Un intenso debate generaron ayer los dichos del ex subsecretario del Interior,
Felipe Harboe, tras señalar a
EmolTV que el Gobierno realizó cambios en la
Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana (Enusc), cuyos resultados se darán a conocer esta semana.
El también ex convencional indicó que "si de números vamos a hablar, yo lo que sí creo que fue muy, muy grave, es que la actual administración alteró la fecha de toma de muestra de la encuesta de victimización, cosa que no había hecho ningún gobierno en los últimos 15 años", acotó.
Harboe agregó que "esta es una encuesta que está desde el año 2003, y resulta que
no tomaron las medidas entre septiembre y diciembre del año pasado, nadie sabe por qué, y resulta que la tomaron después. Entonces, nos van a dar los resultados esta semana, y probablemente los resultados no van a ser comparables con los años anteriores. El daño que se le hizo a la estadística criminal en Chile, es muy alto", sentenció.
Es más: según las proyecciones de Harboe, los resultados que se conocerán, probablemente entreguen cifras a la baja, sin embargo, remarcó que "no son comparables, no van a tener el valor que tenían antes, porque el momento de la toma de muestra, lo cambiaron".
Los dichos tuvieron inmediata repercusión en el Parlamento. Desde la oposición, criticaron al gobierno por "cambiar el termómetro porque no le gustan los resultados", y desde el oficialismo pidieron "no hacer juicios precipitados".
Más tarde, el Gobierno salió a reconocer que existió un cambio en la metodología, con motivo de la pandemia, pues tras aquella aplicación "la decisión que se adoptó fue que había que aprovechar la oportunidad para incorporar mejoras que han sido recomendadas hace varios años por parte de la academia, los expertos y el Instituto Nacional de Estadísticas", dijo el subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara.
Los ajustes para llegar a ese proceso de mejora y ajustes, explicó la autoridad -por ejemplo, que el sondeo que se verá en 2024 tendrá representación comunal y más de 50 mil encuestados-, implicaron que se tuviera que aplicar una Enusc de transición. "Este itinerario tenía la dificultad de interrumpir la secuencia de la encuesta puesto que el 2022 el INE piloteó la nueva encuesta en lugar de aplicar la antigua. Por esa razón se decidió hacer una ENUSC de transición con apoyo de Microdatos de la Universidad de Chile", subrayó.
Claves de la encuesta Enusc
Desde el año 2003, el INE, a través de un convenio con la Subsecretaría de Prevención del Delito, realiza la Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana (Enusc). Se trata de un estudio que permite conocer la cantidad de personas y hogares que han sido víctima de delitos, así como la percepción de inseguridad en la población.
En conversación con Emol, Pablo Galain, experto en materia de seguridad de la Universidad Andrés Bello, precisa que "las encuestas de victimización sirven para conocer los datos de la realidad delictiva a la hora de diseñar políticas públicas y de implementarlas y/o aplicarlas".
16,9% de los hogares declaró haber sido víctima de un delito en la encuesta Enusc de 2021
Si bien aclara que "no son definitivas para el éxito de una política criminal preventiva respecto al delito", plantea que "sí son un elemento importante para conocer la magnitud de determinados fenómenos, la asiduidad con la que se producen, los lugares donde existen mayores probabilidades de comisión de determinadas conductas delictivas, entre otros factores que permiten aplicar una determinada estrategia de prevención del delito".
A su vez, la encuesta permite medir qué porcentaje de todas esas víctimas denunció ante las autoridades competentes haber sufrido la comisión de un delito. "Esto sirve para conocer el grado de confianza que la ciudadanía tiene en las instituciones encargadas de la prevención (policía, organismos de contralor, etc) y reacción al delito (policía, fiscalía, Poder Judicial)", aclara el experto.
Según los datos que arrojó la
última Enusc,
en 2021 la victimización alcanzó su nivel más bajo desde que se inició la aplicación de la medición, en 2012, con un 16,9% de hogares que declaró haber sido víctima de un delito. Sin embargo, la sensación de inseguridad también marcó un registro histórico, con un 86,9%, el mayor de la serie. De hecho, por ese entonces, las cifras ya habían puesto en entredicho que los niveles de delincuencia en el país eran "heredados".
Pero también era relevante considerar el contexto, puesto que la encuesta fue aplicada en plena pandemia. "Sin duda, tal como lo deja la encuesta nacional de Seguridad, estuvimos el 2021, en todo el contexto de pandemia, en el momento de victimización más baja de la historia de Chile desde que partió la encuesta, pero a pesar de ello, estábamos en el momento de más alto temor por parte de la ciudadanía", reconoció la ex ministra del Interior, Izkia Siches.
