmente artículos pequeños, como relojes y joyería: "Por eso creemos que pudo haber sido por la duna, porque no se podía mover con cosas muy grandes".
Lucía Rojas es una de las propietarias de los departamentos afectados. En su caso, sufrió el robo de un televisor y de diversos electrodomésticos.
"Afortunadamente, lo más valioso, gracias a Dios, ya pudimos sacarlo", dijo la vecina, quien cuestionó además la escasa asistencia por parte de las autoridades. "Nadie aparece de las autoridades. Realmente, nos han vulnerado todos nuestros derechos".
Añadió que "el Kandinsky y el Santorini son edificios apoteósicos, pero no así el Miramar. El problema es que a todos nos metieron en el mismo saco. A nosotros todo el mundo nos abandonó, diciéndo arréglenselas como puedan".
En este aspecto coincide Carolina Astorga, otra de las residentes del edificio: "Hay una muy mala disposición de todas las autoridades, porque sienten que porque es gente que tiene un poco más de dinero se tiene que hacer cargo de todas las cosas. Aquí no viven los millonarios. Es gente común y corriente de esfuerzo y al final nos han dejado a todos solos".
Marisol Miranda, la vicepresidente de la directiva de la junta de vecinos Reñaca Costa, jurisdicción en donde está emplazado los edificios afectados por socavones, señaló "nos enteramos por un vecino sobre los robos".
Aseguró además que "no hemos recibido nada como junta de vecinos por parte de las autoridades".
Por esa senda, indicó que "es muy extraño que haya sucedido todo ésto, ya que los administradores de los edificios se iban a hacer cargo de la seguridad interna de cada edificio, por ser propiedad privada. Y eso quedó estipulado desde el día uno".
Asimismo, sostuvo que durante la reunión con la delegación presidencial de Valparaíso "los abogados junto con las diferentes unidades estatales involucradas, informaron a los vecinos que, de acuerdo a leyes de seguridad, nadie podía accesar a los edificios afectados. Sin embargo, dada el apremio de los vecinos y su incertidumbre de habitabilidad, solicitaron permiso de retirar sus enseres con un protocolo especial, a sabiendas que no era legal accesar a la zona de riesgo".
"En cuanto al interior de los edificios cada administrador estaba en contacto con el Municipio a través de la delegación de Reñaca en dónde se iba a realizar el registro de todos los vecinos afectados para que pudieran accesar a retirar sus enseres", esgrimió.