Profesores de Atacama llegaron hoy hasta La Moneda para entregar una carta al Presidente Gabriel Boric.
Héctor Aravena, El Mercurio
Su profunda preocupación expresó este miércoles la Unicef por la crisis educacional que se vive en Atacama, la que ha mantenido sin clases por más dos meses a miles de alumnos pertenecientes al Servicio Local de la Educación Pública (SLEP) de esa región.
A través de un comunicado, la agencia calificó la situación como una "grave vulneración de derechos" hacia los alumnos y llamó tanto al Ministerio de Educación como a los profesores paralizados a resolver el conflicto a la brevedad y a flexibilizar sus posturas.
"Ya lo constatamos con la pandemia: la suspensión prolongada de clases no sólo afecta el aprendizaje, sino también el bienestar socioemocional de las y los estudiantes, y arriesga gravemente que más estudiantes abandonen el sistema educativo, interrumpiendo sus trayectorias de vida de manera dramática", advirtió la Unicef.
Junto con esto, pidió tener como prioridad el bienestar de los alumnos por sobre los intereses de las partes involucradas.
Es "necesario considerar los costos que este paro está teniendo para sus vidas presentes y futuras, así como también los costos sociales que la exclusión educativa conlleva", enfatizó.
Asimismo, Unicef recordó que Atacama estuvo entre las regiones con más bajos resultados en el último SIMCE de Matemáticas, que 65% de los estudiantes de 2º Medio obtuvo resultados insuficientes (54% promedio nacional) y que tiene un índice de pobreza infantil de un 12,9%, superior al 10,5% nacional.
"Estos datos muestran que los niños, niñas y adolescentes afectados por la suspensión de clases viven en una alta vulnerabilidad, por lo que necesitan una educación de calidad", manifestó la agencia.
Por último, Unicef reiteró "su compromiso para brindar asistencia técnica" a fin de mejorar la implementación de la ley que determina el traspaso de los establecimientos públicos desde los municipios hacia los SLEP.