Tras la ceremonia de cierre del proceso constitucional, desde la oposición valoraron el discurso del Presidente
Gabriel Boric, donde expuso los escenarios a seguir luego del Plebiscito del
17 de diciembre. Mientras que los ex consejeros del oficialismo se dividieron ante la idea de un tercer proceso.
El Mandatario indicó que en caso de ganar el A favor, "como Gobierno cumpliremos íntegramente con su correcta implementación e instalación" de la nueva Constitución. Pero si es rechazada, indicó que "nuestro Gobierno se dedicará sin pausa y con mucha energía a seguir trabajando y gobernando".
Al respecto, el presidente de la UDI, Javier Macaya, afirmó que "el Presidente puede decir muchas cosas, que no se involucra, que no tiene posición, pero cuando uno ve a toda su coalición inscrita formalmente en el En Contra (...) sería poco creíble que tenga una opinión diferente a su coalición".
"El Presidente también puede decir que este proceso no continúa en el futuro, pero cuando escucha las declaraciones de sus principales dirigentes (...) en el mediano y largo plazo, la izquierda ha demostrado que tiene paciencia en esta materia y no tengo ninguna duda de que van a volver a intentarlo", sostuvo Macaya.
El presidente de RN, Rodrigo Galilea, consideró que el Mandatario "abordó su rol como Presidente de todos los chilenos de decir que va a asegurar de que el Plebiscito del 17 de diciembre se realice de acuerdo a todas las normas legales y que todos los chilenos se puedan informar".
"También dio señales importantes en el sentido de que de ganar el A favor se comprometió a llevar a cabo e implementar al 100% y con todo el compromiso la nueva Constitución. Y creo que también dio una señal en que como RN estamos de acuerdo, de que si llegara a ganar el En Contra, simplemente esbozó que no hay ningún otro impulso constitucional", expresó Galilea.
El presidente de republicanos, Arturo Squella, dijo que el Gobierno tiene ahora la tarea de informar a los chilenos y que "es natural y se desprende también del mismo discurso, que tal como todos los partidos del oficialismo ya han señalado que están En Contra, el Presidente también lo está. Es relevante que mantenga la imparcialidad en la entrega de información".
"Desde la perspectiva al llamado a la unidad, a trabajar como país, es un poco el espíritu que a todos nos representa, particularmente se ven en la palabra de la presidenta del Consejo", acotó.
El ex consejero Luis Silva (republicanos) planteó que el discurso de Boric "me pareció bien, un discurso muy equilibrado, muy realista, al recordar que la Constitución es importantísima, pero al mismo tiempo no le va a cambiar la vida cotidiana a nadie de un día para otro. Por último el recordar, como lo hizo el Presidente, de la sabiduría del pueblo chileno cuando se expresa en las urnas, cosa que vale para cada elección".
"Me gustó el discurso del Presidente, un Presidente que llama con responsabilidad a hacerse cargo de este proceso y de la decisión de que en su gobierno, si esto se aprueba, se hagan todas las adaptaciones jurídicas y reglamentarias para que esta Constitución comience a regir. Y que si se rechaza, efectivamente no va abrir otro proceso. Eso habla de la responsabilidad que le compete como gobierno de no estar generando más inestabilidad", opinó la ex consejera Ivonne Mangelsdorff (RN).
"Yo creo que el Presidente Gabriel Boric habló como el Presidente de todos los chilenos y chilenas, en un acto solemne del Estado, no esperábamos otra cosa de él. Lo que está claro de que este texto ya queda en manos definitiva de la voluntad democrática de chilenos y chilenas", expresó el ex consejero Alejandro Köhler (IND-PS).
Sobre el discurso del Presidente, la ex consejera María Pardo (CS) cree que el Presidente ya había expresado estas ideas sobre los caminos tras el 17 de diciembre, pero acotó que "es importante darle ciertas seguridades a la ciudadanía y en ese sentido, me parece que el Presidente cumplió con su rol hoy de jefe de Estado y de Gobierno".
"Me parecen correctas las palabras del Presidente Gabriel Boric, él sitúa el momento histórico que estamos viviendo y que sea el pueblo de Chile que defina el futuro del texto", acotó la consejera Karen Araya (PC).
¿Tercer proceso?
En la oposición coinciden en que en caso de ganar el En Contra no debe haber un nuevo proceso constitucional, aunque algunos se mostraron abiertos ante la idea de que en caso de que gane el A Favor puedan introducirse cambios desde el Congreso al texto.
Sobre este último último punto, Galilea dijo que "la propuesta constitucional trae todos los mecanismos de una propuesta democrática para hacer eventualmente modificada, tiene quórum asequibles y ninguna Constitución está escrita en piedra. Si llegado el momento si es que hay suficientes consenso para hacer modificaciones no estamos cerrados a nada".
"No podríamos no estar dispuestos, porque una de las mismas definiciones de la Constitución es el quórum de 3/5 para reformarme (...) creo que ningún parlamentario podría restarse seriamente a la posibilidad", reconoció Silva.
Desde la izquierda, en tanto, los ex consejeros se dividen respecto a si es posible seguir un tercer proceso en cualquiera de los dos escenarios. Ante ello, Köhler manifestó que "yo soy partidario de que se cierre definitivamente, no hay espacio para un tercer momento constitucional y lo que yo estoy planteando (...) es decir, que independiente del resultado Chile, sus representantes en el Parlamento y Gobierno, debemos unirnos para responder a la demanda de chile" en distintos temas.
En tanto, Pardo aseveró que "yo creo que la ciudadanía no quiere un nuevo proceso, para mí eso es lo más importante, me parece que no hay ánimo ciudadano para un tercer proceso. Por tanto, no me parece una buena idea seguir empujando por un tercer proceso, lo que no quiere decir que sigamos impulsando las transformaciones y cambios en otros niveles".
Al contrario, Araya dijo que si bien "en este gobierno es imposible levantar un nuevo proceso constitucional, es difícil que eso ocurra, porque hay elecciones alcaldicias, presidenciales y parlamentarias (...) pero de todas formas yo no descarto que haya un siguiente proceso constitucional, debe ser el pueblo de Chile quien defina eso".
Mientras la ex consejera Paloma Zúñiga (RD) expuso que "no es precisamente nuestro rol definir una línea de lo que va a pasar después del 17 de diciembre, en caso de que se apruebe o rechace la propuesta, van a ser otros los actores políticos que van a definir eso. A mi juicio, la ciudadanía está en un punto donde deberíamos entrar en una pausa constitucional y esperar un poco que decanten estos dos procesos".