Vivienda industrializada en Valparaíso.
El Mercurio
La licitación de 20 mil viviendas industrializadas anunciada por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) para 2024, en el marco del Plan de Emergencia Habitacional, se ha vuelto un nuevo foco de críticas al trabajo de la cartera. De acuerdo con lo que plantean algunos actores del sector, esta medida los estaría "discriminando" y tiene el riesgo de fomentar "actitudes anticompetitivas" en el mercado. Desde el año pasado el Minvu ha impulsado esta iniciativa como una herramienta para diversificar su oferta de soluciones habitacionales y, según argumenta, agilizar la construcción de viviendas. Para fomentar su fabricación, la glosa 6 de la Ley de Presupuestos de este año contempló una exención legal para las viviendas sociales industrializadas -que se mantiene igual en el proyecto de ley ingresado en el Congreso para 2024- eximiéndola de parte de la "permisología" habitual que tienen las constructoras en el proceso. El empresario Hernán Levy, dueño de Cerámicas Santiago, sostiene que "a fines de 2022, a través de la Ley de Presupuestos, el Minvu estableció una barrera de entrada al sistema de construcción tradicional de casas, dejándola en desventaja".