La relevancia de los datos comparables
Pía Greene, experta en materias de seguridad de la USS, comenta que "es un error lo que pasó. El Gobierno insiste que va a ser comparable, pero creo que es un error haberlo cortado, porque se va a perder comparabilidad".
Greene precisa que "para hacer políticas públicas, en cualquier ámbito, es necesario tener la estadística, los datos, y que sean reales para poder focalizarlas de acuerdo a las necesidades de cada sector o territorio. Es decir, si tenemos una población con más temor pero no tiene tanta victimización, las políticas públicas son distintas, tal como fue el caso que se dio a conocer en 2021".
"Para hacer políticas públicas, en cualquier ámbito, es necesario tener la estadística, los datos, y que sean reales para poder focalizarlas de acuerdo a las necesidades de cada sector o territorio. Es decir, si tenemos una población con más temor pero no tiene tanta victimización, las políticas públicas son distintas, tal como fue el caso que se dio a conocer en 2021".
Pía Greene, experta en seguridad USS
"Ocurre lo mismo si son delitos contra la propiedad, como teníamos antes en Chile, o si tenemos delitos violento, como ahora; y qué tipo de delitos violentos son, homicidios, violaciones, robos, etc....", precisa Greene. Y advierte que sin estadísticas, especialmente en materia de delincuencia, "te vas quedando atrás".
Esto, porque "la delincuencia es tan dinámica y avanza con tal celeridad, que no eres capaz de ponerte al día. De hecho, las cifras que vamos a ver en la nueva Enusc, ya van a estar atrasada sobre lo que está pasando ahora, como los secuestros y homicidios. Por eso es clave mantener las comparaciones anteriores, para ver cómo han ido evolucionando y saber qué hacer con cada política pública", cerró.
En la misma línea, Galain complementa que "lo relevante de la sanción de leyes penales y de la implementación y aplicación de la política criminal es que ellas se basen en datos que puedan medirse a lo largo del tiempo y en los mismos períodos, por ejemplo, los últimos doce meses, porque esto es lo que permite justamente comparar periodos y medir prevalencias".
"Por supuesto que hay que considerar las variables excepcionales que pueden haber incidido en los distintos periodos, a saber, una crisis humanitaria o económica, la inmigración ilegal masiva, las tasas de desempleo, etc., pero eso es un problema distinto. Por poner un ejemplo fácil de comprender, según distintos períodos del año algunos delitos callejeros (violentos o por destreza) pueden aumentar o disminuir según el tiempo en el que las personas ocupan su tiempo en espacios públicos. Por eso deberían medirse y comparar los mismos periodos".
En lo que refiere a los delitos en general, si se cambian las fechas de medición no deberían producirse variaciones importantes, pero estas podrían darse en delitos específicos, como el ejemplo que acabo de poner
Foco en las víctimas
El académico de la UNAB también hace énfasis en que la "medición del delito" muchas veces opera como una medición de éxito de un Gobierno, cuando lo central es poner el foco en las víctimas, quienes, a su juicio, deberían disponer de procedimientos más participativos para resolver casos penales.
"La medición del delito también se utiliza con fines electorales o electoralistas, para la mera discusión político-partidaria, en tiempos donde se 'gobierna a través del delito', donde se mide el éxito del Gobierno según suban o bajen las cifras del delito y donde al final del día se definen elecciones nacionales en base a las cifras del delito y los discursos de 'seguridad/inseguridad' que dan lugar a estrategias legislativas y administrativas de 'securitización'", expresa Galain.
No obstante, reflexiones que para las víctimas en particular, "muy poco incide una 'Defensoría para victimas' y menos incide la variación de las fechas en las que se les recaba la información de la encuesta. Para ellas sería relevante que puedan disponer de procedimientos más participativos al momento de resolver los casos penales en los que se ven envueltas por causa del delito", agrega.
"Las herramientas de la Justicia Restaurativa en las que ellas pueden participar junto al autor del delito que reconoce su responsabilidad en los hechos y junto a miembros de la comunidad interesados en la pacificación social, en donde se llega a acuerdos de reparación del daño, son mucho más importantes para las cifras del delito (reincidencia, satisfacción de las víctimas, pacificación social) que cualquier otra estrategia de prevención que se quiera diseñar utilizando encuestas como la Enusc", sentenció.