En el 1° Juzgado de Garantía de Santiago inició la mañana de hoy lunes la audiencia de formalización de la investigación en contra de empresarios por delitos tributarios, infracciones aduaneras y lavado de activos, entre otros. Estos estarían involucrados en el mayor fraude tributario de la historia del país, lo que alcanzaría un momento total cercano a los 240 mil millones de pesos.
En la instancia, el fiscal jefe de Pudahuel, Eduardo Baeza, relató que los imputados operaban a través de "
una asociación criminal estructurada bajo la figura de seis bandas o clanes criminales con características propias de asociaciones ilícitas", dentro de las cuales cada uno de sus integrantes desempeñaba "roles o funciones específica".
Según relató el persecutor, la banda operaba al menos desde el 2014 hasta el 2020.
Clan Canessa
La organización habría operado entre los comerciales 2014 a 2020, liderada por José Antonio Pavez Canessa, quien "junto a sus brazos operativos se dedicó a administrar de facto una sofisticada red de sociedades que emitían y facilitaban facturas falsas a otras empresas a cambio de una comisión económica, las que posteriormente eran registradas en la contabilidad de las empresas receptoras e incorporadas en sus declaraciones de impuestos, posibilitando así la rebaja indebida de sus cargas tributarias o la obtención de devoluciones indebidas", dijo el persecutor.
Además, el fiscal explicó que la banda criminal también se abocaba a "autoemitirse" estos documentos tributarios para "dar una facturada de autenticidad a las operaciones comerciales que consignaban sus facturas".
Clan Galás
El fiscal aseguró que esta se trata de una organización criminal que operó entre el 2015 y 2017 y era liderada por Juan Víctor Galás Rojas. "Creó una red societaria compuesta por 14 empresas dedicadas a la emisión de facturas falsas, con la finalidad de posteriormente traspasar y utilizar dicha documentación tributaria falsificada por el líder o a través de su sociedad (…), incorporándola dentro de su contabilidad y posteriores declaraciones ante el Servicio de Impuestos Internos", expusó.
En ese sentido, aseveró que utilizó "dicha documentación en sus operaciones de exportación de teléfonos celulares, maliciosamente falsas, las que se hacían de manera sobrevalorada y o ficticia, y en la que además se presentaban otros documentos ideológicamente falsos necesarios para la confección de tales operaciones de salida (…) con el objeto de obtener devoluciones indebidas de impuestos por parte del Fisco de Chile".
Clan Barraza
Este clan habría aperado entre los años 2015 a 2019, liderada por Olga Barraza Quezada. En primera instancia, la organización se habría abocado a "rebajar de manera fraudulenta su carga impositiva y tributaria".
La organización, a su vez, solicitó y obtuvo de "manera ilícita y fraudulenta" devolución de IVA exportador, acto por el habría defraudado al fisco.
Clan Croxatto
El fiscal aseguró que "esta es una asociación ilícita que operó a lo menos entre los años comerciales 2016 a 2020, liderada por Osvaldo Sacco Croxatto".
El imputado "se dedicó a rebajar de manera fraudulenta e ilícita su carga impositiva y tributaria, defraudando al fisco", afirmó el persecutor.
Clan Nexus
Baeza afirmó que "es una asociación ilícita que operó a lo menos entre los años comerciales de 2015 a 2018, liderada por Jorge Cuello Leiton, Nubia Luna Fernández y Cecilia Leiton Guerrero, quienes se dedicaron a rebajar de manera fraudulenta e ilícita las cargas impositivas y tributarias de su sociedad, defraudando al fisco (…) por el concepto de impuesto a las ventas y servicios".
En ese sentido, relató que distintas "empresas emitieron en conjunto 168 facturas ideológicamente falsas al clan Nexus, con la finalidad de posibilitar la comisión de ilícitos tributarios".
Clan Barriga y Polanco
Finalmente, el persecutor afirmó que esta se trata de "es una asociación ilícita que operó a lo menos entre los años comerciales 2016 a 2019, liderada por Cristian Barriga Barriga y Ricardo Polanco Madariaga, quienes se dedicaron a rebajar de manera fraudulenta e ilícita su carga impositiva y tributaria, defraudando al fisco por un monto total de 2.038.195.608 pesos por el concepto de impuesto a las ventas y servicios. Asimismo emitieron y facilitaron facturas ideológicamente falsas al clan Nexus, posibilitando la rebaja indebida de cargas tributarias de estos".
Sumado a ello, el persecutor aseguró que "también se dedicó a defraudar al fisco al omitir maliciosamente la presentación del Formulario 22, encontrándose en la obligación legal de realizarlo".
Con todo, el fiscal afirmó que entre el "31 de agosto del 2015 a 23 de noviembre del 2017, la asociación ilícita que lideraba el imputado Juan Galás Rojas, se dedicó a realizar declaraciones maliciosamente falsas en sus operaciones de exportación de teléfonos celulares, con el objeto de sobrevalorar las mercancías exportadas y o dar una falsa apariencia de realidad a salidas que en realidad eran ficticias".
"Para lograr dicho objetivo, adulteraban la cantidad y o contenido o el valor de las mercancías de exportación y acompañaban documentos ideológicamente falsos", agregó.
Además, indicó que "durante los años comerciales 2015 a 2019 el imputado José Antonio Pavez Canessa, en su calidad de administrador de hechos de las 16 sociedades, facilitó maliciosamente más de 100.000 facturas falsas a 3.308 contribuyentes, que dan cuenta de operaciones comerciales inexistentes".
También afirmó que los clanes disminuyeron el imputado a la renta que debían pagar y además "aumentaron indebidamente el crédito fiscal IVA y el crédito fiscal por impuesto específico al petróleo diésel, que tenían derecho a ser valer en relación al débito fiscal que debían enterar en arcas fiscales", entre otros ilícitos.